Comenzar de nuevo, iniciar otra vez el camino podría verse como un desprendimiento material o inmaterial en la vida. En algunos casos, incluso, darle un sabático a nuestros talentos y habilidades.
Sin embargo, en el planteamiento del “RESET” o reinicio de Rafael Pérez Concepción vemos como la práctica en la producción de imágenes se vuelve inherente. Lo que si puede detectarse, es como el apego a la abstracción geométrica formula una nueva creación y se apoya en un sutil arquetipo, lleno de contrastes luminosos.
Rafael, sin duda ha denotado la búsqueda de otro lenguaje, logrando un resultado refinado que abrevia sus experiencias en algunos “tapices nórdicos”; pero que resalta la insularidad inseparable de sí mismo. Esta secuencia rítmica visual, que no amerita traducciones, propone al espectador avanzar hasta alejarse de lo plomizo.
Esta es la octava exposición individual de Chepe, que nos presenta un conjunto de piezas, en total 19, que posee una configuración que posibilita el imaginativo; y demuestra la conclusión de un trabajo cauto y alucinante.
