Steven Weingberg (1933) es un físico estadounidense que junto a dos colegas ganó el premio Nobel de Física en 1979 por combinar el electromagnetismo y la fuerza nuclear débil en el Modelo electrodébil. Entre otros reconocimientos recibió en 1991 la Medalla Nacional de Ciencia y varios de sus numerosos libros han sido traducidos a diversas lenguas. Los Primeros Tres Minutos, una visión moderna del origen del universo, puede leerse en 22 idiomas. El premio Nobel es suficiente prueba para convencerme que Weinberg es uno de los principales científicos contemporáneos. Pero no lo cito por su contribución al entendimiento del universo que nos rodea, sino por sus ideas sobre el sentido de la vida y la valoración que hace de la religión.
Una de sus citas más famosas fue pronunciada en 1999 durante un discurso en Washington D. C: Con o sin religión siempre habrá buena gente haciendo cosas buenas y mala gente haciendo cosas malas. Pero para que la buena gente haga cosas malas hace falta la religión. La recordé cuando leí en el Miami Herald el sábado pasado el caso de Bruce y Deborah Leonard acusados del homicidio de su hijo junto a otros miembros de la iglesia Word of Life Christian Church, en New Hartford, New York.
¿Qué pudo desatar hasta tal extremo la ira de estos padres de literalmente matar a golpes a uno de sus hijos, y dejar al otro gravemente herido? Daniel Irwin, familiar de la pastora de la Iglesia, explicó a la policía después de la muerte del joven, que la noche del domingo, al finalizar el servicio religioso, la pastora Tiffanie Irwin, se volvió a la congregación e hizo una sorprende acusación: alguien en la congregación estaba practicando brujería.
Lucas Leonard, el joven de 19-años cuya familia estaba inmersa en las “prácticas secretas” de la iglesia, dijo que era él, que él quería la muerte de los líderes de la Iglesia y que había considerado hacer una muñeca Vodou de uno de los líderes. Otros vecinos informaron que los hermanos querían abandonar la Iglesia. De aquí se procedió a realizar un “counseling sesion”. Lo pongo entre comillas y en el idioma original porque la consejería fue más emblemática de la Inquisición medieval católica que la de profesionales de la psicología. Ver semejanza en: http://www.bibliotecapleyades.net/vatican/esp_vatican29.htm
El jefe de la policía de New Hartford, Michael Inserra, declaró a la prensa que durante la sesión de consejería ambos hermanos fueron sometidos continuamente a castigos físicos durante varias horas, (calculadas en 10 horas) con la esperanza de que cada uno confesara sus pecados y pidiera perdón. La sesión fue iniciada el domingo en la noche, después de un día de servicios religiosos, y duró hasta las 10:00 de la mañana del lunes. La familia llevó a los hermanos al hospital cuando notaron que Lucas no respiraba, quién fue declarado muerto en el hospital. Christopher fue hospitalizado en estado grave.
Sus padres, Bruce T. Leonard, 65, y Deborah R. Leonard, 59, enfrentan una acusación de homicidio de primer grado, y cada uno debe presentar una fianza de $100,000. Otros cuatro miembros de la Iglesia, Joseph Irwin, David Morey, Linda Morey y Sarah Ferguson, esta última media hermana de Lucas y Christopher, fueron acusados de asalto de segundo grado, y castigados con una fianza de $50,000 cada uno. El caso continúa bajo investigación. Las acusaciones contra los hermanos de haber abusado de otros menores probaron ser fabricadas por la Iglesia.
Este suceso sorprendió a los vecinos y al Director de la escuela donde trabajaba Bruce T. Leonard. Investigadores de la cadena noticiosa CNN, entrevistaron al Director de la Secundaria, Steven Falchi, donde Bruce Leonard trabajaba desde el 2007 como asistente de docente en el departamento de educación especial. Asistía con estudiantes “severa y profundamente discapacitados”. Falchi expresó que la noticia les provocó un “estado de choque”, porque Bruce Leonard “es un buen trabajador y era excepcionalmente compasivo en su trabajo con nuestros estudiantes”. Nadie se había quejado de que impusiese ningún tipo de acción disciplinaria en la escuela.
