Como parte integrante de los eventos presentados en la Feria Agropecuaria Nacional 2019 que tiene lugar en la Ciudad Ganadera y organizado por la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios (CONFENAGRO), ayer tuvo lugar un importante y orientador evento donde se analizó la situación de la agropecuaria dominicana a luz de la moderna tecnología.
La actividad consistió en un panel titulado “La innovación como estrategia para la competitividad en el sector agropecuario nacional”, y en el mismo figuraron como expositores el ex Ministro de Agricultura, Luis Ramón Rodríguez y el ex decano de la facultad de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, Modesto Reyes.
Tanto Rodríguez como Reyes en sus respectivas exposiciones coincidieron en señalar que desde el punto de vista tecnológico, el sector agropecuario nacional se encuentra muy rezagado. Y tanto uno como otro plantearon como puntos fundamentales la necesidad de impulsar la investigación agropecuaria e invertir en la formación de capital humano. En el primer caso, se hizo resaltar que la inversión es de apenas el 0.3 por cierto del Producto Interno, lo que no permite innovar y por consiguiente alcanzar niveles de competitividad.
Este rezago tecnológico es particularmente preocupante en el caso de la República Dominicana que enfrenta tanto el reto que origina el progresivo desmonte arancelario de nuestros principales productos agropecuarios en el marco del DR-CAFTA, como el que impone lograr la meta de garantizar la soberanía y la seguridad alimentaria del pueblo, a tenor de las sucesivas recomendaciones de la FAO. Esto así sobre todo para enfrentar los perjudiciales efectos esperados por razón del cambio climático sobre el régimen de cosechas a nivel mundial.
Desde que el país se enganchó a última hora en el tren del DR-CAFTA se advirtió la necesidad de implementar una efectiva estrategia de modernización del sector agropecuario, promoviendo una agricultura intensiva y desterrando el minifundismo. Lamentablemente no se adoptaron ni a tiempo ni al nivel requerido las medidas recomendadas. Los conclusiones apuntadas con el ex Ministro Rodríguez y el ex decano Reyes en el evento que antes citamos han énfasis en esta realidad.
Ahora bien, vale destacar que las mismas se producen precisamente en momentos en que acaba de regresar al país la delegación del Consejo Nacional de Competitividad que encabezada por su director ejecutivo Rafael Paz que participó en la Cumbre Mundial de Innovación Agrotecnológica efectuada en la ciudad de San Francisco, en el estado de California, y analiza los resultados obtenidos en ese importante foro.
Ya antes de partir, Paz advirtió que el objetivo principal de participar en dicha Cumbre tenía como finalidad incorporar al sector agropecuario, cuya importancia resaltó, la aplicación de las más avanzadas tecnología de uso a escala mundial.
Dado el ritmo de trabajo que hasta ahora ha mostrado el Consejo es de esperar que muy en breve, en coordinación con los Ministerios de Agricultura y Medio Ambiente y el Banco Agrícola así como demás organismos y entidades públicas y privadas vinculadas al sector, se pueda disponer de un plan efectivo para desarrollar al máximo el potencial del vital sector agropecuario en el marco a tenor de las más avanzadas prácticas provistas por la moderna tecnología.
Por décadas hemos venido escuchando la frase de que “somos el granero del Caribe”. Es hora de que deje de ser un simple slogan para convertirse en una palpable realidad, una vez que nuestra agropecuaria sea capaz de satisfacer nuestras propias y crecientes necesidades alimentarias, turísticas, agroindustriales y exportables.
De nosotros depende.