SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La Dirección del Partido Revolucionario Moderno (PRM), desde su Comisión de Energía y Minas, emitió su valoración sobre los planes de venta de la Central Termoeléctrica Punta Catalina (CTPC), luego de que el pasado 17 de diciembre el Presidente Danilo Medina dijo que la venta de las acciones de la nueva sociedad comercial CTPC tiene el propósito de “recuperar la inversión” realizada en su construcción.
“Se trata de una extraña afirmación, puesto que de los 2,500 millones de dólares invertidos en la construcción de la central – de acuerdo a lo dicho por el ministro de Hacienda Donald Guerrero-, 617 millones serán propiedad en acciones de la CDEEE y 5 millones del FONPER (Fondo para las Empresas Publicas Reformadas), para un total de 622 millones de dólares”.
En un comunicado, la Comisión de Energía y Minas del PRM explica que según el esquema de venta anunciado, la CDEEE venderá el 50% de sus 617 millones, es decir, 308.5 millones, a un inversionista privado que se quedaría con la administración y control de una central que ya le está contando al pueblo dominicano más de tres mil millones de dólares, no 2,500 millones como ha dicho el ministro de Hacienda.
El Gobierno decidió que la diferencia entre los 622 millones y los 2,500 millones, ascendente a 1,878 millones de dólares sea registrado como una deuda de la nueva sociedad privada con el Estado dominicano para ser pagada en 30 años.
Citan al administrador de Punta Catalina, quien detalló a la prensa que la central tendrá venta bruta anual de 561 millones de dólares y beneficio neto de 240 millones. Sobre esos datos, analizan que el inversionista privado recuperaría su inversión en dos o tres años, mientras que al Estado necesitaría 30 años para recuperar los 1,878 millones de dólares.
“Esto significa que si se vende el 50% de la termoeléctrica, el Gobierno estaría traspasando 120 millones de beneficio neto al inversionista privado que tan solo habría invertido 308.5 millones de dólares, el 10% de su costo”.
El principal planteamiento de la Comisión de Energía y Minas del PRM es que si Punta Catalina queda bajo pertenencia del sector privado, el pueblo dominicano pagaría dos veces por la planta.
A continuación, la declaración explicativa del PRM:
El pueblo pagaría dos veces a Punta Catalina
“Lo que no dice el Gobierno es que para amortizar la inversión de los 308.5 millones y la deuda de los 1,878 millones el inversionista privado incluirá un porcentaje extra en el precio de la energía que le venderá al mismo pueblo que construyó la central y le hizo el préstamo”.
En proyectos de generación de electricidad, la inversión para instalar una central eléctrica se recupera el inversionista mediante un componente del precio de venta al público que se denomina costo de capacidad. Se trata de un costo fijo que se aplica durante la vida financiera del proyecto, 30 años en este caso, y que, si es elevado, así también lo será el precio final de la energía.
“Con la decisión del Gobierno los dominicanos pagaremos a Punta Catalina dos veces. Primero, ya la pagamos con la inversión hecha para construirla, aportando del presupuesto nacional casi el 70% del capital y también pagando capital e intereses de la parte adquirida mediante préstamos internacionales y locales. Segundo, ahora se le pretende imponer al mismo pueblo que la pague otra vez mediante la compra de la energía a un precio inflado durante tres décadas precisamente para que el inversionista privado pueda recuperar su inversión y pagar la deuda que le concedió el Gobierno justamente con dinero del mismo pueblo”.
El PRM propone…
Como propuesta, el PRM expone que la única manera de evitar tales prácticas es si el Estado mantiene la propiedad de la central.
Las razones que presentaron se resumen en que el Estado asumir un periodo de amortización más largo que 30 años (40 años, por ejemplo) porque el capital tomado a crédito por el Estado es menor que el costo total y las plantas de carbón tienen vida útil productiva promedio de 45 años. Eso permite que el pago de intereses y capital sea menor que con el privado y el precio final de la energía también.
Para garantizar que las plantas sean operadas de manera eficiente y técnicamente correcta, libre del clientelismo político, el PRM propone que se contrate una firma internacional experta en operación y mantenimiento de plantas termoeléctricas de carbón.
Tal contratación se haría mediante un contrato de largo plazo que se derive de una licitación publica internacional. Una iniciativa en ese sentido fue hecha pública el 14 de octubre del 2015 por la propia CDEEE mediante la publicación de una licitación internacional No. CDEEE-01- 2015. Licitación que luego se abandonó sin mediar explicaciones.
También citan que en la página 125 de su informe final la Comisión Especial sobre Punta Catalina presidida por Monseñor Agripino Núñez Collado en el 2017, recomiendó al Gobierno preservar la central como propiedad del Estado y en caso de contratar su administración que se hiciera a una firma sin conflicto de intereses en el mercado eléctrico dominicano.
Dicen que con esa estrategia el país saldrá ampliamente beneficiado, porque Punta Catalina podrá vender energía por debajo de 8 centavos de dólar el kilovatio hora y el Estado recuperara la inversión en menos de 15 de los 45 años de vida en producción.
Consecuencias negativas de un contrato por 30 años.
Por otro lado, al mantener de manera casi fijo durante 30 años el precio de generación de Punta Catalina a las distribuidoras, debido al anunciado contrato de tres décadas, se introduciría una rigidez insostenible de precios elevados en el mercado eléctrico dominicano que impediría a la sociedad beneficiarse en el futuro de la actual revolución energética, basada en cambios tecnológicos, de combustibles y de explotación de fuentes renovables, todo tendente a abaratar sustancialmente los costos de abastecimiento de energía en el mediano y largo plazo.
De igual manera, las empresas distribuidoras atadas durante 30 años a ese contrato con Punta Catalina también asumirían condiciones inconvenientes y pierden capacidad para mejorar sus ingresos con iniciativas de negocios más eficientes. Además, si en algún momento futuro el Estado decidiera vender al sector privado las empresas distribuidoras, la tarea podría resultar casi imposible debido a la vigencia de un compromiso contractual a precio y tecnología fija por un periodo de tiempo desproporcionado.
En síntesis, tan largo periodo para un contrato con precio fijo y garantía soberana expone al Estado dominicano a eventuales demandas y arbitrajes internacionales con el propietario del contrato, si en el futuro resultare insostenible el precio acordado debido al impacto de la abundancia previsible de la oferta de gas natural y otros cambios citados.
Presidente Medina ¿cuánto ha invertido su Gobierno en Punta Catalina?
Finalmente, el PRM ratifica su reclamo de que antes de proponer la venta de Punta Catalina el Gobierno tiene la obligación de explicar a los dominicanos cuanto realmente se ha invertido en la construcción de la central. Es lamentable que luego de seis años de construcción la población no disponga de ningún documento oficial sobre la inversión realizada en una central que ahora se pretende vender dizque para “recuperar la inversión”. ¿Cuál inversión Señor Presidente?
El PRM propone que antes de plantear la venta de Punta Catalina el Gobierno debe ordenar una auditoría técnica y otra financiera sobre la pertinencia de los gastos y deudas incurridos durante la construcción.