No me refiero al célebre Ted Turner, el fundador de Cable News Network (CNN), Turner Network Television (TNT), Turner Classic Movies (TCM), Cartoon Network (CN) y otros canales de televisión.
A quien me refiero es a Kathleen Turner, la actriz que tanto nos impactó cuando debutó en “Body Heat” (Lawrence Kasdan, 1981), con cuyo coprotagonista, William Hurt, volvería a actuar en “The Accidental Tourist” (también de Lawrence Kasdan, 1988); y cuando actuó con Michael Douglas y Danny DeVito en tres películas: “Romancing the Stone” (Robert Zemeckis, 1984), “The Jewel of the Nile” (Lewis Teague, 1985) y “The War of the Roses” (Danny DeVito, 1989); y cuando actuó con Steve Martin en “The Man with Two Brains” (Carl Reiner, 1983), con Anthony Perkins en “Crimes of Passion” (Ken Russell, 1984), con Jack Nicholson en “Prizzi’s Honor” (John Huston, 1985), con Nicolas Cage en “Peggy Sue Got Married” (Francis Ford Coppola, 1986), etcétera.
Hace tiempo que no la vemos en la gran pantalla. No nos han llegado a nuestras salas de cine las pocas películas que ha rodado en los últimos años, en los cuales ha estado trabajando en televisión y teatro más que en cine. Sin embargo, dentro de pocos días volveremos a verla en la pantalla cinematográfica, aunque no en una película, sino en una ópera en que hace su debut, aunque no cantando, sino en un rol hablado (como la duquesa de Krakenthorp).
La referida ópera será transmitida por The Met: Live in HD en el cine Fine Arts Novo Centro, con transmisión en vivo desde The Metropolitan Opera House de Nueva York el sábado 2 de marzo a las dos de la tarde y repetición grabada (encore) el miércoles 6 de marzo a las siete de la noche. Se trata de “Le Fille Du Regiment”, de Gaetano Donizetti, con libreto de Jules-Henri Vernoy de Saint-Georges y Jean-François Bayard, en una producción de Laurent Pelly, quien también diseñó el vestuario. Encabezan el reparto Javier Camarena y Pretty Yende. Dirige la orquesta Enrique Mazzola. Su sinopsis, tal como aparece en Wikipedia, es la siguiente:
Tiempo: guerras napoleónicas, hacia el año 1805.
Lugar: El Tirol suizo.
ACTO PRIMERO:
Las montañas tirolesas
Paso montañoso del Tirol. Se desarrolla una batalla fuera de escena. El pueblo fronterizo, atemorizado, dirige una plegaria a la Virgen para que llegue pronto la paz. Está terminando la guerra en la que Napoleón ha ocupado la región, y los franceses acaban de lograr la victoria. En su camino hacia Austria, la aterrorizada marquesa de Berkenfeld y su mayordomo, Hortensius, se han detenido en su viaje debido a una escaramuza que ha estallado. Cuando la marquesa oye a los campesinos que las tropas francesas se han retirado, ella habla de los groseros modales de los franceses ("Pour une femme de mon nom (Para una mujer de mi nombre)").
Llega el 21er. regimiento que dirige Sulpice, y confirma a todo el mundo que sus hombres restaurarán la paz y el orden. Con Sulpice llega también Marie, una muchacha huérfana recogida por el regimiento durante la guerra y adoptada como vivandera (esto es cantinera y mascota) e "hija" del regimiento. Marie tiene una educación muy precaria y cuartelera. Su comportamiento es rudo, sin modales de buena urbanidad. Pero Marie es muy buena cantante y lidera la canción del regimiento, que todos corean con mucho entusiasmo.
Cuando Sulpice le pregunta por un joven con el que se la ha visto, ella explica que es Tonio, un tirolés que en un barranco le salvó la vida, y que está enamorada de él. Sin embargo, todo el regimiento se cree con derecho a impedir el matrimonio de Marie si el candidato no es de su gusto. Los soldados traen a un sospechoso que merodea el lugar y Marie lo reconoce: es Tonio, el tirolés que le salvó la vida, que dice que había estado buscando a Marie. Ella se adelanta a salvarlo, y mientras él brinda con sus nuevos amigos, Marie canta la canción del regimiento ("Chacun le sait (Todo el mundo sabe)"). Ordenan a Tonio seguir a los soldados, pero él se escapa y vuelve para declarar su amor a Marie (Quoi! Vous m’aimez (Qué! Me quereis)). Sulpice los sorprende, y Marie debe reconocer ante Tonio que ella sólo se puede casar con un soldado del 21.
Aparece la Marquesa de Berkenfield y le pide a Sulpice escolta para su castillo. Cuando él oye el nombre de Berkenfeld, Sulpice recuerda una carta que encontró cerca de la joven Marie en el campo de batalla. La marquesa pronto admite que ella conoció al padre de la chica y dice que Marie es la hija, largamente perdida, de su hermana que tuvo su desliz con el Capitán Robert, un militar del regimiento. La niña había quedado al cuidado de la marquesa, pero se perdió. Asombrada por las groseras maneras de la chica, la marquesa decide llevársela a su castillo y darle una educación apropiada. Cuando Tonio trata de obtener permiso para cortejar a Marie los soldados se lo niegan, porque no pertenece al regimiento. Tonio entonces decide ingresar en el regimiento y celebra jubiloso el hecho de poder ser militar y marido ("Ah, mes amis (Ah, mis amigos)").
