SANTO DOMINGO, República Dominicana.-La corrupción ha sido una de los peores vicios y debilidades del gubernamental Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en sus gobiernos de 1996 al 2000 y de 2004 al 2012, hasta el punto que sus propios dirigentes la han admitido y denunciado, pero no han hecho nada para combatirla.

Los altos dirigentes y funcionarios del PLD en momentos se han escandalizado o simplemente han admitido y criticado la corrupción de sus compañeros de partido y de gobierno.

Presidente Leonel Fernández se declaró incapaz

El presidente Leonel Fernández admitió que era incapaz de enfrentar la corrupción entre los altos militares de su gobierno, por temor a que lo mataran.

Así lo revela el cable número 22151, del 28 de octubre de 2004, enviado por la Embajada de los Estados Unidos en Santo Domingo al Departamento de Estado en Washington. Asimismo, según dos cables de la Embajada de Estados Unidos, uno del 6 de mayo de 2005 y otro del 27 de agosto 2008, el presidente Leonel Fernández admitió la existencia de corrupción en su Gobierno, pero se declaró incapaz de enfrentarla y temeroso de que, si actuaba contra los militares corruptos, lo derrocaran o lo mataran.

“Eso está más allá de mi capacidad de intervenir. Si un presidente latinoamericano interfiere seriamente con ese tipo de asunto de los militares, se arriesga a que atenten contra su vida”.

“Comentando sobre las fuerzas armadas, Fernández dijo que se sobreentiende que los militares de alto rango a menudo toman el 10% de los recursos que pasan por sus manos como “comisión”, añadiendo que las fuerzas armadas es una institución corrupta.  Dijo que si se movía demasiado rápido cancelando a los oficiales corruptos, su propia posición estaría en peligro”.

Miguel Cocco se sintió escandalizado

El 29 de marzo de 2009, el entonces director general de Aduanas, Miguel Cocco, declaró: “Nosotros no esperábamos que en un gobierno presidido por un partido fundado por un hombre impoluto como el profesor Juan Bosch, se estuviesen cometiendo esas indelicadezas. Hay un estado de podredumbre  en sectores del Gobierno”.

Y dijo más: “Hace falta una mano sancionadora y dura para ponerle coto a eso”. “Es que la corrupción en esta sociedad, por la impunidad que hay en todos los niveles, está haciendo prácticamente inviable los mejores propósitos de la nación dominicana. Y yo digo, con firmeza, que hay corrupción tanto en el sector privado como en el sector público". Cocco falleció el 20 de mayo de ese mismo año, 2009.

Euclides Gutiérrez Félix

En dos ocasiones, Euclides Gutiérrez Félix, superintendente de Seguros, miembro fundador del PLD y figura emblemática en el Comité Político de esa organización, ha declarado en entrevistas con los medios que existe corrupción en el gobierno.

Su más reciente declaración fue dada el 15 de abril de 2011 en el programa Versión Transparente, de Héctor Arias (conocido como El Talibán):

“Hay funcionarios que roban, que son ladrones”, expresó Gutiérrez Félix, en una entrevista en la que se defendió de las denuncias hechas por las periodistas Nuria Piera y Alicia Ortega, sobre supuestos actos de corrupción en la gestión del funcionario en la Superintendencia de Seguros.

Años antes, el diciembre de 2009, en una entrevista concedida  a Gustavo Olivo Peña, entonces jefe de redacción del semanario Clave y del portal Clave Digital, Gutiérrez Félix admitió la existencia de corrupción en el gobierno del PLD.

“Hay mucha corrupción en este gobierno, y no lo podemos negar”, expresó con claridad el funcionario y alto dirigente peledeísta.

El pleito de los Rodríguez en el INDRHI

En el año 2009, el presidente Leonel Fernández destituyó del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI) al reformista Héctor Rodríguez Pimentel, y en su lugar nombró a quien antes había ocupado esa posición, el dirigente peledeísta Frank Rodríguez.

El Instituto Nacional de Desarrollo y Crédito Cooperativo (IDECOOP) acusó a Héctor Rodríguez Pimentel de utilizar RD$12 millones de la cooperativa del INDRHI de forma inapropiada.

Asimismo, un reportaje de Alicia Ortega revelaba que Rodríguez Pimentel usó más de RD$661 millones del INDRHI sin autorización.

En septiembre de ese año, Frank Rodríguez denunció que Rodríguez Pimentel había incurrido en serias irregularidades en el manejo de los recursos de esa entidad del Estado, hasta el punto de supuestamente dejarla sin dinero.

La respuesta de Héctor Rodríguez Pimentel no se hizo esperar, poniendo en entredicho la idoneidad de Frank Rodríguez:

“Frank Rodríguez cuando estuvo al frente del IAD nunca convocó al Consejo Directivo. Él está hablando como si no fuese un funcionario de este gobierno. Al que menos le conviene estar haciendo cuestionamientos es a él. Que no toque esa tecla".

"El Estado es una continuidad, este es un gobierno que apenas tiene un año, cualquier suplidor que tenga una deuda con esa institución (el INDRHI), se le da seguridad de que se va a cumplir el pago, porque el Estado es una continuidad, no es una gestión, porque no ha cambiado el Gobierno. Este gobierno apenas tiene un año y parece que a Frank piensa que fue que cambió el Gobierno.

“A él lo que le conviene es que se calle la boca, que se frene, porque hay teclas que si se tocan a él no le va muy bien”, dijo Rodríguez Pimentel.

