Sin que sea perfecta y a pesar de mostrar muchas contradicciones en sus resultados, Gallup es la encuesta más confiable en el país. Sus predicciones, igualmente, las más acertadas.

Pero a unos pocos días de las famosas primarias, que nunca han sido tan aparatosas y derrochadora de fondos públicos, aun la Gallup no ha hecho presencia en la guerra de las encuestas.

Inclusive ni aquella donde Leonel le ganó la primaria a Danilo en el 2008, haciendo uso abusivo del poder, es comparable con las primarias actuales.

Hemos visto que en un mismo día sale una encuesta con Leonel arriba por 29 puntos y otra con Gonzalo aventajando con 19 puntos. Una de las dos esta mintiendo o probablemente la dos, pero obviamente uno de los dos candidatos tiene que estar arriba y en tal caso sería el ganador de las primarias del PLD.

El problema es cual será la diferencia entre ambos. Si es muy pequeña, digamos 2 o 3 puntos se armará la de villa diego, porque ninguno aceptará la derrota. Así tendremos el primer caso de una crisis electoral de grandes proporciones donde no se juega la presidencia de la república.

En el caso del PRM la cosa es diferente porque se vota por padrón y todas las encuestas dan como ganador a Luis Abinader por amplio margen.

La Gallup puede marcar la diferencia porque si sus resultados favorecen a Leonel, la desesperación volverá loco a los danilistas y pondría en grave peligro la estabilidad económica del país, por el derroche de dinero para cambiar esos resultados en menos de una semana.

Leonel lo hizo con Danilo para ganarle a Hipólito que estaba en la delantera 10 puntos dos meses antes de las elecciones presidenciales del 2012. Ahora estamos a 10 días de las primarias.

Si es Gonzalo el que muestra mayor aceptación entonces Leonel debe estar preparado para su entierro político.

Pero estos comenzaran a pregonar que la encuesta fue comprada por el gobierno y que esos resultados son irreales.

Es bonito ver estas luchas internas de los partidos porque es parte del sistema democrático. Estados Unidos es el mejor ejemplo, donde los candidatos a las primarias se tiran con cañones y misiles.

La diferencia está en el abusivo uso de los recursos públicos para promover al candidato que el presidente quiere que gane. Es la desgracia de este país que ha costado miles de millones que son pagado por el bolsillo de los contribuyentes sin importar su tendencia política.

En este momento casi todos los ministros del gobierno y gran parte de su personal están distribuidos en cada provincia del país para promover a Gonzalo Castillo. Eso incluye desde gastos millonarios para vehículos, combustible, viáticos, dinero en efectivo, fiestas, mítines y obras inmediatistas, hasta vallas y afiches que adornan las carretas y ciudades, todo pagado con fondos públicos.

Si usted les pregunta a 10 dominicanos quien gana las primarias del PLD, 8 responderán “bueno, con los cuartos que está gastando el gobierno para que gane Gonzales yo veo la cosa difícil para Leonel”

Es la percepción generalizada. Lo que ha prevalecido por mucho año. Es la paradoja del poder invencible. No gana el que tienen mayor simpatía sino el que tenga más dinero para comprar votos y controlar la logística.

Y si Gonzalo gana y compite con Abinader o Hipólito ahí nos terminamos de joder.

Anécdota final: en el 2008 al PRD lo dejaron prácticamente sin transporte porque los que había contratado para movilizar a los votantes fueron sobornados por el gobierno pagándole 5 veces más, que sumado a la compra masiva de votos auguraban una derrota inevitable para el partido opositor. Eso y otras tantas barbaridades costaron más de 100 mil millones reflejado en el déficit fiscal que alcanzó la astronómica cifra de 8.5% del PIB al terminar el año.

Ahora puede ocurrir algo peor.