Los análisis financieros, las noticias económicas y políticas, y los malos augurios todos coinciden con una inauguración del nuevo gobierno matizada por presupuestos complementarios, grandes déficits, más impuestos, aumento de la deuda pública, mas gastos superfluos, campaña a destiempo de la oposición peledeísta que encabeza Leonel Fernández, mas viajes al exterior, un paquetazo al pueblo y como consecuencia natural un aumento en la pobreza.
Las cifras que presentan los analistas son realmente espeluznantes, causan terror y angustia a las mentes sensatas y responsables. A los que piensan en el futuro de la nación dominicana, de las generaciones presentes y futuras. El problema es que parece que los que toman las decisiones y las aprueban no están preocupados por la alarmante situación económica del país.
El gobierno del presidente Leonel Fernández envía una propuesta al congreso para modificar el gasto del ejercicio presupuestario vigente en RD$51,311.7 millones, es decir para incrementar el déficit programado para este año de 22 mil millones de pesos a 73 mil millones. Los 51 mil millones que se solicitan en el presupuesto complementario son parte del gasto en la campaña presidencial para elegir a Danilo Medina. Esta iniciativa de ley autoriza al Ministerio de Hacienda a concertar créditos para apoyo presupuestario por US$1,599 millones y 10.9 millones de euros. Además, en la carta enviada al Senado el Presidente Leonel Fernández señala que la modificación del gasto se sustentaría en un proyecto de ley de bonos por US$500 millones para destinarlo a las empresas eléctricas.
Por otro lado se propone también la conversión de líneas de crédito de corto plazo otorgadas por el Banco de Reservas a préstamos a largo plazo por valor de 18,463 millones de pesos. Hasta aquí presentamos los datos publicados por la nota del Senado “Poder Ejecutivo envía al Senado Presupuesto Complementario”.
En informaciones ofrecidas en conferencia de prensa por el Dr. Arturo Martínez Moya y publicadas por Acento.com.do, se proyectó que el déficit del presupuesto del gobierno para el presente año superará los 80 mil millones de pesos. Indicó que a este déficit debe sumársele las deudas que tiene el gobierno con las instituciones descentralizadas. Entre estas deudas señala RD$16,000 millones de pesos con el Banco de Reservas por operaciones de factoring, RD$22,526 millones adeudados al Banco Central según compromisos de pago para el 2012 contraídos mediante la ley de capitalización, además mencionó la deuda de US$672 millones con los generadores de energía, RD$1,500 millones con la Refinería Dominicana de Petróleo y más de RD$14,000 millones con suplidores y contratistas del Estado.
Como se puede observar en este parche presupuestario, que cubre solo una parte del mismo, solo se habla de aumento y de diferimiento de la deuda, lo cual implica aumentar la misma a largo plazo. No se habla de reducción del gasto público ni se menciona el aumento de los impuestos. Claro, la propuesta de reducción del gasto, y el aumento de los impuestos para lograr el equilibrio fiscal y monetario le tocará al presidente electo. A él le corresponderá imponer el paquetazo para pagar el enorme servicio por la deuda, el cual según informe del Dr. Fernando Álvarez Bogaert, en el periodo de enero a mayo del 2012 era de 53,200 millones de pesos, a lo cual se le sumará el servicio por la deuda nueva adquirida para sustentar el actual parche presupuestario. Además habrá que sumar el déficit que se arrastre para el presupuesto del 2013.
Al presidente electo Danilo Medina le tocará presentar al congreso el paquetazo para el ajuste fiscal, al pueblo dominicano le corresponderá pagar, mientras el ex presidente Leonel Fernández inicia su campaña al regreso de su viaje a Europa, el cual no sabemos si está ya incluido en el déficit de este año.
El presidente electo Danilo Medina debe imponerse y evitar este parche mal puesto y este adefesio financiero no transparentado, y proponer al inicio de su gobierno una reforma fiscal y monetaria integral, consensuada a través de un pacto fiscal y social como lo indica su vocero Roberto Rodríguez Marchena.