Apuntes de la conferencia que quise exponer en el recien XII Congreso del Pensamiento Hostosiano.
(Ilustraciones del Dr. Odalís G. Pérez, hermeneuta de cumpleaños, a quien dedico este trabajo, por encima de la pandemia)
La filosofía política del pensamiento de Eugenio María de Hostos, está fundamentada en la democracia, la autodeterminación de los pueblos, en la justicia social, en el poder popular, la igualdad entre los sujetos y la democratización del conocimiento, en todos los sentidos del saber.
Se trata de un filósofo orgánico, comprometido, en su caso, con la proyección del pensamiento libertario del sujeto, fundamentado en la vitalidad de lo ético y lo moral, dos conceptos que hoy en día carecen de vigencia en el plano cotidiano de la sociedad dominicana, a la entrada de un nuevo gobierno constitucional en nuestro país.
Estamos ante una filosofía política que se antepuso al naciente imperialismo anglosajón que, desde un principio, amenazaba con arbitrar el convivir de nuestras naciones, interfiriendo en la vida interna de nuestros países, sin respetar nuestro proceder institucional. Accionar que se mantine vigente, hoy en día, desde una práctica bochornosa y repudiable, desde diferentes instancias de nuestra vida republicana.
La filosofía del pensamiento político hostosiano, vigente hoy…y necesario… más que nunca, en su reclamo de construcción de una sociedad más justa y un Estado responsable del convivir en democracia, apegado a la constitucionalidad y al respeto a los derecho ciudadanos.
Es suficiente ver el actual panorama político nacional, donde se necesita una mirada anticolonialista que sitúe, de manera clara y precisa, el respeto a la pragmática libertaria y de autogestión de nuestro país, en este panorama internacional multipolar, regido por los paradigmas de la globalización.
El Hostos libertario, democrático y revolucionario, como filósofo de la rebeldía y el uso de la razón, lo necesitamos en nuestras barrios, en nuestras escuelas, en nuestras universidades, en cada hogar dominicano y latinoamericano, para que despierte la conciencia crítica y el pensamiento creativo, como una ondeante bandera ideológica que sirva de base frontal, al nuevo discurso político que necesitan nuestras organizaciones sociales, gremiales o sindicales y partidarias.
La Filosofía política hostosiana es actualmente necesaria en la sociedad dominicana y debe estar vigente en todas las áreas de nuestro convivir de sujetos activos, en movimiento, basada en la pertinencia de una educación ciudadana reflexiva o en compartir de saberes que parta del razonamiento o de la reflexión crítica, donde se habilite al sujeto a mirar más allá de su entorno inmediato, hasta aprender a leer y a escribir en el aire, como una impronta política inminente, en cualquier rediseño curricular nacional, sin importar la carrera académica que sea, porque el fin último de la formación del sujeto, ha de ser su actuar ético, moral y creativo, ante la realidad contextual.
Esa vigencia de la filosofía política del pensamiento hostosiano, no lo proclamo yo en este país, sino que fue un compromiso asumido por el profesor Juan Bosch, cuando se dispone a editar las obras completas de Hostos, haciendo de su pensamiento el canon de su vida, hasta más allá de su muerte, aunque hoy, falsos seguidores, traicionen su legado político y humaniítico.
Fue Juan Bosch quien se dispuso volver al pensamiento y al filosofar político hostosiano, cuando la naciente oligarquía dominicana, junto con el poder eclesiástico en este país, lo había excluido, sacándolo de todo cuanto se acercara al saber libertario y justiciero en el sujeto, en nuestra sociedad.
La defensa de la dignidad del ser es el centro de la filosofía política hostosiana. Para Hostos, la honestidad, la transparencia y el actuar ético del sujeto, es el núcleo de la vitalidad y la sanidad del convivir ciudadano. Esos principios, hoy en día, están ausentes en nuestra sociedad. Hay que levantar la filosofía política hostosiana en nuestras escuelas y en cada hogar de esta sociedad.
La filosofía política del pensamiento hostosiano, debe ser resaltada, asumida y emulada, hoy más que nunca, en nuestras escuelas, sindicatos y universidades, básicamente en nuestros partidos políticos, ahora que estamos en la novedad del tripartidismo político en el plano nacional PLD, PRM y FP), como un compromiso patriótico de defender la soberanía, la libertad y la justicia en la República Dominicana y en todo el Caribe, para no seguir "muriendo de asfixia moral". La gran "pregunta inocente" es: ¿Está la sociedad política dominicana preparada para responder a esos paradigmas hostosiano?
Entiendo que todavía nuestra sociedad no está preparada para responder a esos principios, por lo que es el momento de accionar con voluntad política de Estado, si en verdad amamos está nación, porque de lo contrario, seguiremos acorralados entre los intereses de la oligarquia empresarial, el negocio de la educacion y el desarrollismo económico neoliberal.
Es el momento de asumir la filosofía política hostosiana, en los hechos, haciendo de nuestro decir, un hacer. Es la hora precisa de darle sentido, vida y eficacia participativa a la filosofía política hostosiano, junto a los principios éticos de Juan Bosch, el discípulo de Hostos que nos alertó, con su ejemplo, que Hostos, su pensamiento, su quehacer politico antillanista y su filosofía política de soberanía del ser, aún están vigentes, y se niegan a "morir de asfixia moral".