La población latina en el estado de La Florida supera los 4.4 millones de personas, por lo cual su voto en estas elecciones de medio término, el 6 de noviembre, representa una fuerza decisiva para romper el monopolio de los congresistas y senadores republicanos, sobre todo de los de origen cubano como Mario Díaz-Balart, quienes encarnan y promueven una mentalidad política de atraso, xenofobia e injusticias sociales que perjudican los proyectos de vida de la gente, en particular la de numerosos inmigrados latinos a suelo estadounidense.
Es por ello que los latinos-naturalizados ciudadanos norteamericanos tienen ahora la oportunidad de ejercer su derecho al voto para cambiar ese submundo anormal floridano que manejan los republicanos desde sus espacios de poder político. Es una cuestión de dignidad personal, de decencia y de justicia movilizar el voto contra esos congresistas cubanoamericanos que han contribuido a la exclusión de otros inmigrantes, a la reducción del Medicare y a dificultar el bienestar del pueblo estadounidense.
Muchos cubanos residentes en los Estados Unidos, deseosos de ampliar las visitas familiares a la isla o de recibir a sus seres queridos, se han visto perjudicados por el pensamiento y accionar fascista de esos congresistas que lucran con sus posturas anticubanas, reviviendo una guerra fría ya superada. Ellos han creado un ecosistema sociopolítico viciado en la Florida, que solo los beneficia a ellos con grandes dividendos económicos y de clientelismo.
La libertad está en manos de cada votante y los ciudadanos honestos que deseen limpiar el camino para realizar sus sueños pueden sumarse a estas peticiones en los siguientes links: https://secure.avaaz.org/en/community_petitions/person_Un_cambio_por_La_Florida/ y https://action.unitedwedream.org/petitions/mario-no-for-hate-no-mas-dinero-para-el-odio. Cada ciudadano debe votar, porque si no participa en las elecciones está ayudando a que sean más los votos que favorecen a los políticos indeseados; y no debe anular la boleta ni dejarla en blanco, porque el resultado sería el mismo: más votos para los que seguirán viviendo del dinero de los contribuyentes. Como dijo Rosa Luxemburgo:“Los que no se mueven, no se dan cuenta de sus cadenas”.