WASHINGTON, Estados Unidos (EFE).- El ex gobernador del Estado de Illinois Rod Blagojevich, condenado el año pasado por corrupción, pidió este miércoles a un juez federal que cancele el nuevo juicio que estaba previsto y le dicte sentencia, informaron los medios estadounidenses.
En su moción, presentada ante el Tribunal Federal en Chicago, Blagojevich dijo que los crecientes gastos en abogados se están tornando onerosos para él y que, si bien no admite su culpabilidad, prefiere que lo sentencien ya en lugar de someterse a otro juicio con los correspondientes gastos de defensa.
Blagojevich dimitió en 2009 en medio de acusaciones de que había procurado beneficiarse a cambio de designar a la persona que reemplazara en el Senado de Estados Unidos a Barack Obama, después que éste dejara su escaño al ser elegido presidente.
El gobernador fue acusado por la solicitud de sobornos, fraude postal y otros cargos de corrupción.
"El jurado, en cambio lo condenó por haberle mentido a la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), lo cual acarrera una sentencia de hasta cinco años de prisión".
El año pasado el primer juicio de Blagojevich concluyó con el jurado indeciso acerca de 23 de los 24 cargos formulados. El jurado, en cambio lo condenó por haberle mentido a la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), lo cual acarrera una sentencia de hasta cinco años de prisión.
Algunos de los otros cargos, que reaparecerían si se somete a un segundo juicio, acarrean sentencias de hasta 20 años de prisión.
En su moción Blagojevich indicó que si se cancela el segundo juicio "no serán necesarios los fondos" para este procedimiento y el procesamiento "no le costará más dinero a los contribuyentes".
Asimismo en su presentación Blagojevich dijo que aunque se supone que el gobierno iba a pagar por la defensa del ex gobernador, los abogados defensores no han recibido pagas en casi nueve meses y no están preparados para un segundo juicio que debería comenzar en abril.
En el primer juicio Blagojevich usó un fondo de 3 millones de dólares para pagar a una docena de sus abogados defensores, pero ese dinero se ha terminado. EFE