La rehabilitación energética de los edificios consiste en llevar a cabo aquellas actuaciones de intervención – a nivel de rehabilitación y remodelación-  tendentes a fomentar la eficiencia energética y el ahorro económico, mejorando las condiciones de habitabilidad y reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero. 

Cumplir el triple propósito de confort + eficiencia energética +sostenibilidad es el objetivo de toda rehabilitación energética. Para esto es preciso mejorar el comportamiento térmico en la piel del edificio, reducir la demanda de energía y mejorar el rendimiento de las instalaciones. 

Rehabilitar es un principio fundamental de la sostenibilidad dado que siempre es mejor hacer los correctivos de lugar que producir algo  nuevo; o lo que es lo mismo, es mejor reparar, remodelar o rehabilitar un edificio, adecuándolo a las necesidades, que tirarlo y hacerlo desde cero. Estas medidas correctoras, encaminadas a mejorar las condiciones de confort térmico, también sirven para curar el síndrome del edificio enfermo, concepto reconocido por la Organización Mundial de la Salud y que consiste en un conjunto de molestias asociadas al uso y permanencia en determinados edificios, causadas por mala calidad del aire interior, climatización deficiente y/o mala ventilación, humedad, descompensación de la temperatura, etc.

Rehabilitación y Restauración

En este punto vale aclarar la diferencia entre una rehabilitación normal (¿el término normal en una rehabilitación existe?)   llevada a cabo sobre un edificio destruido, cuyos elementos de composición, constructivos, estructurales, etc., están en condiciones críticas y la rehabilitación energética que persigue otros fines. Con la primera se quiere devolver o recrear de alguna manera (aún sea por contraste) las condiciones originales a un inmueble; con la segunda se busca dotar al edificio de mejores prestaciones en su desempeño energético, evidentemente tratando de cumplir en la medida de lo posible con los postulados de la restauración y conservación histórica del edificio.

Recordamos lo aprendido en nuestros años estudiantiles, en las asignaturas relacionadas a la historia de la arquitectura y la restauración del patrimonio histórico edificado. Nos llega a la mente lo absolutamente necesario que es el restaurar y/o rehabilitar un organismo arquitectónico respetando el rigor de la historia. Por ejemplo si el objetivo es rehabilitar los huecos (puertas y ventanas) de un edificio declarado de interés cultural es fundamental que se haga el trabajo con los materiales y las técnicas con que contamos en la actualidad. Esto así para que en un futuro ( 100 o 200 años), los técnicos puedan identificar el período en que fue restaurado ( o rehabilitado el inmueble).

En busca de la eficiencia energética

En algo un poco más complejo se torna el proceso de rehabilitación energética de un edificio que además debe ser restaurado en términos históricos. Además de lo antes expuesto en el párrafo anterior el objetivo consiste en dotar al edificio de sistemas y soluciones que garanticen la eficiencia energética del mismo.

La intervención a nivel de rehabilitación energética en un edificio parte de un análisis general del problema que en cuanto a confort y eficiencia se presentan. Conocidas estas carencias, se traza una ruta de trabajo que incluye una serie de medidas correctoras para el ahorro energético y la mejora de las prestaciones del edificio, tanto para la envolvente del mismo como para sus elementos constructivos e instalaciones.

Identificados los fallos se estructura el trabajo en varias fases, que son las que componen el proyecto de rehabilitación energética integral. Con estas diferentes fases o talleres de trabajo definidos, que van desde la mejora del comportamiento térmico de la envolvente (cerramientos verticales, cubierta, carpinterías) y los elementos constructivos, hasta la puesta a punto de las instalaciones del edificio, se acometen las acciones de manera integrada o en etapas coordinadas según la hoja de ruta del trabajo y de acuerdo a las necesidades y posibilidades del promotor del encargo.

Al día de hoy la rehabilitación energética se va situando como una importante apuesta por la sostenibilidad en las ciudades. Un tema interesante para seguir desarrollándolo más adelante.