El comentario publicado en twiter por el presidente de la Junta Central Electoral, Roberto Rosario, desató gran controversia: “Hoy mi hija me ha dado una inesperada lección de vida. Gracias, Raquel, aunque te prefiero lejos de esta selva”.
Esto lleva a diferentes cuestionamientos. En primer lugar, deberíamos preguntarnos ¿Qué es una SELVA para Roberto Rosario?
¿Se refiere al país?, ¿a la política dominicana? o tal vez hable de su propio entorno… Vayamos por partes.
En un país como el nuestro, donde la mayoría de la gente se abraza a esperanzas politiqueras, convenientes para unos y convincentes para otros, es fácil catalogar como una jungla al terreno donde funcionarios públicos juegan a ser una manada de tigres depredadores.
El panal de avispas que nos administra, bien podría ver a la masa pobre como el rebaño manso dirigido por un pastor, dígase alcalde, síndico, senador o cualquier puesto lucrativo del gobierno. Este rebaño representaría a los que se dejan dirigir sin oponer resistencia, sin manifestar su opinión o su preferencia.
La selva que plantea el señor Rosario, podría encajar perfectamente con el hábitat en el que se desenvuelven la jauría de perros que su institución dirige, con él a la cabeza, olfateando y persiguiendo a víctimas sospechosas por el color de su piel, su apellido y ascendencia, hasta cazarlos y devorarlos a dentelladas. También encajaría, con el vuelo alocado de votos cual bandada de aves migratoria con destino desconocido en estas atolladas elecciones. Estas torpezas administrativas han empañado la credibilidad de la JCE, a pesar de que existen otras voces dentro de ese organismo con opiniones y procederes diferentes a la de su amo y señor. En definitiva, al rey de la selva.
Claro que es una selva, señor Rosario, cuando la corrupción está preñada de “gatos” que nos han colocado en la lista de los países más corruptos; cuando la opinión pública está comprada por chivos sin ley, cuando las elecciones son alteradas por mulas cargadas de billetes para comprar de manera descarada a los votantes; y cuando hay una piara de cerdos que ensucian nuestra política, mientras que la educación sigue roída por los ratones de la ignorancia. Y es que ya lo dijo el "Ché´´ mientras más inculto es un pueblo, es más fácil de engañar y manipular.
¿Y no será señor Rosario, que la selva a la que alude la dirigen, con su anuencia, jueces y funcionarios "sanguijuelas´´ que sangran al pueblo?
Cuando Danilo Medina se postulaba como presidente de la República, hace 4 años, dijo algo que la postre le sería muy criticado por hacer todo lo contrario. ´´Pienso que el país no está preparado para recibir una reelección, porque el problema es que tenemos instituciones democráticas muy débiles; tal vez, en los próximos 20 años cuando tengamos un periodo sucesoral de 4 ó 5 gobiernos y hayamos avanzado en el fortalecimiento de las instituciones democráticas del país. Pero el problema está que en la R.D. los funcionarios cuando van a un proceso de reelección no distinguen la línea que separa lo que son los bienes públicos de bienes partidarios y terminan dañando la imagen de los presidentes, la imagen de los partidos y de la economía´´.
Y por qué usted no renuncia a su puesto privilegiado de ´´Rey de la selva´´ ejercido por años, no solo como presidente de la JCE, sino también, como miembro predilecto del Partido de la Liberación Dominicana. Con su renuncia abriría una ventana a la equidad y a la justicia social. Pero eso no va a suceder.
Entonces señor Rosario, ¿quién es el ´´rey de esta selva´´?