La semana pasada ocurrió un hecho lamentable en la cámara de diputados. El miércoles se reunió la comisión de justicia para conocer una propuesta de modificación del código civil específicamente el artículo que aprueba el matrimonio infantil.

Habían sobre la mesa dos propuestas: una que sugería se permita el matrimonio a partir de los 18 años y otra que proponía a partir de los 16 siempre que el conyugue tenga una diferencia de hasta ocho años, o sea una niña de 16 con un hombre de 24 o viceversa.

La comisión está conformada por 15 miembros, pero ese día estaban presente diez y no se llegó a un acuerdo porque las posiciones estaban empate, cinco personas que apoyaban cada posición.

Concluida la jornada dos diputados denunciaron en sus cuentas de twitter lo sucedido y de inmediato se activaron las alarmas de la sociedad porque era difícil entender que personas estuvieran de acuerdo con que una niña de 16 años contraiga matrimonio oficial.

Empezaron las especulaciones sobre quiénes eran los cinco que habían votado a favor del matrimonio infantil, se revelaron nombres pero ellos fueron desmintiendo cada uno por diferentes vías la acusación que sobre ellos pesaba. Pero ¿con cuáles argumentos estos diputados favorecían que una niña de 16 años contraiga matrimonio?

En sus argumentos es que veo lo más lamentable. Resulta que ellos se estaban basando en el tema de la edad por eso entendían que una niña de 16 años ya no entraba en la categoría de la infancia, sino de la adolescencia y que si los padres estaban de acuerdo podían asumir un matrimonio.

Es sumamente grave que congresistas no entiendan esta diferencia. Esta discusión ameritó la intervención de Unicef quien aclaró que todos y todas son niños y niñas hasta no entrar en la mayoría de edad según la legislación de cada país.

Ahora bien, saliendo del tema legal entremos al ámbito social. El matrimonio infantil en República Dominicana es un problema social y cultural cuya solución no vendrá con la prohibición del mismo porque intervienen muchos factores, sobre todo el económico.

Estoy de acuerdo con que se elimine del Código Civil el "derecho" de una niña a contraer matrimonio siendo menor de edad pero entiendo que eso no es suficiente. Una persona que le guste establecer relaciones con menores de edad lo seguirá haciendo aunque un código se lo prohíba, lo que se debe hacer es también aumentar la pena para esos hombres que cortejan a niñas e incluir dentro de esa penalidad a los padres y madres que consienten este tipo de relación. Ustedes se preguntarán ¿y si el adulto la embaraza siendo menor no debe asumir su responsabilidad? Claro que sí, pero desde la cárcel porque también se dice que permitir el matrimonio es la salida que tienen los padres y madres de que el pedófilo asuma la culpa. Como vemos el tema es complejo. Que se prohíba la edad y que se aumenten las penas es mi propuesta.

Al final el Presidente de la Cámara de diputados y el Presidente de la República buscaron apagar el fuego ofreciendo la información de que el partido de gobierno está comprometido con la eliminación del matrimonio infantil. Al día siguiente se rechazó a unanimidad. ¿Seguiremos viendo esta práctica de que se espere a un escándalo en las redes para tomar las decisiones correctas?

La única pregunta que finalmente me formulo y que también se hizo mucha gente es ¿Esos diputados tendrán hijas menores de edad? ¿Aprobarían el matrimonio de su niña de 16 años? Quedarán por responder…