Los pueblos tienen la capacidad de decidir su destino, dicen algunos pensadores. Otros consideran que el destino de los pueblos, lo imponen quienes los gobiernan y quienes tienen el poder económico, mediático y partidario. De lo que si estamos seguros es que los pueblos que se rebelan y se organizan contra la injusticia y la opresión, de manera consciente y persistente, doblegan la voluntad de los que solo quieren beneficiarse personal o grupalmente, sin importarles el daño que puedan producir a la población.
El municipio de Haina acaba de dar un buen ejemplo en este sentido, pues acaba de ganar la primera batalla a los empresarios y sectores del poder aliados a ellos; que sin importar las consecuencias para la población han querido convertir a Haina en el Vertedero del Gran Santo Domino, San Cristóbal y Bani. Se trata de un proyecto de Relleno Sanitario, que han empezado a construir en la comunidad de los Desamparados. Ésta está ubicada próximo a la zona industrial y a poca distancia del arroyo Itabo.
El municipio de Haina siempre ha sido un bastión de lucha. En décadas anteriores, la presencia del ingenio Río Haina, junto a la gran cantidad de obreros y sindicatos, hacían a este pueblo reaccionar ante los atropellos y negación de derechos y de justas reivindicaciones sociales. Con el cierre del ingenio, se cerraron los sindicatos y de esa misma manera la cultura de lucha fue mermando, pero ésta ha permanecido y se manifiesta ante las situaciones de inequidades e injusticias que se presentan.
El municipio de Haina se destaca por ser uno de los de más alta densidad poblacional del país. Tiene apenas 39.5 kilómetros cuadrados y más de 125,000 habitantes; muchos y muchas de los cuales viven en situación de hacinamiento. Además, cuenta con un parque industrial con aproximadamente 100 empresas. También posee la única refinería de petróleo de Rep. Dom., el parque de generación eléctrica más importante del país y uno de los puertos más importantes de la nación dominicana.
A pesar de lo anterior, la mayor parte de la población de Haina carece de servicios públicos de calidad y se vive un gran contraste, pues en el municipio se produce más del 30% de la energía eléctrica nacional y mantiene apagones de más de 10 horas diarias; posee uno de los ríos más importantes del país y no cuenta con un adecuado acueducto para abastecer de agua a la población. Por otro lado, organismos internacionales, han considerado a este municipio como uno de los más contaminados del mundo y esto es debido a los altos niveles de contaminación que se han detectado en su ambiente, fruto, sobre todo de la contaminación ambiental creada por las más de 100 empresas que funcionan en la zona.
La intención de querer empeorar la situación ambiental con la construcción ilegal e ilegítima de un Relleno Sanitario, solo encontró eco en las autoridades municipales de turno, que dieron una certificación de no objeción a las pretensiones de los empresarios. Pero la población reaccionó indignada y como una especie de coro, bien armonizado, dijo que: “Haina no es ni será vertedero de la Capital ni de ningún otro municipio”.
Con esta frase como eslogan, el Consejo de Desarrollo Integrar de Haina (CODINHA) inició un proceso de lucha y de integración social. En poco tiempo se unieron a la causa las múltiples organizaciones sociales, comunitarias y religiosas, así como también algunos empresarios, y altos dirigentes políticos de la provincia y del país. También se sintió la solidaridad de organizaciones e instituciones de otros pueblos y provincias del país.
Los encuentros sociales, las concentraciones, las marchas, la presencia permanente en los medios de comunicación y el piquete realizado en las instalaciones del Ministerio de Medio Ambiente, provocaron que el pasado ministro emitiera una resolución suspendiendo temporalmente la licencia a la empresa que ha estado construyendo el Relleno Sanitario.
Con esta medida la población y sus organizaciones se sienten regocijadas al ganar el primer round de esta batalla; pero manifiestan su disposición de mantenerse en vigilancia y en pie de lucha hasta conseguir la cancelación definitiva de la licencia de construcción del Relleno Sanitario.
La decisión de las organizaciones y la población del municipio de Haina de integrarse y luchar en contra de las medidas injustas de sus autoridades y grupos de poder, así como la solidaridad recibida de diversas organizaciones, son buenos ejemplos a imitar por toda la comunidad social dominicana.
Para celebrar los avances en esta lucha, el pasado sábado, junto al busto del patricio Juan P. Duarte, en el centro de Haina, CODINHA organizó una velada artística para festejar el logro de haber logrado detener temporalmente la construcción del Relleno Sanitario. Voces artísticas e indignadas como las del poeta y compositor Francisco Antonio Peralta– de nombre artístico KR (Kilos de Rap)- de San Cristóbal, animaron la lucha y el deseo de mantenerse en pie, vociferando a coro la consigna de que “Haina no es ni será vertedero de la Capital ni de ningún otro pueblo”.