La protección social de todos los dominicanos y residentes, constituye un mandato de la Ley 87-01, y un gran reto que merece un tratamiento especial de las fuerzas vivas del país, y muy particularmente, de los partidos políticos que terciarán en las próximas elecciones generales de mayo.
Esta meta debe concitar el mayor interés en el debate electoral, velando en todo momento por un esfuerzo serio para profundizar en los factores que han determinado el retraso de las transformaciones estructurales necesarias para alcanzar la universalidad, y consolidar la solidaridad y la sostenibilidad del SDSS.
Además, urge que la clase política tome conciencia de las distorsiones existentes que han llevado a una buena parte de la población y de la opinión pública a expresar una creciente insatisfacción por los resultados obtenidos, a pesar de su elevado costo. Urge revertir, con hechos concretos, la percepción de que la seguridad social ha sido secuestrada por el capital financiero e influyentes minorías gremiales.
En ese orden, resultan oportunas sendas propuestas de los partidos Revolucionado Moderno (PRM) y Dominicanos por el Cambio (DxC). El Partido Revolucionario Moderno (PRM), demandó del gobierno “insertar a los trabajadores del sector informal a la Seguridad Social, debido a las dificultades que atraviesa ese segmento de la sociedad”.
Propuso afiliar al Seguro Familiar de Salud (SFS) a los motoristas, joyeros, artesanos, trabajadores agrícolas, vendedores del sector turístico, así como a los colmaderos y detallistas, entre otros trabajadores por cuenta propia, cuyo desamparo social los obliga a un creciente gasto de bolsillo y los expone a la ruina familiar.
Por su parte, Eduardo Estrella, presidente del Partido Dominicanos por el Cambio, demandó de las autoridades la afiliación de miles de choferes del transporte público, así como de sus dependientes, para que puedan recibir una atención médica oportuna y de calidad, pagando “los sindicatos un determinado porcentaje y el otro el gobierno”.
Falta de voluntad política fruto de la mezquindad presupuestaria
Tanto el PRM como DxC, criticaron la falta de voluntad política de las autoridades para afiliar a más de 1,500,000 trabajadores independientes que tienen la capacidad contributiva, pero que carecen del aporte de un patrono, requiriendo del auxilio estatal para acceder a los beneficios de la seguridad social.
Es importante recordar que el Sistema Dominicano de Seguridad Social (SDSS) estableció el Régimen Contributivo Subsidiado, tomando en consideración que el 58% de la población económicamente activa (PEA) se dedica a actividades por cuenta propia, y que un 70% de la misma percibe ingresos promedio superiores al salario mínimo nacional (SMN).
De espaldas al mandato de la Ley 87-01, las autoridades se resisten a implementarlo, simplemente porque el mismo supone una mayor asignación presupuestaria al sector salud. A pesar del crecimiento económico, y la alta tasa de mortalidad materna e infantil, el gobierno mantiene una política mezquina respecto al gasto público en salud.
Por el contrario, para liberarse de la presión, las autoridades planean eliminar este régimen, condenando a los trabajadores por cuenta propia a afiliarse al Régimen Contributivo, cubriendo ellos solos el 100% del costo de su afiliación, una solución inaplicable, tratándose de un sector laboral muy vulnerable y en constante incertidumbre.
Esta solución violaría los principios de equidad y solidaridad social, negándole su legítimo derecho a la protección social en condiciones de igualdad, como dispone la Constitución y a la Ley 87-01. Bienvenidas todas las propuestas de los partidos políticos que incluyan soluciones viables.