Creo que muy pocos de los profesores que enseñan en las diferentes universidades dominicanas se atreverían a negar que el eminente profesor Jesús de la Rosa es el que más oportunas opiniones ha publicado en los diarios sobre los problemas, tropiezos y limitaciones que durante muchos años han lastrado a la educación superior de nuestro país. Parece que debido a esas razones en uno de sus artículos publicados en el matutino HOY el 17/10/2017, titulado Las otras caras de la UASD dice: “La lentitud de adaptación estructural y funcional de nuestras universidades a los cambios que se avecinan, ha originado una crisis que aunque universal afecta más a la educación superior de los países de la América española y el Caribe”.
Por cierto, nuestra educación superior jamás ha estado uncida al yugo de un fuerte buey que tire de ella de manera permanente. Sin embargo, no basta con que la educación superior sea jalada por un buey poseedor de una vigorosa energía financiera, pues mientras esté patente el fenómeno que el profesor de la Rosa llama, en el artículo citado, “bajo rendimiento en la elevación de los niveles culturales, en la formación de los recursos humanos, y en el progreso científico y tecnológico”, sería difícil superar dichos tropiezos y limitaciones.
¿Pero por dónde empezar a superar las barreras que limitan la “adaptación estructural y funcional a los cambios” en la educación superior dominicana como señala el profesor Rosa?
Bueno, todo el mundo sabe que en materia de educación no hay cambios repentinos; cualquier pequeño avance demanda que se enfatice la organización y la reinterpretación de los roles del personal docente, administradores y estudiantes. Ese paso es imprescindible porque solo así se está en capacidad de entender qué debe priorizarse para que haya fácil acceso a los distintos niveles de la educación superior y que dicha facilidad quede disponible, ventajosamente, para aquellos estudiantes que prueben tener agallas y talento. Pues como dijera el conocido científico estadounidense, Christopher Mathews, en el prólogo de la 4ta Edición (2014) del larguísimo texto titulado Bioquímica, “…. los profesores de las universidades de hoy tienen el deber de potenciar las capacidades de sus alumnos para que estos tengan acceso a un corpus de conocimientos cada vez mayor ya que es imposible saber ciencias si no sabemos quién hizo, qué falta por hacer y qué aplicación tiene la estadística, el lenguaje Java, el análisis espectral mediante el uso de la ecuación de la transformada de Fourier que permite comprender la digitalización de señales y sus frecuencias como paso previo a que un estudiante de medicina o de ingeniería comprenda qué significa tasa de flujo o ancho de banda y la importancia y aplicación de la entalpía como expresión de la termodinámica, sus leyes y usos”.
Lo dicho por el científico Mathews constituye conocimientos básicos de matemática y de la Física aplicada, disciplina de ciencia que al día de hoy ha desembocado en matemática aplicada y es aprovechada al máximo por las naciones desarrolladas, ventaja de la que no disponemos los países de escaso desarrollo y quién sabe si porque 30 a 50 jóvenes con talento para aquellas asignaturas nadie los descubrió o estaban ahí pero nunca se les tomó en cuenta como becarios de la educación superior. Hago este señalamiento por el caso que a continuación relato.
Evelyn Rosario Hiciano, una hermosa joven mocana de ojos grandes café, se graduó en la PUCMM, mención Magna Cum Laude en Física y Matemáticas a los 22 años de edad. Evelyn Lleva dos años tocando puertas por una beca para hacer una Maestría en Física aplicada o en Matemática aplicada, que en este momento son las dos carreras que urgentemente necesitan las naciones de escaso desarrollo como la RD. Tanteé dicha joven para ver qué tan firme y amplia es su formación y visión en Física y Matemática. Confieso que lo que vi en ella me gustó. Hablamos extensamente acerca de por qué a nuestros estudiantes de bachillerato se le hace difícil comprender la diferencia entre masa, que es una magnitud escalar y propiedad de un cuerpo cualquiera, y el peso, que se refiere a una magnitud vectorial que depende de la fuerza Gravitacional. También abordamos la geometría de los fractales de Benoit Mandelbrot (1977) y las integrales del matemático George Riemann quien planteara en 1862 el extraño problema de cómo definir un espacio de n-dimensiones y terminó dando la definición de lo que hoy llamamos espacio “riemanniano”, que no es más que el espacio donde la curvatura de un cuerpo rígido varia de lugar en lugar y con el tiempo, razón por la cual es prácticamente imposible que al “capó” de un carro un desabollador pueda darle la misma curvatura que tuvo antes de ser abollado.
Por ejemplo, si diez de nuestros estudiantes de maestría en especialidades médicas se interesaran en recibir entrenamiento en cirugía robótica, habrá que enseñarles cómo el software que controla el robot cumple con los principios de la geometría fractal para llevar a cabo una cirugía de un órgano de superficie irregular como el corazón o el estómago.
Doctor Franklin García Fermín, ministro del MESCYT, ¿por qué la señorita Evelyn Rosario dio tumbos en el pasado gobierno y sigue dando tumbos en el presente en busca de ser favorecida con un beca para hacer su maestría en Física o Matemática aplicada, y a pesar de que habla y escribe perfectamente inglés, aún nadie en dicho Ministerio la ha escuchado? ¿Dejará el MESCYT que esa talentosa joven quede sepultada bajo la mole del ocio o prisionera del insulso enjambre de las redes sociales?
En nuestro país no existen precedentes de que grandes instituciones empresariales protejan intelectualmente a jóvenes con un notable potencial científico. Aún la comunidad científica mundial se espanta al pensar cuánto hubiéramos perdido si el enorme talento matemático de Benoit Mandelbrot no hubiera sido apoyado por la IBM en 1970. Puesto que las grandes empresas dominicanas no rastrean ni respaldan a potenciales científicos, ni siquiera en un campo tan prometedor y en expansión como la Física aplicada (Óptica, Termodinámica, Codificación y digitalización de señales [puesto hoy de moda con las cámaras de reconocimiento facial mediante imágenes segmentadas], Electromagnetismo de fuente biológica y mineral, Superconductores de electricidad y de fotones e Ingeniería de software), pues es el MESCYT quien debe asumir el respaldo a jóvenes que muestren dominio e interés por la física y las matemáticas aplicadas.
Lo que le da un carácter mayúsculo al mérito del líder de una nación o al líder de una institución de educación superior es su visión de largo plazo y su capacidad de predicción de qué habría en ese largo plazo. Y si la visión y capacidad de predicción de los que acompañan al líder de una nación o al de una institución de educación superior solo alcanza hasta los límites de un par de años o solo tienen visión por un día, pues la frontera de la pobreza social y cultural continuará ensanchándose. Y recordemos, la pobreza es como un virus de alto poder patógeno y de amplio poder de contagio.