Ante la calentura de las sociedades latinas en estado crítico de sus instituciones democráticas, ¿Podríamos pensar que la selección de un Presidente novato pueda provocar las demandas de amparo a la Corte de Constitucionalidad? Una reacción ante una acción legislativa propiciando la reforma del Código Penal producida por la bancada oficialista para proteger a ese presidente novato. Pretendían que quitándole responsabilidad de los fondos de campaña al Secretario General de los partidos para transferirla a los Contadores de los Partidos: una maniobra diseñada para evitar la acusación de fondos ilegales durante la campaña del partido del entonces Secretario General, hoy Presidente de Guatemala.
Al calentarse el agua a punto de ebullición, en un movimiento inesperado el jueves, la “marcha verde chapín” se concentró frente al Palacio Legislativo exigiendo la renuncia de los legisladores que aprobaron tal reforma que preconiza la impunidad. Pero la Corte de Constitucionalidad se adelantó suspendiendo esas leyes inconstitucionales. Sin embargo, la rabia desde “el poder” quería reprimir porque desde la concentración cívica había señales de violencia. Rauda, la Corte de Constitucionalidad reclamó el respeto de los derechos de los manifestantes.
¿Qué diferencia hay entre el “sainete” dominicano y esta prueba de la conciencia ciudadana de Guatemala? Mucha, y a la vez, poca. Diferente es la espontaneidad del movimiento ciudadano y la diatriba de que nuestro Movimiento Verde es político, que es un instrumento de poderes que pretende desprestigiar la “impecable” ejecutoria del Gobierno. Diferente es la institucionalidad con los Principios Constitucionales de la Corte de Constitucionalidad, a diferencia del paso “cansino” de nuestro Tribunal Constitucional.
Donde no encontramos diferencia es en la evolución acelerada que ha tenido la Sociedad Guatemalteca: el Presidente que impulsó los Acuerdos de Paz de Esquipulas está preso con su vicepresidenta. Eligen a un presidente novato, economista y humorista y sátiro televisivo, para al año de gobierno, tratar de defender a un hermano y e hijo del Presidente y tratar de salvarles el pellejo se enfrenta con el Comisionado de la Comisión por la lucha contra la corrupción en Guatemala. Ahí hemos llegado, al borde de una situación dantesca: el vacío institucional. Por otro camino, Dominicana está llegando al vacío institucional porque los organismos no cumplen sus funciones y luchan por preservar los feudos…
Para confirmar esta noticia en Prensa Libre, en los enlaces siguientes: http://www.prensalibre.com/ y http://www.prensalibre.com/guatemala/politica/jordan-rodas-amparo-manifestaciones-infiltrados-violencia