Mañana se llevará a cabo la edición número 51 del Súper Bowl del Fútbol norteamericano. Este evento sirve de plataforma a las grandes corporaciones de negocios de los Estados Unidos para el lanzamiento y la promoción publicitaria de sus marcas, en busca de alcanzar a los cientos de millones de potenciales consumidores que siguen este deporte.

En esta ocasión la novedad la presenta el anuncio de Budweiser que cuenta la historia del viaje de su fundador Adolphus Busch desde Alemania a los Estados Unidos como inmigrante en 1857. Aunque el anuncio hace referencia a las peripecias de un inmigrante triunfador en la sociedad norteamericana, sus ejecutivos dicen que nada tiene que ver con las medidas anti-inmigratorias  extremas tomadas por el novel presidente norteamericano Donal Trump.

Con esta propuesta Anheuser-Busch parece haber abandonado su tradicional política de apoliticidad. El comercial de un minuto de duración titulado "Born the Hard Way" (Nacido con Dificultad), relata la historia del co-fundador de la empresa y su contratiempo como inmigrante, cuando fue hostigado en las calles a su arribo a Estados Unidos en esa época.

El vicepresidente de la compañía Ricardo Marques aclaró que el comercial muestra los inicios y el transito seguido por Budweiser y aunque la historia se sitúa en los años 1800, entiende que la misma tendrá resonancia con la actual generación de emprendedores, que continúan luchando por alcanzar sus sueños.

Este es el vigésimo octavo año en que Budweiser ha sido anunciante exclusivo de cerveza en el Super Bowl y el cuadragésimo segundo en que Anheuser Busch ha participado. Los 30 segundos del comercial le costará la friolera de 10 millones de dólares.

Las medidas tomadas por Donald Trump siguen teniendo respuestas hasta de los estamentos tradicionalmente más conservadores del "business corporativo" norteamericano.