MIAMI, Florida.- La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) lamentó y criticó la decisión de cinco precandidatos presidenciales del Partido Republicano de los Estados Unidos, de boicotear, según señalan, un debate electoral organizado por la cadena televisiva Univisión, al tiempo que consideraron la medida como “insensible que perjudica el derecho del público a estar debidamente informado”.
El presidente de la SIP, Gonzalo Marroquín, expresó en una carta enviada hoy a los candidatos del Partido Republicano, que “nos preocupa el daño que esta actitud hace al proceso democrático que debe ser acompañado por amplitud de criterios e información”.
“Más allá de las disquisiciones de los representantes del Partido Republicano y de los criterios editoriales adoptados por Univisión, lo que nos preocupa profundamente, no es sólo la determinación de que se haga un boicot contra un medio de comunicación, lo que de por sí contraviene principios sobre derecho del público a la información y sobre libertad de prensa, sino que lo imponga alguien que en el futuro pueda asumir la misma actitud desde un sillón en la Casa Blanca”, señaló de manera enfática el presidente de la SIP.
Los hechos
Los candidatos republicanos Mitt Romney, Rick Perry, Jon Huntsman, Michele Bachmann y Herman Cain, se adhirieron esta semana a un boicot contra la cadena de televisión hispana más importante Estados Unidos, promovido por legisladores de ese mismo partido de la Florida, en solidaridad con el senador federal, Marco Rubio, de origen cubano- americano.
“Creo -dijo Marroquín- presidente del diario guatemalteco Siglo 21, que los candidatos presidenciales han actuado corporativamente en defensa de uno de sus colegas en medio de consideraciones electoralistas, sin considerar la responsabilidad que les cabe en materia de respeto a la libertad de prensa”
La controversia, refiere la SIP, surgió luego de que la oficina de Rubio acusara a Univisión de supuestamente presionarlo para que aceptara participar en un programa en el que se abordaría el tema migratorio, a cambio de suavizar una investigación periodística sobre su cuñado, Orlando Cicilia, sentenciado en 1987 por el delito de narcotráfico, cuando el senador tenía 16 años de edad.
Univisión, cuya sede central está en Miami, negó la acusación. En el conflicto, no quedó claro por qué los políticos reclamaron estos hechos ahora, cuando la investigación fue difundida el 11 de julio por la televisora, expresa la Sociedad Interamericana de Prensa.
“Creo -dijo Marroquín- presidente del diario guatemalteco Siglo 21, que los candidatos presidenciales han actuado corporativamente en defensa de uno de sus colegas en medio de consideraciones electoralistas, sin considerar la responsabilidad que les cabe en materia de respeto a la libertad de prensa”.
Además de calificar de “insensible la medida del boicot”, Marroquín consideró desproporcionado que se le haya pedido a Univisión que despida al jefe de Noticias, Isaac Lee, por su responsabilidad en el asunto. “Se trata de una forma indirecta y ‘elegante’ de silenciar a un medio, pero de silenciarlo al fin”.
El boicot fue impulsado a través de una carta enviada al Comité Nacional Republicano por los diputados estatales David Rivera y Carlos López-Cantera y por el presidente del Partido Republicano partido en el condado de Miami-Dade, Erik Fresen. Los políticos también solicitaron una disculpa pública por parte del canal y el despido de su presidente de Noticias, conforme a los detalles suministrados por la Sociedad Interamericana de Prensa.
En un comunicado y en declaraciones a la SIP, Lee negó que haya ofrecido suavizar la información en contra del cuñado del senador ni que Univisión utilizara esa información para presionar la comparecencia del senador en un programa, según agregan los ejecutivos de la SIP.