La transparencia es buena.

La transparencia genera confianza.

La transparencia permite tomar mejores decisiones.

Los principales ejecutivos de una empresa deben ser transparentes ante su Consejo de Directores. El Consejo de Directores, a su vez, debe ser transparente ante los accionistas de la empresa. Es la única forma de asegurar la confianza requerida para que el negocio funcione.

Cuando hablamos del Gobierno, la transparencia toma aún mayor importancia. Además de la responsabilidad de las autoridades electas de rendir cuentas de forma transparente sobre su gestión, esta transparencia también le permite al sector privado conocer la situación verdadera de la economía. Esta información es crucial para asegurar que las empresas puedan aprovechar al máximo las oportunidades que brinda la estabilidad económica y, al mismo tiempo, minimizar los riesgos cuando se avecinan tiempos difíciles.

El año de la transparencia

A finales del 2010, el Presidente Leonel Fernández, mediante el decreto número 728-10, declaró el 2011 como el "Año por la Transparencia y el Fortalecimiento Institucional", lo cual indicaría que se realizarán esfuerzos concretos en el presente año para mejorar estos aspectos.

En efecto, una de las primeras entidades estatales que ha tomado la iniciativa en este sentido ha sido la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), la cual lanzó el sitio en internet http://www.circuitos.gob.do/.

Esta interesante iniciativa le permite a cualquier persona con acceso a internet visualizar información relacionada con el servicio eléctrico de las distribuidoras. Por ejemplo, el visitante al sitio web podrá ver cuáles son los niveles de cobro en el circuito donde vive. Además, se puede conocer cuándo están programadas las "interrupciones al servicio", comúnmente conocidas como "apagones".

Algunas sugerencias

Tomando como ejemplo esta iniciativa de la CDEEE, se me ocurre que sería un buen momento para recomendar dos medidas que pudieran ser adoptadas específicamente por las autoridades monetarias para incrementar significativamente la transparencia de su gestión y que, por tanto, le brindarían a los agentes del sector privado información extremadamente valiosa para apoyar su proceso de toma de decisiones de negocios.

IMAE

Desde hace ya varios años, funcionarios del Banco Central de la República Dominicana (BCRD) han estado trabajando en la elaboración y cálculo de un Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE). Este tipo de medición es relativamente común en otros países de nuestra región pero, hasta el momento, no ha sido implementado oficialmente en nuestro país.

Para que entiendan mejor la relevancia de esto, debo destacar que las informaciones relativas al desempeño de la economía permiten al sector privado tomar decisiones sobre las inversiones a realizar en capacidad de producción, nómina de empleados, entre otras.

Ahora bien, la gran ventaja del IMAE es que se puede calcular mensualmente. Las mediciones del Producto Interno Bruto (PIB) se realizan cada tres meses.

En varias ocasiones, el Gobernador del Banco Central ha emitido declaraciones haciendo referencia al comportamiento del IMAE, lo cual nos indica que dicho índice se está calculando con cierta frecuencia y que, además, sus resultados son lo suficientemente confiables para que las autoridades monetarias lo tomen en cuenta.

Entiendo que quizás ha llegado el momento para que el BCRD publique oficialmente los resultados del IMAE y ponga a disposición del público la metodología utilizada para su medición. Creo que sería un gran aporte.

Expectativas

Los funcionarios del BCRD también tienen varios años trabajando en la elaboración de informes sobre las expectativas macroeconómicas del sector privado.

En esencia, se ha seleccionado un grupo de analistas locales e internacionales que mensualmente envían al BCRD sus proyecciones sobre las principales variables macroeconómicas, a saber, tipo de cambio, inflación y crecimiento del PIB.

El BCRD luego genera un informe con proyecciones "consensuadas". En otras palabras, se analiza cuál fue el nivel promedio de las proyecciones así como el mínimo y máximo.

Es importante destacar que estas proyecciones "consensuadas" tienen un gran valor ya que permiten tomarle el pulso al mercado y evaluar cualquier cambio súbito en las expectativas.

Al igual que lo ocurrido con el IMAE, entiendo que las condiciones están dadas para que las autoridades del BCRD publiquen estos informes mensuales de expectativas. Estoy seguro que los agentes del sector privado podrán utilizar estas informaciones para validar y modificar (cuando sea necesario) sus expectativas sobre el comportamiento de los principales indicadores macroeconómicos.

Para concluir…

Nadie puede negar que las autoridades monetarias han logrado avanzar significativamente en términos de transparencia y de la información que se provee al mercado. Para nombrar sólo un ejemplo, hoy día contamos con un calendario de publicaciones económicas que permite conocer exactamente en qué fecha se publicarán las estadísticas más recientes de inflación, crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), etc.

Sin embargo, entiendo que siempre hay espacio para seguir mejorando. Estamos viviendo tiempos turbulentos tanto a nivel local como internacional y, por tanto, cualquier medida que pueda ayudar a enfrentar estos retos de la mejor manera posible será bien recibida.