En la entrega anterior vimos algunas estadísticas sobre la violencia en la República Dominicana (1/4), ahora centramos nuestra atención en las causas de la violencia delictiva, observadas no solamente en la República Dominicana, sino en Latinoamérica.

Causas de la violencia en la República Dominicana.

Es indudable que, para generar un cambio en las autoridades, se requiere mayor participación ciudadana en el análisis y diagnóstico de la situación de violencia delictual en el país, a fin de determinar cuáles son las áreas geográficas y poblacionales de mayor incidencia de la violencia, factores comunes que la facilitan, causas estructurales y coyunturales, propuestas de soluciones, legales, o de otro tipo para la construcción de un espacio de seguridad ciudadana democrática, de manera más participativa.   Toda esa información debe ser transparente y accesible al público en general, vía las TIC, de manera que los líderes de cada comunidad o grupo humano puedan acceder a la misma y utilizarla en dicha construcción de un espacio de seguridad ciudadana.

La República Dominicana hizo un intento, lanzando un programa en el año 2005 denominado Barrio Seguro, que concluyó en el 2012, cuando inicia el período presidencial Danilo Medina.  Este programa constaba de varios componentes, de los cuales aún quedan residuos, algunos positivos, como la reforma policial, cuya ley acaba de ser aprobada, y otros con resultados difusos o desconocidos, tales como el “control de armas” y el “control de bebidas alcohólicas”.  El centro de llamadas 9-1-1 vino a implementarse de lleno, en el gobierno del Presidente Danilo Medina, cuya incidencia se ha sentido mayormente en las emergencias de salud, que en las policiales

En un artículo publicado en la revista Forbes México, escrito por Santiago Roel de Semáforo Delictivo, y publicado en el portal web de la revista el 23 de marzo del 2017, se señala como causas de la violencia delictiva en México, de acuerdo a la encuesta realizada por Semáforo Delictivo, las siguientes:

  1. Corrupción
  2. Ineficacia de las autoridades
  3. Poca transparencia
  4. Narcomenudeo
  5. Falta de oportunidad para los jóvenes
  6. Falta de interés de los ciudadanos

El informe del PNUD Seguridad Ciudadana con rostro humano 2013-2014 [http://www.latinamerica.undp.org/content/dam/rblac/img/IDH/IDH-AL%20Informe%20completo.pdf  http://www.latinamerica.undp.org/content/dam/rblac/img/IDH/IDH-AL%20Informe%20completo.pdf] alude a la terrible paradoja de América Latina, que a pesar de su “crecimiento económico” y de la “reducción de la pobreza”, es la región del mundo con mayor desigualdad en el planeta.  Indica dicho informe que el panorama Latinoamericano es el de “una región que no ha podido extender el goce de los derechos económicos y sociales” a la mayoría de la población.  La transmisión intergeneracional de la pobreza y la baja movilidad social” sumados al limitado alcance y eficacia de los Estados latinoamericanos en atender estas necesidades.  En este contexto, el delito y la violencia son limitantes, indica el informe, del pleno desarrollo de las personas en la región latinoamericana.

Al tema de la violencia y el delito se contrapone el de la “seguridad ciudadana”, que el informe define “la condición de vivir libre de temor y libre de necesidad”. 

Las seis amenazas principales a la seguridad ciudadana señaladas por el Informe del PNUD son:

  1. Delito callejero: robos.
  2. Delito callejero ejercido en contra y por jóvenes: se indica que la juventud es un segmento crítico de la población víctimas y victimarios de los delitos.
  3. Violencia de género: se indica que la mujer es un segmento crítico de la población víctima de la violencia.
  4. Corrupción: en el sentido de la apropiación indebida de los bienes públicos.
  5. Violencia ilegal por parte de los actores estatales: que va desde el abuso policial, las violaciones de DDHH, así como la participación de actores estatales en la delincuencia organizada
  6. Delincuencia organizada: “es toda acción delictiva organizada y prolongada en el tiempo cuya capacidad de sustraer y proveer bienes y servicios implica la corrupción, la coacción y, en algunos casos, la violencia.

Por simple lectura o escucha de las noticias de un día cualquiera se puede validar que este país está afectado por estas seis amenazas.