El carnaval es sin dudas nuestra principal fiesta popular y que por su naturaleza y contagio atrae cientos de miles en sus asiduas y extensas convocatorias una vez iniciada la cuaresma. Febrero ha sido tradicionalmente la fecha de celebración de estas festividades y coincide con las fechas patrias dándole al mismo un ribete patriótico que, a veces confunde sus motivos, pero sin patria no hay carnaval y sin identidad no hay patria, por tanto, esta digresión es más que todo de tipo conceptual y no de sentimiento de pertenencia o de confusión de intereses, para los dominicanos una cosa y la otra van de la mano.

Precisamente en este mes de febrero el Centro Cultural Banreservas inauguró una exposición de Carnaval a partir de una selecta curaduría de fotos de seis artistas del lente, que nos deleitan con su ojo estético para disfrutar esa otra mirada del carnaval en medio de la pandemia que ya nos arropa por más de un año.

Esta decisión de la Dirección del Centro Cultural Banreservas dirigida por Mijaíl Peralta, joven inquieto y audaz, nos permite valorar cómo la cultura se entrecruza con la vida social, política, sanitaria y ante catástrofes naturales sin dejar de expresarse, a pesar del dolor, la angustia y la desolación que estos hechos nos puedan producir.

Celebramos esta muestra bien concebida, bien montada, bien curada, y bien estructurada en su contenido, de manera que podamos disfrutarla aún dentro de los protocolos que impone el momento. La iniciativa expositiva se acompañará de un ciclo de actividades que dialogarán con el motivo de la convocatoria que implica la naturaleza de centro cultural de esta institución, por tanto, es un ingrediente más para el conocimiento, la valoración y el placer que esta muestra de fotografías del carnaval pueda entregarnos en estos momentos difíciles que vive la humanidad por el impacto de la pandemia del Covid 19.

Desde temáticas antropológicas, hasta el colorido de trajes y decorados corporales que son parte de la semiótica del carnaval, la muestra nos lleva a la creatividad de la gente, la originalidad de sus talentos y la ingeniosa manera de comunicar con sátira, crítica, humor, arte popular y sarcasmo, hechos de la cotidianidad y de la vida social de nuestro país.

Cada foto de esta muestra es un documento que nos permite dimensionar el carnaval como un patrimonio vivo del pueblo dominicano y de su gran imaginario creativo para contar, con los pies hacia arriba, la otra historia, la que la permisibilidad del carnaval nos hace posible sin censura, ni atavíos.

El reservorio informativo, de conocimiento y experiencias de Dagoberto Tejeda es parte de esta extraordinaria muestra carnavalesca, pues en los últimos 40 años es muy difícil hablar de carnaval sin que Dagoberto sea parte de la narración. Ha sido Dago un protagonista de los procesos transformadores de nuestro carnaval en los últimos años y por eso en la conceptualización, definición de los alcances de la muestra fotográfica, la forma del proyecto y el manejo de la curaduría, estuvo su ojo clínico para presentarnos una buena exposición con contenido, colorido, temáticas, vivencias y rostros del carnaval dominicano que disfrutamos en el Centro Cultural Banreservas e invitamos que lo visiten y se lleven la impresión que me causó tan hermosa muestra y que además tendrá esa programación talleres, conferencias, conversatorios y otras animación.

El carnaval sigue siendo uno de nuestros retos para su integración a la lista de patrimonio intangible por su potencialidad creatividad, su masificación en el gusto de la gente, su valor patrimonial desde la colonia hasta nuestros días, por su riqueza y originalidad además de su fuerza identitaria y de talento, sumado a la autenticidad y fuerza imaginativa del pueblo dominicano que es al fin y al cabo el propietario de tan valioso patrimonio nacional.

Dedicada al gran fotógrafo santiaguero Alfonso Khouri Zouain, la muestra se hace acompañar de 6 artistas de gran calidad: Mariano Hernández, Tony Foundeur, Juan de los Santos, Odalis Rosado, Mary Francés Attía y Guadalupe Rodríguez. 24 fotografías son las seleccionadas, 6 trajes de diablos y 8 caretas son parte de las instalaciones adicionales que adornan los salones del Centro Cultural Banreservas; libros, videos, artesanía, guirnaldas, sonidos, espejos y cascabeles alegóricos al carnaval completan la muestra: “El mundo al revés. El carnaval en la República Dominicana”, recordándonos que aun en medio de las vicisitudes, podemos darle sentido a la vida.