En el transcurso de la semana hemos recibido al menos dos señales que auguran cambios positivos para los dominicanos.
En la visita del Presidente Danilo Medina a Nueva York se reunió con el Sr. George Soros, como también lo hiciera con varios jefes de estado. A pesar de que la nota de prensa de la Presidencia destaca que Soros es uno de los inversionistas más poderosos del mundo (y ciertamente lo es), por lo tratado en la entrevista se aprecia que el caballero de origen judío-húngaro naturalizado estadounidense solicitó la cita como fundador y patrón de las ONGs Open Society Foundations.
Entre las muchas valiosas iniciativas de este consorcio de ONGs, la Open Society Justice Initiative viene monitoreando de cerca los esfuerzos de algunos grupos enquistados en diferentes estamentos de la burocracia estatal por despojar a los descendientes de haitianos de su nacionalidad dominicana desde mucho antes de que el Tribunal Constitucional evacuara la sentencia TC 168/13. Ha publicado numerosos reportes y estudios documentando todo el proceso de desnacionalización empezando en la década del 1990, con especial atención al desarrollo posterior a la promulgación de la Ley de Migración del 15 de agosto 2004 y el fallo de la Suprema Corte de Justicia del 14 de diciembre 2005, colaborando estrechamente con otras instituciones que trabajan este tema. Ver por ejemplo el reporte de enero 2013 preparado en colaboración con CEJIL.
http://www.refworld.org/pdfid/51ee489b4.pdf
Una de las características sobresalientes de las Open Society Foundations es que buscan resolver los problemas que identifican, pues su propósito no es denostar sino mejorar el mundo. Seguro es en este espíritu que el Sr. Soros quiso reunirse con el Presidente Medina para ofrecer su concurso en la tarea de reparar los daños hechos por dos décadas de marginar a los descendientes de inmigrantes haitianos, y que ha explotado como un torpedo durante la administración del Presidente Medina por la insólita sentencia TC 168/14. La Open Society Justice Initiative ha dado un seguimiento muy de cerca a los acontecimientos que se han sucedido desde la Sentencia y ha expresado su decidido compromiso de acompañarnos hasta el final en la tarea de garantizar los derechos de los dominicanos de ascendencia haitiana.
Es en este tenor que el Sr. George Soros ha prometido su apoyo al proceso de documentación de los inmigrantes y sus descendientes más necesitados del país. ¡Enhorabuena el encuentro del Presidente Medina con el Sr. Soros!
No menos auspicioso en nuestro criterio es la señal emitida por nuestro nuevo Canciller, Andrés Navarro, al contestar espontáneamente preguntas en el Palacio Nacional sobre el ACNUR y el papel de Juliana Deguis en el reciente evento en La Haya sobre la apatridia. En lugar de echar leña a la hoguera que algunos fantasiosos y fanáticos inquisidores de la nacionalidad han fomentado para quemar a Gonzalo Vargas Llosa y Juliana Deguis Pierre, de manera muy diplomática el Canciller les ha echado un baldón de agua helada a los “torquemadas” dando las explicaciones que el discreto representante y la agencia internacional se han querido reservar, pero que Juliana supo transmitir en una breve entrevista concedida en su batey a su regreso de Europa. De hecho el Canciller volteo la tortilla explicando que Juliana no hizo ninguna acusación y se limitó a dar su testimonio de cómo había logrado obtener los documentos que la acreditan como dominicana, poniendo en evidencia que en el país respetamos los derechos humanos. No lo dijo, pero pudo haber añadido, que a pesar de los esfuerzos de grupos fanatizados, al final se va imponiendo la razón y los buenos sentimientos de la mayoría de los dominicanos. ¡Aparentemente también la buena diplomacia!