El presidente Luis Abinader ha sido reiterativo al garantizar la gratuidad de la prueba PCR a todos los dominicanos. Y debe ser así, porque nadie en particular es responsable de la irrupción y la propagación de la COVID-19, por lo que se trata de “un problema de orden público”, cuya solución requiere del esfuerzo colectivo.
El acceso incondicional a dicha prueba resulta crucial, para evitar el contagio y permitir que las autoridades actúen de inmediato. Pero, hace falta informar y orientar a la población sobre cuándo, cómo acceder a ese derecho, adónde acudir y cuáles son los requisitos para solicitarla.
Durante esta semana preguntamos a gente común si conoce el “proceso” mínimo para, en caso de necesidad, solicitar una prueba gratuita de PCR, y estamos sorprendimos al constatar la falta de información y orientación, incluso en la clase media y dentro del propio personal de salud. Mucha gente se está desesperando y termina pagándola.
Le preguntamos a un taxista, casado y con tres hijos y dijo que escuchó que Luis Abinader había hablado de eso, pero que en realidad no sabría qué hacer en el caso de necesitar ese servicio para él o para un familiar. Lo único que recalcó es que él se está cuidando y protegiendo a sus pasajeros.
Luego una muchacha del servicio doméstico, soltera y con dos hijos pequeños, nos dijo que conocía la propuesta del presidente, pero que no tenía más información. “Le pregunté a la señora donde trabajo y ella me dijo que tenía entendido que el servicio lo ofrecían los hospitales, pero que no sabía en cuáles”.
Finalmente, consultamos a dos médicos miembros de la Fundación, de esos que abruman diariamente reenviando toda información sobre la Covid-19. Tampoco pudieron dar una respuesta certera, especulando sobre lo que consideran que es “el procedimiento más lógico en estos casos”.
Información y orientación sobre el acceso gratuito a las pruebas PCR
La mayor incertidumbre de estos dos galenos provino sobre los afiliados al Régimen Contributivo. Asumen que el afiliado primero tendría que acudir a un médico contratado por su ARS para que éste le prescriba la prueba, debiendo pagar un copago entre 1,000 y 2,000 pesos por esta consulta.
Y luego solicitar una cita al laboratorio para la prueba. Muchos laboratorios privados sólo hacen la prueba a domicilio, lo que implica un costo adicional. En este punto los dos difieren porque uno “asume” que el paciente no tendría que pagar ninguna diferencia, mientras el otro, asegura que sí.
La Fundación Seguridad Social para todos (FSSPT) considera que, para complementar la promesa presidencial, hace falta una campaña de información y orientación a la ciudadanía sobre cómo solicitar la prueba gratuita prometida, dependiendo de si el paciente es contributivo, subsidiado, o carece en absoluto de un seguro de salud.
Compartimos las críticas de Somos Pueblo, sobre el gasto excesivo en una publicidad con escaso valor agregado a la educación y orientación de los dominicanos. Pero resulta muy importante para combatir la pandemia, porque se requiere de un esfuerzo colectivo de toda la población. Esperamos que el Gabinete de Salud, tome en cuenta estas observaciones y oriente mejor a la ciudadanía.