SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El abogado Eddy Olivares aplaudió la decisión de la Junta Central Electoral de no utilizar equipos contratados con la empresa Indra Sistemas para el recuento de las boletas y la identificación y registro de las huellas de los electores.
El ex titular de la JCE afirmó que la confianza es esencial para las elecciones y la utilización de estos equipos, cuestionados por la mayoría de los partidos políticos y la opinión pública, afectaría sensiblemente la credibilidad de las próximas elecciones.
Consideró además que el informe de los asesores informáticos debe servir también para que el pleno de la Junta Central Electoral tome la decisión de demandar a la empresa Indra Sistema, S.A.
Lea íntegro el documento:
DECLARACIÓN SOBRE EL CONTRATO SUSCRITO ENTRE INDRA SISTEMAS, S.A. Y LA JCE
Estimo correcta la decisión de la Junta Central Electoral de no utilizar en futuras elecciones los dispositivos contratados con la empresa Indra Sistemas, S.A., para el recuento de las boletas y la identificación y registro de las huellas de los electores.
La confianza es esencial para las elecciones y la utilización de estos equipos, cuestionados por la mayoría de los partidos políticos y la opinión pública, afectaría sensiblemente la credibilidad de las próximas elecciones.
En ese mismo sentido, considero que este informe de los asesores informáticos debe servir también para que el pleno de la Junta Central Electoral tome la decisión de demandar a la empresa Indra Sistema, S.A.
Por otro lado, la empresa española, Indra Sistemas, S.A., debió abstenerse de participar en la licitación para la automatización del escrutinio y el registro de concurrentes, debido a que estaba a cargo, desde el 2 de junio del 2014, del Proyecto para la Implementación del Sistema Informático para la Gestión de las Compras y Contrataciones del Estado Dominicano.
El hecho de que Indra estuviera sirviéndole al mismo tiempo al gobierno, en el renglón de compras y contrataciones, y a la Junta Central Electoral, en un aspecto tan sensitivo como el del escrutinio, fue una grave imprudencia que afectó la credibilidad de los comicios del 2016 y que nunca debió producirse.
Al margen del Informe de la Investigación Especial al estatus y situación financiera entre la empresa Indra Sistemas, S.A. y la Junta Central Electoral (JCE), realizado por la Cámara de Cuentas de la República, ratifico la propuesta que, mediante comunicaciones fechadas el uno y el 27 de junio del 2016, respectivamente, le formulé al pleno de la JCE, cuando era uno de sus miembros titulares, a los fines de demandar a la referida multinacional por incumplimiento de contrato y por los daños causados al Estado dominicano.
En lo relativo al contrato suscrito con la influyente empresa española Indra Sistemas, S.A., la JCE está en el deber de velar por la defensa del interés nacional, consciente de que esta proveedora no cumplió a cabalidad con su obligación de entregar los dispositivos de identificación y registro, los de recuento de boletas y los módulos de impresión, en perfectas condiciones, tal y como lo observaron en sus informes la Misión de Observación Electoral de la Organización de los Estados Americanos (MOE/OEA), la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), la Unión Interamericana de Organismos Electorales (UNIORE) y Participación Ciudadana (PC).
La proveedora Indra Sistemas, S.A. debe responder por los innegables vicios ocultos de los dispositivos, los cuales fueron comprobados al momento de ponerse en funcionamiento el día de las elecciones.
Está claro que el informe de la Cámara de Cuentas no es suficiente como para que la JCE pueda justificar pagarle los equipos dañados a Indra, en razón de que conforme al artículo trigésimo del contrato suscrito entre la Junta Central Electoral y la multinacional Indra Sistemas, S.A., es al Tribunal Superior Administrativo, y no a la Cámara de Cuentas, a quien le corresponde conocer y decidir sobre todo litigio, controversia o reclamación resultante del referido contrato o relativo al mismo, así como de su incumplimiento, interpretación, resolución o nulidad.