Ir a Montaña Redonda es un objetivo pendiente de muchas gentes jóvenes de cualquier lugar del país. Por doquier alguien muestra una foto volando en una escoba como si estuviese sobre el vacío, meciéndose en un columpio singular o planeando como llegar a aquella montaña.

Se trata de una de las más prominentes alturas de la Cordillera Oriental con la particularidad de que a sus pies están las lagunas Redonda Y Limón que ofrecen una vista sin igual, al fondo la playa Costa Esmeralda de conocida belleza y allá, en la lejanía la península de Samaná. Todo en conjunto constituye un espectáculo irrepetible.

La Montaña Redonda está a quince kilómetros de distancia de Miches, camino a Uvero Alto- Punta Cana. La carretera para llegar a este lugar es excelente y bordea un paisaje grato a la vista. Si se viaja vía Miches, se recomienda la ruta de El Seibo. En Miches se impone una parada en  el peculiar restaurante de Fredy Pablito donde comer deja de ser una necesidad para convertirse en un verdadero placer. Al seguir la ruta a la montaña si el viaje no implica pernoctar en Miches, lo recomendable seria seguir el camino hacia Punta Cana y regresar por La Autovía de Este.

Se recomienda antes de seguir el viaje por una u otra dirección entrar a Costa Esmeralda cuyo deplorable camino queda justificado al llegar a aquel  lugar, donde puede, uno, disfrutar del balneario marino que jamás imaginó.

Tengo noticias de que los propietarios de Montaña Redonda están por complicar las cosas con un cobro adicional al derecho de acceso para los novios que deseen hacer allí su sesión de fotos previa a las bodas. Ojala rectifiquen esa decisión para no obstaculizar por unos pesos más el deseo de muchos dominicanos de disfrutar de aquel espectáculo.

Cuando se viaje por aquellas rutas del Este estos son paradas indispensables.

Hacer el viaje con prudencia y sobriedad es la única forma de disfrutarlo plenamente además de ser un comportamiento responsable. Buen viaje.