En su discurso ante la Cámara Americana de Comercio el Presidente de la Republica ha establecido que una de las principales prioridades de su próxima gestión de gobierno consistirá en la solución del grave problema del transporte de pasajeros, que lamentablemente, dada las falencias históricas del Estado Dominicano ha debido ser solucionado individualmente por cada uno de los habitantes de nuestras grandes urbes.

Al respecto, el Presidente indicaba que un país desarrollado no es aquel en el que los pobres se mueven en vehículos propios, sino aquel en el que hasta los ricos prefieren utilizar el transporte público, al mismo tiempo, hacía un llamado a los empresarios del transporte de pasajeros a colaborar en la solución de la problemática para dotar de soluciones confortables para los usuarios, haciendo énfasis en los extraordinarios gastos en los que incurren las familias dominicanas para buscar sus soluciones individuales en una unidad de vehículo familiar.

Estamos en presencia de una propuesta seria e integral frente a la problemática del transporte, a diferencia de la propuesta populista del candidato opositor que en sus campañas publicitarias en la Z-101 propone aumentar el subsidio al GLP a los choferes de carros públicos.

Una candidatura opositora que exhibe en sus boletas a los causantes del caos y el desorden del transporte no puede ser creíble a los fines de solucionar esta problemática, pues la misma se encuentra atada a los favores propios de estos empresarios que reclamarán mantener el estatus quo a toda costa y quienes adoptan una forma muy poco ortodoxa de resolver sus quejas en el marco de la democracia. 

El Presidente de la Republica ha realizado un llamado a estos empresarios del transporte (con quienes no tiene compromisos de índole político o económico) a sentarse en la mesa de la negociación para buscar soluciones puntuales a esta problemática, y al respecto, entendemos que las soluciones desde el punto de vista programático han de ir orientadas a una solución integral del problema, para evitar seguir creando parches y reproduciendo los modelos de soluciones parciales que hasta el día de hoy nuestra clase política ha adoptado complaciendo a estos empresarios del transporte.

Dentro del marco de esta solución integral al problema del transporte de pasajeros, proponemos humildemente las siguientes acciones puntuales:

  • Realizar un levantamiento de todas las rutas existentes y determinar de manera fehaciente los empresarios del transporte que controlan las mismas.
  • Determinar la cantidad de unidades de transporte masivas que precisa nuestra ciudad para prestar el servicio en condiciones óptimas, buscando la excelencia en lo que respecta a la sostenibilidad ambiental de este servicio público.
  • A pesar de que la ley de contrataciones públicas no reconoce la figura del concesionario a titulo precario ni dispone de ningún tipo de régimen indemnizatorio (como es el caso de estos empresarios del transporte), debe adoptarse una solución en equidad, reconociéndoles como concesionarios de la mitad de las rutas que operan en la actualidad y suministrarle incluso las nuevas unidades de transporte que operarán estas rutas, con compromisos contractuales claros y que en caso de ser incumplidos el Estado procederá al uso coercitivo de sus potestades exorbitantes al derecho común en materia contractual administrativa, que van desde la terminación del contrato sin autorización judicial, hasta el rescate de la concesión.
  • Proceder a concesionar las demás rutas del transporte, bajo los principios que plantea nuestra legislación de compras y contrataciones, elaborando un pliego de condiciones justo y equilibrado, que defina de manera concreta las obligaciones de estos nuevos concesionarios del transporte, no dejando en tela de juicio las potestades del Estado en relación a este contrato administrativo.
  • Crear un órgano regulador realmente descentralizado, guiado por un mecanismo plural en la designación de sus miembros, con la finalidad de evitar que la política pueda distorsionar las decisiones de este órgano.
  • Hacer un levantamiento de la cantidad de choferes de carros y guaguas públicas, con la finalidad de emplearlos en las nuevas empresas que resulten ser concesionarias del sistema de transporte, en el supuesto de no poder colocarse a todos en ese nuevo mercado laboral, proceder a reconocer los mismos como un pasivo laboral a cargo del Estado e incorporarlos a la Seguridad Social, adoptando igualmente una solución en equidad y por ende conforme a la Constitución.
  • Creación de un banco de empleo y de políticas sociales para reinsertar laboralmente a los choferes que no pudieron resultar por algún motivo empleados en el nuevo sistema de transporte público.
  • Sancionar penalmente cualquier intromisión no autorizada en la vía publica con la finalidad de prestar el servicio público de pasajeros.

Estas soluciones planteadas son justas e integrales, y eliminan de una vez por todas las incomodidades del transporte de pasajeros, y constituirán un incentivo al uso de un sistema de transporte masivo, tales propuestas, unidas con un plan científico para viabilizar el tránsito como las sugeridas por Decisión Profesional al Programa de Gobierno del Presidente Medina, contribuirán a realizar el derecho a ser feliz de los habitantes de nuestras grandes ciudades, quienes se encuentran urgidos de una solución eficaz ante este mal que le aqueja.