SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La diputada nacional, Guadalupe Valdez, propuso nueva vez que se eliminen del presupuesto del Congreso las partidas para ayudas sociales proporcionadas a los legisladores.

Mediante una misiva enviada a Acento.com.do, la diputada estableció que si logran que estos fondos desaparezcan del enfoque que se le da, evitaran ser cuestionados como lo están siendo, incluso por la adjudicación a los suplidores de estos productos. “No es posible que los legisladores debamos estar defendiéndonos de que tal empresa está calificada para dispensar electrodomésticos, arroz o mosquiteros. Esta no es nuestra función”.

Manifestó que Ha defendido que para realizar una buena labor legislativa se requieren recursos, pero estos deben estar exclusivamente destinados a lo que tiene que ver con la función de legislar y fiscalizar, en representación del pueblo.

Carta integra:

Diputada Nacional Guadalupe Valdez

El 31 de mayo del año 2011, a 9 meses de ejercer como legisladora, dirigí una carta al Presidente de la Cámara de Diputados, Abel Martínez, expresando que devolvía un ingreso de 100 mil pesos que había sido depositado en mi cuenta para agasajar a las madres y que tampoco retiraría ni los bonos ni los regalos que la Cámara de Diputados había puesto en disposición de los Diputados con motivo del día de la madre.

En la misiva, señalaba que solamente recibiría aquellos recursos que permitan desarrollar mi función legislativa, tal y como indica la Constitución.

Esta es la actitud que asumí y he mantenido desde entonces, en cada una de las entregas de artículos, bonos y cualquier otro beneficio que se ha puesto al servicio del diputado, diputada, y que considero no entra en las competencias de la función del legislador.

En diciembre del año 2012 introduje una propuesta para Eliminar las partidas del Congreso a funciones que no están establecidas en la Constitución, tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados. Señalamos en torno al Proyecto de Ley de Presupuesto General del Estado del 2013 que más de 654 millones de pesos deberían ser retirados de los presupuestos del Congreso. No fue aprobada la propuesta, pero si fuimos duramente cuestionada por varios legisladores.

En cada ocasión que hemos sido preguntada por este tema, siempre hemos manifestado nuestra oposición a este tipo de ayuda social que en nada sirve para combatir las desigualdades sociales y la pobreza que golpea a las mayorías del país y que si puede ser utilizado como práctica clientelar que mancilla dignidades y voluntades.

En cada uno de los informes de rendición de cuentas que por ley debemos presentar en cada período legislativo, están claras y detalladas las cuentas que hemos utilizado desde la Diputación Nacional; cuánto y en qué hemos utilizado los recursos que nos han entregado.

He defendido y defiendo que para realizar una buena labor legislativa se requieren recursos, pero estos deben estar exclusivamente destinados a lo que tiene que ver con la función de legislar y fiscalizar, en representación del pueblo.

Igualmente considero que muchas de estas ayudas, aun cuando lleguen a los destinatarios necesitados, apenas les puede solucionar momentáneamente una carencia. Creo que si existe una verdadera voluntad de cambiar estas situaciones de desamparo, de carencias de gran parte de la población dominicana, se requiere de políticas públicas enfocadas en esa dirección, se necesita institucionalidad, presupuesto, transparencia y rendición de cuentas.

En esta ocasión, consideramos que es oportuna la situación que se ha planteado desde la sociedad dominicana en torno a los regalos que se dan desde el Congreso, para proponer nuevamente la eliminación de estos fondos de ayudas sociales de los presupuestos de los organismos legislativos.

Tenemos que promover un desempeño legislativo basado en propuestas legislativas, que contribuyan a garantizar el Estado Social y de Derechos que establece la Constitución. Y que el pueblo, nos elija por las propuestas legislativas y las acciones de fiscalización para que las políticas públicas brinden servicios básicos que mejoren la vida de la gente con dignidad.

Si logramos que estos fondos desaparezcan del enfoque que se le da, nos evitaremos ser cuestionados como lo estamos siendo, incluso por la adjudicación a los suplidores de estos productos. No es posible que los legisladores debamos estar defendiéndonos de que tal empresa está calificada para dispensar electrodomésticos, arroz o mosquiteros. Esta no es nuestra función.

Guadalupe Valdez
Diputada Nacional.