La arquitectura debe pertenecer al entorno donde va a situarse y cuidar el paisaje en vez de desgraciarlo

Frank Lloyd Wright

En múltiples ocasiones pasadas hemos comentado sobre la muy activa interconexión entre la eficiencia energética y la arquitectura y, junto con ambas, toda la tecnología que se les asocia.

En términos de tecnología, la incorporación de energías renovables (EE.RR.) – que son aquellas que proceden de recursos naturales y fuentes de generación no fósil- es el gran tema pendiente que se plantea en aquella arquitectura con aspiraciones de alta eficiencia energética.

Siendo varias las opciones de incorporación de EE.RR., el detalle está en poder seleccionar las más adecuadas a nuestro escenario o contexto de proyecto arquitectónico. Desde la energía solar  (térmica o fotovoltaica), pasando por la eólica, la biomasa o la geotérmica, un proyecto de arquitectura podría, incluso – aunque al autor no se le ocurre de qué manera-  llegar a la incorporación de sistemas hidráulicos de generación de energía.

En la popular Wikipedia nos encontramos con una definición de EE. RR .que aporta un enfoque, que siendo básico también es muy certero; lo reproducimos a continuación:

Se denomina energía renovable a la energía que se obtiene a partir de fuentes naturales virtualmente inagotables, ya sea por la inmensa cantidad de energía que contienen, o porque son capaces de regenerarse por medios naturales.

 Si no fuera por el hecho de que el propio artículo de Wikipedia cataloga a la energía nuclear como no renovable, podría pensarse que la misma quedaría incluida en la parte de la definición que habla de inmensa cantidad de energía. Sin enterar en aspectos, que son objeto de discusión, relacionados con lo positivo o negativo de la energía nuclear, lo cierto es que su integración a la arquitectura es más bien un tema remoto y al día de hoy solo es parte de textos de ciencia ficción futurista.

Volviendo a la fecha actual y a la incorporación de las tecnologías posibles,  y fuera de todo conflicto, nos encontramos con que mucho antes de plantear situaciones de incorporación como las del párrafo anterior, tenemos pendiente intentar hacer coexistir dos aspectos muy importantes – si es que aspiramos a una integración de las EE.RR.  a nuestros proyectos – y estos son:  1) la adecuada solución constructiva o constitutiva en el contexto de la trama arquitectónica, y 2) los sistema de captación adecuados a la realidad de esos proyectos.

Seguiremos con el tema…