El Instituto de Protección de los Derechos del Consumidor una de los estamentos más dinámicos del entramado de oficinas gubernamentales, copó las paginas y espacios de los medios de comunicación con proyectos, acuerdos, propuestas y alertas que favorecen la defensa del consumidor dominicano.

Primero la institución alertó a la ciudadanía sobre el riesgo a que son expuestos los niños y los envejecientes al consumir las "miniglatinas en Capsulas." Asimismo advirtió a los consumidores que no paguen un precio entre 18 y 20 pesos por un sobre de café, ya que algunos establecimientos lo están vendiendo a sobreprecio.

Las noticias dan cuenta que pro-consumidor puso en circulación su Código de Ética Institucional junto al Registro de Conflictos y Dilemas Éticos. Su directora ejecutiva Altagracia Paulino propuso en la Cámara Americana de Comercio sellar una alianza en pos de lograr instituciones fuertes que generen confianza en los consumidores y fortalezcan el mercado.

Estos esfuerzos sin embargo, pudieran ser percibidos con un grado de incredulidad por la población, en razón de que en septiembre del año pasado se hizo el anuncio de que Pro-consumidor y Adora habían firmado un acuerdo que permitiría difundir en más de 230 emisoras en todo el país mensajes educativos para orientar a los consumidores.

La campaña en cuestión, parece que a la fecha no ha tenido el impacto deseado a nivel nacional, creando un "handicap" en los niveles de credibilidad de la institución, con respecto a la posibilidad de que todo lo anunciado ahora alcance un final feliz.

Ampliar esta campaña establecería la diferencia entre un consumidor consciente y uno engañado, por su vulnerabilidad en el mercado, resultado de los bajos niveles educativos de la mayoría de la población y falta de una adecuada política de protección e instrucción del Estado.