San Francisco de Macoris.- Grupos populares de esta ciudad realizaron un entierro simbólico de la justicia y otras instituciones del Estado, por la situación que vive esta ciudad y el país.
Decenas de personas participaron en la marcha que culminó en el cementerio las mercedes de esta ciudad, donde de manera simbólica dieron sepultura a la justicia, al ministerio público, salud pública, educación, obras públicas, policía nacional, entre otras.
Los participantes vociferaban consignas en contra del gobierno y sus funcionarios, pedían justicia para los asesinatos de un dirigente del Falpo, ocurrida aquí a principio de agosto y exigían la ejecución de una serie de obras.
Cargando ataúdes con los nombres de las instituciones que iban a sepultar simbólicamente, los manifestantes hacían hincapié en el encubrimiento del asesinato del dirigente Bladimir Lantigua Baldera, de cuyo hecho acusan a miembros de la policía nacional y cuyos responsables todavía no han sido identificados.
La actividad de protesta organizada por el Frente Amplio de Lucha Popular (FALPO), la Unión de Juntas de Vecinos de la provincia Duarte, el Frente Estudiantil de Liberación Amin Abel Hasbún, la Federación de Organizaciones Campesinas, entre otras.
El vocero nacional del FALPO Raúl Monegro, dijo que el entierro popular forma parte de la lucha que vienen realizando en demanda que las autoridades cumplan con los reclamos que enarbolan, entre ellos justicia contra los asesinos del dirigente popular Bladimir Lantigua Baldera, la construcción de la plaza de la cultura, el hospital regional de especialidades, la carretera Macorís – Rio San Juan, la avenida de circunvalación, encachado de la cañada grande, entre otras obras prometidas reiteradamente por las autoridades del gobierno.
“Estamos sepultando a los funcionarios que no funcionan, al fiscal de la provincia Duarte, Regis Victorio, que no se sabe si es fiscal o un oficial de la Policía, porque se ha hecho cómplice con los asesinos de Vladimir Lantigua”, dijo Monegro.
La actividad de protesta se inició en la avenida Libertad esquina Papi Olivier, recorrió varios sectores de la ciudad.
Un fuerte contingente policial evitó que los manifestantes se aproximaran al palacio de justicia, donde tenían programada una parada, desviándose los participantes por la calle San Francisco, partiendo hacia el parque Juan Pablo Duarte.
También la policía impidió que los participantes se colocaran frente al edificio que aloja la gobernación provincial, en cuyos alrededores fueron apostados numerosos agentes fuertemente armados.