Todavía nadie ha utilizado el término de “Primavera” para hablar de los chapines (el apodo cariñoso con que se denominan los guatemaltecos), pero conociendo la historia de Guatemala, ha habido varios eventos en su pasado que se llamaron como “algo” parecido a una primavera…
Para tener la panorámica de los hechos en Guatemala, acudí a los periódicos guatemaltecos buscando el artículo que a golpe de síntesis periodística me contestara si hay o no parecido a una primavera en los eventos chapines. Lo encontré en el artículo de Gustavo Adolfo Montenegro “Crónica de una caída con sabor a 1944” en el diario Prensa Libre, disponible en el siguiente enlace: http://www.prensalibre.com/guatemala/justicia/cronica-de-una-caida-con-sabor-a-1944 .
¿A qué se refiere con 1944? Wikipedia me dio la respuesta: “La Revolución de 1944 fue un movimiento cívico-militar ocurrido en Guatemala el día 20 de octubre de 1944, encabezado por militares, estudiantes y trabajadores, que derrocó al gobierno de facto del General Federico Ponce Valdes, dio lugar a las primeras elecciones libres en ese país, e inauguró un período de diez años de modernización del Estado en beneficio de las mayorías de clase trabajadora. La historiografía posterior ha denominado a dicho período como los «Diez años de primavera» o la «Edad de oro» de Guatemala, y actualmente el día 20 de octubre es una fiesta nacional en ese país centroamericano, conmemorada como el Día de la Revolución de 1944”.
Este furor revolucionario llevó al poder a Jacobo Arbenz y terminó diez años después, en 1954, con un golpe de estado de manufactura de la United Fruit Company, de muy triste recuerdo, como lo evoca el premio Nobel guatemalteco, Miguel Ángel Asturias, en su novela Los ojos de los enterrados.
Volvamos al presente. Escuché en la radio dominicana decir barbaridades. Que Guatemala siendo “más pequeña que nuestro país” ha podido sacar a su presidente. La falacia está en creer que es más pequeña que la República Dominicana: Guatemala tiene 108,899 Km. cuadrados, frente a los 48,311 Km. cuadrados de la media isla dominicana. Para el año 2010 se contabilizaban 15 millones de habitantes.
Entendamos que el nivel de indignación no ha llegado a sacar a la calle exigiendo el “retiro de la inmunidad” a un legislador que logra abortar las causas abierta en su contra en la mismísima Suprema Corte de Justicia. En nuestro país no hubo un proceso traumático de negociación de paz, como el resultado en Esquipulas, alcanzado por Otto Pérez Molina, hoy Presidente renunciante. Este proceso llevó al gobierno a pedir el concurso de las Naciones Unidas: La Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) fue creada el 12 de diciembre de 2006 por medio del acuerdo firmado entre las Naciones Unidas y el Gobierno de Guatemala, tras la opinión consultiva favorable de la Corte de Constitucionalidad en mayo de 2007. Fue ratificado posteriormente por el Congreso de la República de Guatemala el 1 de agosto de 2007.
Nuestro Sistema de Justicia ¿soportará la presión de un “juicio” a un presidente de la República? Ya lo hemos hecho a un expresidente. ¿Qué fiscal se atreverá a ordenar su apresamiento si ya hemos visto el archivo de casos de menos nivel jerárquico en la maquinaria del Estado? Debemos recordar que no tenemos un estatuto de independencia de las investigaciones criminosas. ¿Tendrá la Suprema la voluntad de investigar estos casos de inmunidad e impunidad de funcionarios que han logrado arribar a los Tribunales de la República?