Uno de los reporteros indagó con una ex –miembro de la Iglesia si consideraba que Word of Life Christian Church era un culto. Según esta fuente que no quiso ser identificada, la Iglesia comenzó en 1984 y en el presente los fieles conforman cinco familias con unos 35 miembros incluyendo niños. “Originalmente no estuvimos aislados de la comunidad”, afirmó, pero a través del tiempo tuvimos fricción y cubrimos la Iglesia (taparon las ventanas con plásticos), lo que irritó a la comunidad. “Comprendo que lo ocurrido da lugar a que se perciba como un culto, pero si escuchan las enseñanzas, son correctas, de acuerdo a la Biblia”. El jefe de la Policía, respondió igualmente a reporteros señalando que no tenían información que el grupo fuera un culto.
De hecho la iglesia estuvo siguiendo los preceptos bíblicos descritos en Deuteronomio 21: 18-21, donde Dios ordena el castigo que debe dársele a hijos rebeldes:
Deuteronomio 21:18-21. 18 Si alguien tiene un hijo desobediente y rebelde, que no hace caso de lo que le dicen sus padres, y que ni siquiera cuando lo castigan los obedece, 19 sus padres deberán llevarlo ante el tribunal de los ancianos de la ciudad, 20 y decirles: “Nuestro hijo es desobediente y rebelde; no nos obedece en nada, es un pervertido y un borracho.” 21 Entonces todos los hombres de la ciudad lo matarán a pedradas. Así acabarán ustedes con la maldad que haya en medio de su pueblo y, al saberlo, los israelitas sentirán temor.
El caso descrito se ajusta a al castigo bíblico que causó la muerte de Lucas y hospitalizó a Christopher, y a la explicación que ofrece Steven Weinberg en su famosa cita. Pero estos casos no constituyen en el siglo XXI el pan de cada día, a menos que nos traslademos al medio Oriente y a Europa para esperar la oleada de refugiados que sufren persecución religiosa.
Lo importante para nosotros es el efecto de la religión en la cotidianidad, ejercida por “main line religions”. Steven Weinberg argumenta a favor de reconocer el conflicto existente entre ciencia y religión, no a ocultarlo o intentar reconciliarlos como pretende el Sr Pablo Gómez Borbón en su columna de la semana pasada. Particularmente me identifico con la posición de Weinberg de reconoce que existen científicos que no creen en un Dios personal, pero sienten que deben minimizar el conflicto, que deben transarse. Para Weinberg esta ruta es peligrosa: Respeto sus puntos de vista y entiendo sus motivos y no los condeno, pero no los comparto. […]. Creo que el mundo necesita despertar de su larga pesadilla de creencias religiosas; y todo lo que los científicos podamos hacer para debilitar el asimiento de la religión debe hacerse y de hecho puede ser nuestra mayor contribución a la civilización.
En cambio, el Sr. Borbón pretende que los ateos y los religiosos son indiferenciables: “Los ateos son aburridos: no hacen más que hablar de Dios”. “Pienso que muchas veces la religión y el ateísmo son las dos caras de una misma moneda: así como la existencia de Dios da sentido a la vida de unos, su no-existencia da sentido a la de otros”. Aparentemente el Sr. Borbón no ha escuchado a los comediantes más escuchados, confesos ateos que usan el humor para descubrir las incoherencias de los dogmas; George Carlin y Bill Maher llegan a mi mente.
Pero no son los comediantes los más entretenidos, son los científicos. Lástima que Borbón no lo haya notado. Las religiones y las ciencias se diferencian esencialmente en los métodos que usan para conocer la verdad, para encontrar evidencias. Esta diferencia es tan absoluta como la que establecen las religiones entre lo profano y lo sagrado. La fe revelada y el conocimiento científico constituyen dos paradigmas inconmensurables. Entender uno, no aporta nada para entender el otro.
