¡El Coronavirus nos lo quitó! Nos arrebató a quien veíamos caminar en salud, cantar en salud, sensible, jocoso, humilde, cotidiano pero único en su grandeza interior, palpitante por la música, por su gente, por su patria. El virus causó la muerte de Víctor Víctor. ¡Ay, sí que duele! Se nos ha ido el gran cantautor de Nuestra América; el que nos guardó taaantos lindos recuerdos y obras en una memorable "Mesita de noche"; el Víctor Víctor de todos los cubanos que bailamos un bolero cubano-dominicano en aquel festival histórico del que fue artífice: Boleros de Oro. Es nuestro Víctor Víctor que anduvo la Habana de los años 70 junto a Sonia Silvestre, a Noel Nicola, a Silvio Rodríguez y a otros trasnochadores plenos de sueños y de canciones, de música y poesía, unidos por la hermandad de siempre entre cubanos y dominicanos. Cuando nos apretamos las manos hace cuatro meses en el supermercado Nacional, no imaginé que iba a ser la última vez, y volví sobre mis pasos para aprovechar y decirle de mi admiración y cariño de siempre. Ni sospechaba que fue un privilegio debatir decisiones por la cultura dominicana, cuando coincidimos en el Ministerio de Cultura, allá por el año 2013. Conocerte fue un privilegio que me dio tu Patria, nuestra Patria. Despedirte duele, como le duele a la cultura de la Nación dominicana.
¡Adiós, poeta de la bachata! ¡Adiós, hermano dominicano! ¡Adiós, amantísimo cubano de corazón, ícono de la cultura dominicana, hombre sencillo, gestor cultural, caminador del Santo Domingo colonial donde siempre viviste! Guardaremos tu amor y tu legado en la Mesita de noche de la memoria musical latinoamericana, de la que siempre serás uno de los imprescindibles. Y rezaremos por la paz que tu alma merece. Y aunque no nos conformemos con tu partida, te despedimos con un intenso aplauso de agradecimiento por la obra de tu vida y por tu aporte a la cultura dominicana y latinoamericana. Gracias y adiós, Víctor Víctor, perooo: “No me pidas que te deje, no lo vas a conseguir, el amor que llevo dentro, el amor que llevo dentro (por tiiii) me acompañará hasta el fin…” ¡¡¡Te amaremos siempre!!!!