[Introducción]
[…]
– ¿Puedes definir lo que es un orgasmo?
– No.
– ¿Porque no quieres o porque necesitas más información para poder definirlo?
– Bueno es algo que se le despierta a las mujeres cuando está con un hombre o que siente aunque no está con esa persona cuando le agrada algo.
-¿Es algo que hablas con tu esposo o tus amigas?
– No.
[…]
– Digamos que cometí un error y salí embarazada sin quizás haberlo deseado o a destiempo y me fui a los 16 años.
– ¿Cuando te fuiste de tu casa, tuviste que dejar el colegio?
– Si.
[…]
– ¿Sabes lo que es el cambio climático?
– No.
– ¿En la escuela en algún momento te hablaron de la preservación del medio ambiente?
– No, nunca.
– ¿Y te hablaron de la deforestación y la contaminación?
– De esto si nos hablaron, de cuando cortamos árboles le hacemos un daño al planeta.
[…]
– ¿Los profesores que les tocó abordar el tema de educación sexual estaban activamente involucrados o creen que fue solo para cumplir con el requisito?
– Para mí fue solo para cumplir con el requisito, nos explicaron una vez en primaria y ya.
Esta conversación con María Alejandra [18 años, de Las Paredes de Haina] es un extracto de una serie de entrevistas que empecé a hacer con un buen amigo para entender la parte humana de algunos datos demográficos presentados en marzo de este año en el Mapa de Embarazos en Adolescentes[i]. Algunos datos de este estudio:
– República Dominicana es uno de los 5 países en América Latina con mayor embarazos en adolescentes.
– El 42% de las jóvenes entre 15-19 años ya habían tenido al menos un embarazo y el 34% ya habían sido madres antes de los 19 años.
– El costo estimado en la atención del embarazo y la maternidad en adolescentes representa 33 veces la inversión estimada del Plan Nacional de Prevención del Embarazo en Adolescentes.
– El 27% de la población dominicana está en la edad de 0-14 años.[ii]
Mi interés por el diseño de las ciudades me ha llevado a hacerme preguntas-raíz, es decir, esas inquietudes a donde te lleva un genuino interés de resolver un problema en su origen, no de manera superficial o tangencial. En este sentido el problema a resolver es más bien el futuro a proyectar: ¿Cómo crece Santo Domingo, mi ciudad? ¿Qué hace que crezca? ¿Cómo son las personas que están ocupando nuevos territorios? ¿Han estudiado? ¿Qué edad tienen? ¿Cómo viven? ¿Han tenido las mismas oportunidades que yo? ¿Han ocupado zonas de bosques, agrícolas o zonas inundables? ¿Cómo seguiremos creciendo? ¿Cómo queremos crecer?
La tasa de fecundidad es uno de los indicadores principales para entender cómo crece una población, al mismo tiempo, el crecimiento de una población es clave para entender cómo crece una ciudad, un país y cómo se van poblando nuevos suelos en un territorio, y cómo este crecimiento se conecta al desarrollo del país que nos hemos planteado, y si no va por donde hemos proyectado, cómo podemos generar las políticas públicas y estrategias para que esta visión se cumpla de manera integral. Los indicadores de nuestro país denotan una demografía fuera de balance, lo cual dificulta un uso apropiado del territorio y el desarrollo positivo de nuestro país.
Ciertamente la tasa de fecundidad en República Dominicana ha disminuido a 2.7 niños por familia, sin embargo, la fecundidad en las poblaciones más jóvenes y más pobres en República Dominicana ha sido evaluada como alarmante, poniéndonos en una de las regiones con mayor tasa de fertilidad [Naciones Unidas, 2014][iii]. A esto se le une que en un estudio llevado a cabo por el Banco Mundial, nuestra ciudad capital Santo Domingo, estuvo en la lista de las cinco ciudades a nivel internacional con mayor riesgo creciente al cambio climático[iv].
En este sentido, si creemos que los efectos del cambio climático no tienen nada que ver con el tema del género, si no conectamos la planificación urbana-territorial con la planificación familiar, la educación sexual, y el acceso a la educación a niñas como parte de las soluciones más eficientes para revertir los efectos del cambio climático, y para lograr un desarrollo en todas las áreas de nuestro país -incluyendo una mejor economía y seguridad ciudadana-entonces URGE de que iniciemos esta conversación y conectemos estos retos con soluciones integrales de desarrollo. Que sirva este texto como introducción para iniciar la reflexión y poner en el contexto dominicano las soluciones al cambio climático, el mayor reto en nuestra generación y en toda la historia de la evolución del hombre.