No puedo explicar esta diferencia con la precisión y los ejemplos que amerita en un artículo. Esto así porque la confusión es producto de la seudo-enseñanza dominicana que busca en la Ley de Educación 66-97 y en el diseño curricular (el viejo y el revisado en 2014) integrar ciencia y religión y enseñar, contrariamente a la teoría de la evolución de las especies, que la naturaleza humana es inmortal. Distorsionando así la realidad en la mente de nuestros infantes y jóvenes, y educándoles para la obediencia y sumisión a sus padres, docentes, sacerdotes y pastores.
Las creencias religiosas no se fundamentan en evidencias, sino en la Autoridad. La fe es ciega, admite lo irreal, lo irrazonable aunque no se entienda. Las religiones monoteístas convierten la fe ciega en una virtud, un regalo del Altísimo, por encima de todas las cosas, incluso la muerte, para alcanzar la vida eterna. La defensa de dogmas religiosos considerados absolutos y sagrados ha causado feroces guerras, genocidios y odios a través de la historia y en el presente. El ateísmo en cambio no se fundamenta en creencias, sino en la observación empírica del mundo natural y el pensamiento racional para lograr evidencias. Es anti-dogmático por excelencia.
Mientras las religiones se conforman a través de credos, o dogmas, los/as ateos los niegan. Sus organizaciones buscan defender el conocimiento científico atacado por las Iglesias. Intentan mantener las manos de los clérigos fuera del Tesoro Nacional; sus dogmas fuera de las escuelas públicas; sus ritos y oraciones fuera de las Cortes de Justicia y el Congreso Nacional; sus leyes divinas fuera de la Constitución y el Código Penal, en síntesis, mantener una muralla de separación entre las Iglesias y el Estado.
El grupo donde encontramos más ateos se encuentra entre los científicos de las Ciencias Naturales. El cuadro que presenta representa el resultado de tres sondeos entre científicos de la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos (NAS). Los dos primeros sondeos realizados en 1914 y 1933 corresponden a muestras aleatorias de la lista de científicos de la NAS; en 1998, la muestra responde a la lista de 400 científicos seleccionados por la NAS como “grandes” por sus contribuciones al conocimiento. Los resultados son presentados en el cuadro, donde los números corresponden a porcentajes.
Como puede observarse en el cuadro, en 1998 algunos grandes científicos son creyentes, pero solamente el 7% cree en la existencia de un dios personal y el 7.9% en la inmortalidad humana. El número de los ateos y agnósticos ha ido en aumento. Los ateos que no creen en la inmortalidad humana pasaron del 25.4% en 1914, al 53% en 1933, al 76.7% en 1998. Estos porcentajes aumentan si incluimos el grupo de agnósticos. Estos prefieren dejar su posición abierta a que los creyentes presenten evidencias de la existencia de Dios o de la inmortalidad humana.
Le agradezco al Sr. Borbón que tratara este tema. No dudo que la mayoría de dominicanos/as piense como él. Pero es una necesidad traer a la Republica Dominicana al siglo XXI. Es necesario comprender que el ateísmo es el resultado de un proceso de reflexión profunda y de búsqueda de la verdad siguiendo los métodos de las ciencias. Por eso no es casual que entre científicos el ateísmo sea tan predominante. Tampoco es casual que entre los10 países menos religiosos solo se encuentren países con niveles altos de educación científica y desarrollo: China, Japón, Hong Kong, y Vietnam en Asia; Suecia, Holanda, Alemania, Reino Unido, y la Republica Checa en Europa; e Israel en el Medio Oriente. Por otra parte, los más religiosos se encuentran en África, Oceanía y Asia, según la reciente encuesta de un estudio exhaustivo y riguroso de WIN/Gallup International.
Relacionados y Citados:
1) VIDEOS sobre el castigo a Lucas y Christopher Leonard: http://www.cnn.com/videos/us/2015/10/16/teen-killed-in-church-carroll-pkg-ac.cnn/video/playlists/stories-that-shock/
2) Steven Weinberg: videos con subtítulos en español: https://www.youtube.com/watch?v=EvhDnTQ7DsU
https://www.youtube.com/watch?v=0zyLbM76n6Q
3) Encuesta WIN/Gallup International http://www.bbc.com/mundo/ultimas_noticias/2015/04/150413_ultnot_encuesta_gallup_paises_religiosos_egn