El Gobernador Valdez Albizu le diría que no lo despilfarre en lujos extravagantes ni se vaya a cazar leones y a esquiar en Colorado o Suiza. Bueno, puede tener razón aunque a nadie debe importarle lo que uno hace con el dinero ganado honestamente. Malo es cuando esas extravagancias se hacen con dinero sucio, sea de la droga, del lavado, de la evasión impositiva o del robo.

De todas formas, es tiempo de crisis y hay que bajar la guardia y ser comedido, sin importar que usted sea muy, pero muy rico y tenga su avión privado para viajar.

No obstante, este artículo va dirigido a la gente que apenas viaja a Miami o Nueva York para ver su familia o comprar chucherías. Además, toma vinos de 400 o 600 pesos, va poco a restaurantes y se toma sus vacaciones de verano en hoteles todo incluido y con buenos descuentos.

Es la típica clase media dominicana que en los últimos 3 años se está empobreciendo gradualmente. Los aumentos de la tarifica energética, de los colegios, de la gasolina y de los alimentos, se lo están comiendo vivo y los ajustes de salarios que pueda recibir o la rentabilidad de sus negocios, jamás compensan esos aumentos.

Pero muchos de ellos tienen ahorros en los bancos dominicanos y ven que su capital se esfuma gradualmente por el peso de la inflación y la amenaza de devaluación. Pueden ser 1, 3, 5, 8, o 10 millones de pesos, el punto es que están muy preocupados de que su capital se desvanezca.

Por eso no me sorprende que esa sea la pegunta que más gente me hace en la calle aun sin conocerme o por haberme visto alguna vez en el pasado. También ocurre en algunos círculos de amigos y familiares. "Malkun, tengo unos chelitos en el banco pero que hago con ellos ya que mi capital pierde gradualmente su poder adquisitivo"

Generalmente, cuando estoy en sitios públicos y viene la pregunta, evado elegantemente la respuesta diciendo "mira, la situación esta complicada y nadie sabe lo que puede ocurrir, pero hay que esperar lo que hace el gobierno con el FMI y entonces podría tener una mejor idea para darte mi consejo". Punto.

Algunos son insistentes y vuelven con otra pregunta ¿y qué pasa si no hay acuerdo? Entonces yo respondo "mira es difícil que eso pueda ocurrir". No hago eso por negarme a colaborar con otra persona, sea quien sea, sino por lo delicado del asunto ya que una opinión mía podría significar que esa persona tome una decisión financiera que después se lamente y me diga en un futuro "Coño Malkun, perdí dinero por llevarme de ti".

En círculos de amigos íntimos o familiares puedo tomarme ciertas libertades ante la misma pregunta ¿Qué hago con mis ahorros en tal banco para que no se me esfumen? En ese caso, le recomiendo varias opciones, entendiendo que no se trata de un millonario o gran empresario sino de una persona de clase media con algunos recursos.

Primero, ve al banco y que te digan cuales son las tasas a plazos más largos y negocia un par de puntos más, aunque esas tasas pueden aumentar en el corto plazo. Segundo, dolarizar el dinero no es una decisión muy buena, al margen de que evitas los riesgos de devaluación del peso, ya que las tasas en Estados Unidos están casi en cero con una inflación del 2% (y puede llagar a 2,5% este año). Tercero, lo puedes meter en la bolsa de valores con un portafolio de bajo riesgo lo que te daría de un 5% o 6% de rentabilidad en dólares pero ahora hay mucha incerdumbre en los mercados internacionales y no puedo asegurarte nada, ya que si pierdes eso, lo pierdes todo. Cuarto, también los puedes invertir en la bolsa local, cuando alguna empresa reconocida haga una emisión de bonos, lo que te daría 4 o 5 puntos más que la tasa bancaria, aunque generalmente eso queda en manos de muy poca gente. Quinto, otra opción es comprar una propiedad y eso te mantiene estable tu capital y con suerte puedes ganarte algo de dinero si después vendes a mejor precio o lo alquilas con una renta que represente un 8% o 9% la tasa interés en un banco. Lo bueno es que la propiedad no se te deprecia y lo malo, que un inquilino irresponsable te la puede destruir sin pagarte. Y Sexto, saca una parte y mételo en algún negocio con un socio, donde tengas ciertas ventajas comparativas para que no fracases ya que a diario están quebrando cientos de establecimiento comerciales.

Puedo seguir con un séptimo, un octavo o un noveno, pero al final de cuentas no he sido de mucha ayuda ya que jamás me inclinaría por una de esas opciones sin riesgo de equivocarme. A veces el instinto te produce más beneficios que la recomendación de un economista. Úsalo.