Estado del arte del tema
En este sentido, todas las mentes y centros de investigación dedicados a encontrar soluciones globales para revertir la crisis ambiental, señalan como una de las prioridades la estabilización de la población. Resumo el documento más reciente producido por cientos de los científicos líderes en el tema ambiental a nivel mundial:
En Draw Down[v], editado por Paul Hawken [2017-New York Times bestseller] éste detalla 100 soluciones globales describiendo el impacto que se lograría al 2050 y el costo para hacerlo. Entre las cinco soluciones con mejores resultados se encuentran la planificación familiar y la educación de niñas y adolescentes. Estas dos soluciones combinadas reducirían unos 120 gigatoneladas [GT] de gases de efecto invernadero al 2050, además de contribuir notablemente al desarrollo económico e influir en otras soluciones para mitigar el cambio climático. Para tener una idea, en el 2014 el planeta llegó a la cifra de 39.8 GT de gases de efecto invernadero emitidos a la atmósfera ese año. Estos son los gases que han provocado la crisis del cambio climático. Si todo el planeta usara carros eléctricos reduciríamos 10 GT al 2050, iluminación LED en nuestras casas 7.8 GT, reciclaje en nuestras casas 2.77 GT, energía solar en los techos de edificios 24.60 GT. Todas estas soluciones son importantes, sin embargo incluir a la mujer como parte esencial de estas soluciones, sobrepasa por muchas gigatoneladas a todas las soluciones anteriores juntas. Educar las niñas y dar acceso a una vida sexual y reproductiva sana no sólo nos arroja un buen número, es también un derecho humano.
Un crecimiento demográfico sano no significa restringir el número de niños por familia, ni tener un control estatal sobre las decisiones de la mujer, se trata de generar libertad opciones y acceso a información, lo cual genera otro tipo de habitante con un nivel de conciencia y empoderamiento que afecta positivamente todas las áreas críticas para el desarrollo de un país. Estas preguntas raíz del principio necesitan soluciones-raíz, y ésta es una de ellas. Mientras más acceso a la educación tiene una adolescente más retrasa el inicio de una familia, y así la población crece con un ritmo más conectado al ritmo económico de una nación que le permite acoger a estos nuevos habitantes, y sobre todo al ritmo mismo de la naturaleza, a la cual hemos puesto una presión que sobrepasa por mucho su capacidad de regenerarse. Esta conversación evidentemente también incluye al hombre, se hace énfasis en la mujer por ser el sector más vulnerable en el tema de la planificación familiar, y en nuestro contexto social, es un sector aún más frágil y con índices altos de pobreza.
Para el año 2050, la República Dominicana tendrá casi 13.2 millones de habitantes. Hoy somos aproximadamente 10.6 millones, o sea que en aproximadamente 30 años, produciremos una población equivalente a casi la provincia completa de Santo Domingo, y esta población se proyecta como eminentemente joven con un promedio de 25 años.
Aunque este año se hizo un avance importante con el proyecto de sensibilización "Yo decido esperar”, mediante el cual se capacitaron miles de jóvenes para sensibilizar en varios sectores a las adolescentes, todavía carecemos de políticas públicas claras, constantes e integradas al sistema educativo y al marco legal de nuestra constitución. María Alejandra nos decía que hubiera sido importante tener a alguien en su escuela con quien hablar, al menos dos o tres veces por semana, de manera individual y en grupo, y que estas ‘clases’ que sólo vio en primaria debieron ser con mayor motivación y durante todos los años que cursó antes de dejar la escuela.
Inteligencia del cuerpo/Inteligencia ecológica
Mi aporte para esta solución con enfoque de género se basa en la idea de que primero necesitamos construir una inteligencia sobre el cuerpo, un conocimiento pleno y sin tabúes sobre el sexo, nuestra sexualidad y de cómo y cuándo queremos relacionarnos con los demás. Esta inteligencia es la que luego podrá traducirse en una ‘inteligencia ecológica’ para poder elegir los sistemas, materiales y /o productos correctos que ayuden a revertir los efectos causados por el cambio climático. Sobre todo, requiere que insertemos la idea de placer, el placer consciente e informado, que no sólo sea enseñar a decir no desde una aproximación restrictiva y de control, o a conseguir un marco legal que apoye decisiones conscientes, se trata de que sea sobre todo una educación que nos capacite en el pleno disfrute de cuidar la naturaleza y nuestros cuerpos, que cuidarnos, conservar la naturaleza y cambiar nuestros hábitos de consumo no sólo sea reducir cantidades. Este es el ser humano que realmente queremos que pueble la Tierra dentro de una nueva relación con la naturaleza, con su cuerpo.
En mis próximas colaboraciones estaré abordando referentes internacionales, análisis y propuestas para nuestro contexto local, dentro del tema de Sexo y Cambio Climático.
[i]Mapa deEmbarazos en Adolescentes fue elaborado por la Vicepresidencia de la República, el Ministerio de Salud Pública (MSP), la Oficina Nacional de Estadística (ONE) y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa) en marzo 1, 2017.
[ii]Datos de World Life Expectancy, worldlifeexpectancy.com, última visita a la página, 23 de Julio del 2017.
[iii]“La situación demográfica en el mundo. Informe Conciso”. Naciones Unidas, Departamento de Asunto Sociales y Económicos-División de Población. Nueva York, 2014.
[iv]“Santo Domingo es quinta ciudad más vulnerable al cambio climático”. Periódico El Caribe, Santo Domingo, Agosto 2015. Artículo visitado en Agosto 2015 y enero 2016: www.elcaribe.com.do/2015/08/13/quinta-ciudad-mas-vulnerable-cambio-climatico.
[v]DRAWDAWN: The most comprehensive plan ever proposed to reverse global warming, Editado por Paul Hawken, Penguin Books: New York, 2017.