Con la llegada de Donald Trump, actual presidente constitucional de los Estados Unidos de Norteamérica, los agoreros del fatalismo económico dieron riendas sueltas a sus vaticinios armagedónicos, llenos de sesgos políticos indignantes.
Muchos economistas, entre ellos Simón Johnson (MIT) y el inefable Paul Krugman (Princeton) argüían que:
1-La presidencia de Donald Trump causaría un desplome en las lonjas de valores, causando una recesión mundial.
2-Las medidas proteccionistas sobre el comercio internacional de los Estados Unidos, serian parte de esta ¨catástrofe¨, similar al efecto de la salida del Reino Unido de la Unión europea.
3-Estos académicos, y otros más, argüían que la economía europea era tan frágil, que no podría soportar tales medidas proteccionistas, creando un escenario de impago que afectaría las finanzas mundiales.
4-Ademas, ante este averno económico, la economía norteamericana sucumbiría a niveles recesivos preocupantes, creando un caos mundial.
4-Obviamente que estas predicciones catastróficas, que supuestamente afectarían a la economía norteamericana, se han estrallado contra el muro del pragmatismo de Donald Trump, veamos:
5-Los EUA tiene la tasa de desempleo mas baja en toda su historia.
- 7 millones de nuevos empleos.
- Fortalecimiento y crecimiento, casi logarítmico, de los coeficientes bursátiles.
- Los salarios reales de los trabajadores ha crecido en más del 10%
- La fuerza laboral, no diestra, que había disminuido cerca de los 300,000 desocupados, ahora esta empleada y forma parte de los 4.5 millones de nuevos empleos.
- Los empleados de la clase media especializados han aumentado su patrimonio tangible en un 4.8%, dando paso a planes de ahorro y pensiones dignos.
6-El impacto en la Eurozona, de este sorprendente crecimiento económico, sería el siguiente:
- Un aumento en la economía del Reino Unido, después de las negociaciones entre los sectores productivos de ambos países, dentro de Brexit.
- El Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, han predicho que este intercambio apuntalaría el crecimiento esperado de la eurozona de un 1.2% hasta llegar al 4.3% en los próximos 5 años.
- Este impacto en la eurozona, del comportamiento de la economía norteamericana, repercutirá en China Japón , así como también en la India, Suramérica y el Caribe.
Como podemos apreciar, tal y como lo expreso el Presidente estadounidense, en su discurso de rendición de cuentas del 4 de Febrero de este año, la economía norteamericana exhibe un crecimiento sostenible sólido e incressendo. Lo demás, son solo apreciaciones, producto de una guerra de egos.