Los trabajadores domésticos son aquellas personas que se dedican de modo exclusivo en forma habitual y continua a labores de cocina, aseo, asistencia o habitación particular.

Se consideran también como trabajadores domésticos las (os) trabajadores que están al cuidado de una persona que está enferma, el chofer, el jardinero y el guardián, cuando sus tareas sean exclusivas para asuntos propios del hogar.

Es sin lugar a dudas el trabajo doméstico sumamente importante y fundamental en las familias, especialmente donde tanto el hombre como la mujer deben salir temprano a trabajar y, para que ambos puedan desempeñarse correctamente en sus roles, las tareas del hogar deben seguir funcionando de manera adecuada.

Cada día se hace más difícil conseguir personas confiables para dejarlas al cuidado del hogar y de nuestros hijos y esto hace que contratemos personas sin antes tomar las medidas de lugar. Por lo tanto, exhortamos a que antes de llevar a vivir a una persona extraña a su casa realice primero una buena depuración, así como también realizarle los exámenes médicos correspondientes.

Su retribución corresponde, además de los pagos en dinero, alojamiento y alimentos (los alimentos y habitación que se den al trabajador doméstico se estiman como equivalentes al cincuenta por ciento del salario que reciben en efectivo). Las domésticas tienen el derecho de un día y medio de descanso semanal como establece el artículo 163 del Código Laboral a los empleados regulares.

Las (os) trabajadoras domésticas no tienen derecho a prestaciones laborales, desde el punto de vista legal, es decir, las prestaciones no están contempladas como un derecho que le concede. Si las trabajadoras domésticas son desahuciadas, si finaliza el contrato de trabajo, ellas no recibirán los conceptos de preaviso y auxilio de cesantía.

De conformidad con la ley No. 103-99, del 9 de noviembre del 1999, se estableció que esa clase de trabajadores tendrá derecho, no solo a dos semanas de vacaciones anuales, sino también al pago de salario de Navidad. En tal virtud, debemos entender que estos son sus únicos beneficios económicos que obtendrán al momento de la liquidación.

La razón por la cual a ese tipo de trabajadores no se les aplican todos los derechos que otros trabajadores, es porque una casa de familia no implica una actividad comercial. Según datos de la Oficina Nacional de Estadística, en el país hay 325 mil trabajadores domésticos aproximadamente, percibiendo un salario promedio que por lo general no rebasan los RD$10,000.00 al mes y que el servicio doméstico representa el 5.6% de la fuerza de trabajo, de los cuales el 92% son mujeres y el 8% hombres.