En esos momentos Frank Rodríguez dispuso que el expediente con las irregularidades que le atribuyó Rodríguez Pimentel fuera depositado en la Dirección de Persecución de la Corrupción Administrativa (DPCA), que dirige Hotoniel Bonilla.

El 15 de julio de 2011, reporteros de Acento.com.do, cuando el INDRHI dio apertura a su oficina de Libre Acceso a la Información Pública, reporteros de Acento.com.do le preguntaron en qué habían quedado sus denuncias contra Rodríguez Pimentel, lo motivó la siguiente respuesta de Frank Rodríkguez:

“Todo lo que ocurre en el Indrhi y ocurrió en la gestión pasada, lo tiene Hotoniel Bonilla. Usted le pregunta a Hotoniel Bonilla. Todas las informaciones que él nos ha pedido se la hemos enviado. Yo no soy el responsable del combate a la corrupción. Yo hablo de lo que nosotros hacemos en el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi). Él está ahí en frente, entonces pregúntele a él”.

El PLD y la corrupción: una bandera arriada

En el ejercicio del poder, el PLD arrió definitivamente la bandera de la lucha contra la corrupción, en la que sustentó sus años de oposición, primero contra los gobiernos de Joaquín Balaguer, entre 1973 y 1978,  luego contra los de Antonio Guzmán y Salvador Jorge Blanco, de 1978 a 1986. De igual manera, denunció la corrupción de Balaguer en los gobiernos de 1986 a 1994, aunque este último gobierno comenzó a declinar, porque buscaba el apoyo del líder del Partido Reformista para los comicios de 1996, como efectivamente obtuvo y llegó al poder por primera ocasión.

Altos dirigentes del PLD.Posteriormente, al volver a la oposición, aunque ya sus propios dirigentes se habían visto envueltos en escandalosos casos de corrupción de 1996 a 2000, retomó la denuncia de los hechos de corrupción contra el gobierno de Hipólito Mejía y el PRD, de 2000 a 2004. Incluso, de este último período el entonces ex presidente Leonel Fernández dijo que había sido presa de la corrupción sistémica y de una “megacorrupción”.

Durante los gobiernos del Partido Revolucionario Dominicano, de 1978 a 1982 y de 1982 a 1986, el PLD, entonces liderado por Juan Bosch, publicó dos ediciones especiales de su periódico semanal Vanguardia del Pueblo, a la que tituló “Album de la corrupción”. Las denuncias mostraban el nivel de vida los funcionarios perredeístas antes y después de llegar al gobierno, las casas que se habían comprado, los vehículos y otros bienes.

En 1996, ya retirado Bosch, la corrupción y el supuesto peligro de “fusión” de República Dominicana con Haití fueron los temas sobre los cuales basó su campaña el PLD, unido al Partido Reformista, que llevaron como candidato a Leonel Fernández, contra el Partido Revolucionario Dominicano, que llevó como candidato a José Francisco Peña Gómez.

Incluso, antes de esas elecciones el entonces aspirante presidencial Leonel Fernández llegó a denunciar que la corrupción se llevaba todos los años 30 mil millones de pesos del Estado, una suma muy elevada si se considera que el presupuesto nacional en el último gobierno de Joaquín Balaguer (1994-1996) apenas rondó los 26 mil millones de pesos (Hoy el presupuesto dominicano sobrepasa los RD$400 mil millones).

En los hechos, lejos de disminuir o de corregirse, la corrupción se ha desbordado en los gobiernos del PLD, todos del presidente Leonel Fernández (1996-2000; 2004-2008 y 2008-2012). Se han destapado varios escándalos de dirigentes y funcionarios que han acumulado fortunas multimillonarias, como el caso del senador por San Juan de la Maguana, Félix Bautista; o los casos de los escándalos en el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), del PROMIPYME, el de la Sund Land, entre otros.

Pero no se produce ninguna reacción importante de parte del Presidente Fernández, ni de las autoridades de la Procuraduría General de la República, ni mucho menos de la Dirección de Persecución de la Corrupción (DPCA).

Tirar piedras hacia atrás

Durante la campaña interna del PLD, por la candidatura presidencial de esa organización, el tema de la corrupción fue puesto en debate sólo por dos de los precandidatos peledeístas: Danilo Medina y Francisco Domínguez Brito.

Pasada esa contienda interna, el discurso de Danilo Medina cambió. Ya no tocó el tema de la corrupción, y se concentró en repetir que él era el verdadero cambio y que redimiría a los pobres, si era elegido presidente “con la ayuda de Dios”. Fue elegido, y prometió poner freno a la corrupción, y destituir a los funcionarios que fueran señalados hasta por el rumor público como posibles corruptos. La sociedad dominicana sigue esperando.

Ciertamente, en el presente gobierno del presidente Danilo Medina no se ha producido todavía escándalos de corrupción semejantes o parecidos a los de las administraciones del presidente Fernández. Pero la gente esperaba que los funcionarios de la administración Fernández que estuvieron envueltos en escándalos o que mostraron un enriquecimiento acelerado e inexplicable, por lo menos fueran investigados. Ante la insistencia de la opinión pública y cuando se llevaron a cabo intensas protestas reclamando castigo a los corruptos, el presidente Medina dijo que prefería mirar hacia delante y no tirar piedrása hacia atrás.

CORRUPCIÓN