Quienes nos oponemos a que las termoeléctricas de Punta Catalina operen con el carbón estamos conscientes que esa no es una decisión de Rubén Bichara, sino del presidente Danilo Medina y los empresarios que se beneficiarán del carbón, sin importar el daño a la salud de la gente. Sin importar que se hunda la isla.
Pero Bichara, que es un político noble y honrado, puede poner su granito de arena y convencer al Presidente sobre el desastre ecológico que producirá el uso de dos plantas a carbón, cuando el mundo está desechando su uso. El último paso lo dio China, al cerrar la última gran central eléctrica de carbón de Pekín y se convirtió en la primera ciudad del país en la que todas sus centrales eléctricas están alimentadas con energía limpia, con gas natural. El principal alegato fue que el carbón es tan fulminante para la salud que el Estado gastaba más en las enfermedades de los chinos que los beneficios económicos.
Pienso que Bichara fue honrado al reconocer en una publicación del Diario Libre que “lo ideal” es el uso del gas natural; y que al propio Gobierno le conviene porque ese combustible le permitirá que las termoeléctricas sean sostenibles en el tiempo. Es decir, dio la razón a los defensores del medio ambiente, que piden el uso del gas natural, como energía limpia.
“La generación a gas es lo ideal y nosotros tenemos cinco años en la búsqueda de un suministro de gas que permita la conversión de las plantas que tenemos ya instaladas lo cual podría permitirnos extender la vida útil de esas plantas, pero eso se requiere primero: un suministro de largo plazo y a un precio sostenible y que nos permita realmente hacer sostenible el costo de la energía”, indicó.
El vicepresidente ejecutivo de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) prometió que seguirán buscando ese suministro y “no vamos a descansar hasta encontrarlo”. Aquí veo yo luz al final del túnel, me da a entender que el dañino carbón mineral ha sido discusión de las altas esfera del Gobierno. Creo, sin embargo, que el tema no es que no se ha encontrado el proveedor o los proveedores del gas natural, sino la fuerte presión de los empresarios allegados al Gobierno para beneficiarse del negocio del carbón. Beneficios sin importar el daño a la salud, agricultura, la pesca de Baní y toda la región.
Es preciso que todos los dominicanos y dominicanas apoyen la construcción de las plantas de Punta Catalina (es una solución al viejo problema eléctrico), pero sin el contaminante carbón. A los que defienden su uso, le recomiendo que se compren una vivienda en Catalina o en cualquiera de las comunidades que van a recibir los embates del carbón.
El diario el Metro explica que una investigación presentada por el Instituto para la Economía Energética de la Universidad de Stuttgart arrojó que “la contaminación atmosférica procedente de las centrales térmicas de carbón de la Unión Europea fue responsable de 22,300 muertes prematuras en 2010”. Cuando se quema carbón se producen gases ácidos, hollín y otras partículas que penetran en los pulmones, llegan a la sangre y provocan, paulatinamente, ataques al corazón, cáncer de pulmón, ataques de asma y otros problemas respiratorios.