Muy pronto Sulpice advierte a Tonio que debe entregar a Marie a su tía, la Marquesa que ha venido a buscarla. Marie se ve obligada, entonces, contra su voluntad, a irse a vivir al castillo de la marquesa de Berkenfield. Marie se despide emotivamente de todos diciendo que es necesario partir, dejando en claro que el ingreso de Tonio en el regimiento no le ha servido de nada ("Il faut partir (Debemos ir)").
ACTO SEGUNDO:
El castillo de Berkenfeld
En el palacio de la Marquesa de Berkenfield, ésta se esfuerza en educar a Marie para que pueda casarse con un rancio aristócrata: el hijo de la duquesa de Crakenthorp. Sulpice también está en el castillo, recuperándose de una herida, y se supone que ayuda a la marquesa en sus planes. La marquesa enseña a Marie una refinada romanza clásica, acompañándola en el piano. Animada por Sulpice, se pone a cantar al ritmo de un contagioso rataplán, rataplán, y la marquesa pierde los nervios (Trío: "Le jour naissait dans la bocage (Día fue en la arboleda)").
Luego, a solas, Marie reflexiona acerca de su desdichada condición y la falta de sentido del dinero y la posición ("Par le rang et l’opulence (Según el rango y la opulencia)"). Llegan Tonio y los demás soldados del regimiento, se supone que a la boda de Marie. Todo se transforma en alegría cuando Marie canta junto a ellos una encendida y patriótica canción: "Salut à la France (Hola a Francia)" seguida por una graciosa intervención de Marie, Tonio y Sulpice en que expresan su felicidad de volver a juntarse.
Tonio le confiesa a la Marquesa su amor por Marie y que por la muchacha él se ha hecho soldado. Tonio le pide la mano de Marie, pero la marquesa muy fríamente le pide que se vaya a pesar de que él dice que Marie es toda su vida ("Pour me rapprocher de Marie (Para acercarse a Marie)"). Declara que su sobrina está comprometida con otro hombre y despide a Tonio. Luego la marquesa confiesa secretamente a Sulpice que Marie es su propia hija ilegítima a quien ella abandonó, temiendo su desgracia social.
Hortenisus anuncia la llegada del séquito de la boda, encabezado por la madre del novio, la insoportable Duquesa de Crakenthorp con su hijo. Marie rechaza abandonar su habitación, pero cuando Sulpice le dice que la marquesa es su madre, la sorprendida muchacha declara que no puede ir en contra de los deseos de su madre y se muestra conforme en casarse con un hombre al que no ama. Cuando ella va a firmar el contrato de matrimonio, llegan Tonio y los soldados del 21, decididos a resctara a su "hija", impidiendo la ceremonia. Cuando dicen que ella fue vivandera e hija del regimiento, los invitados y la aparatosa duquesa de Crakenthorp se horrorizan. Marie confiesa ante todos su lealtad y cariño para con el regimiento y que a él le debe todo. Entonces la marquesa, conmovida por la bondad de corazón de su hija, detiene la boda y da su permiso para que Marie se case con Tonio. Para celebrar este feliz momento, Marie, Tonio los soldados y todos los presentes cantan una vez más ese patriótico Salut à la France (Hola a Francia).
NOTA: Dejando la ópera y pasando al jazz, con motivo del Día Internacional de la Mujer (8 de marzo), en el Fiesta Sunset Jazz (del Hotel Dominican Fiesta y Jazz en Dominicana) todos los viernes de marzo serán con sendas vocalistas: Sabrina Estepan, Nathalie Ramírez, Salime Caram, Gigi Mota y Katherine Pérez (Pirou), los viernes 1, 8, 15, 22 y 29 respectivamente, además de la exposición fotográfica “Mujeres en el Jazz” en la que Sabrina Estepan encarna en imágenes a las icónicas Ella Fitzgerald, Billie Holiday, Sara Vaughan, Dinah Washington y Nina Simone. Información detallada en este enlace:
www.jazzendominicana.blogspot.com
A propósito del jazz, me ha llamado la atención algo que escribe Michelle Obama en su libro autobiográfico, Becoming: mi historia (Plaza Janés, 2018), que cito a continuación: “Mi abuelo Southside se había trasladado a nuestro barrio después de que el fuego destruyera su antigua casa en el West Side, aunque por suerte nadie resultó herido. Según mi madre, Southside se quedó delante del edificio en llamas gritando a los bomberos que no apuntaran con las mangueras a sus preciados discos de jazz”.
También en marzo (del 12 al 28) será el curso de apreciación musical sobre “La Suite” que impartirá la profesora Catana Pérez en el Teatro Laura Bertrán del Centro Cultural Babeque (los martes y jueves de 7:30 a 9:15 p.m.) sobre el cual usted puede obtener más información llamando al teléfono 809-381-2673 o escribiendo al correo electrónico: