La Junta Central Electoral organizará por primera vez, el próximo domingo, las primarias de los partidos políticos.
Se trata de un hecho de especial trascedencia para nuestra democracia, tomando en consideración que el referido certámen interno partidario se convertirá en un piloto en el que se probará un modelo de automatización del voto, que de resultar éxitoso, como se espera, será implementado en las elecciones generales del 2020.
Hasta ahora el órgano administrativo electoral ha cumplido satisfactoriamente con la disposición del artículo 99 de la Ley 15-19, Orgánica del Régimen Electoral, el cual establece que la Junta Central Electoral debe consultar a los partidos políticos, para la automatización progresiva del proceso de votación, lo mismo que con el protocolo relativo a la implementación de nuevas tecnologías en materia electoral, el cual requiere la celebración de pruebas, simulacros, auditorías y pilotos antes de su puesta en vigencia.
A partir de la entrada en vigencia de la Ley de Partidos, Agrupaciones y Movimientos Políticos, la Junta Central Electoral pasó a ser el árbitro de los procesos internos de escogencia de los candidatos a los cargos de elección popular.
La JCE es responsable de reglamentar, organizar, administrar, supervisar y arbitrar las primarias de los partidos políticos.
En cambio, cuando los partidos políticos decidan escoger sus candidatos mediante una modalidad distinta a las primarias, la misma será supervisada y fiscalizada por el órgano electoral.
En los países en los que las primarias se celebran de manera simultáneas, las mismas son abiertas y organizadas por el órgano electoral, tal como sucede en Uruguay, Argentina, Chile, Honduras, entre otros.
Unicamente en nuestro país se celebran primarias simultáneas con mecanismos de elección diferentes para seleccionar los candidatos, tal como ocurrirá el próximo domingo cuando el Partido de la Liberación Dominicana escoja sus candidatos mediante primarias abiertas, es decir con el Padrón Nacional, y el Partido Revolucionario Moderno, en cambio, lo haga con su propio padrón, es decir, mediante primarias cerradas.
No existe ninguna duda de que las primarias simultáneas, con tipos de padrones distintos, constituyen un gran desafío para el órgano responsable de la organización de las mismas.
Sin embargo, el mayor desafió que enfrentará la Junta Central Electoral el próximo domingo, será el de hacer cumplir el mandato del artículo 211 de la Constitución Política, el cual dispone lo siguiente: “Las elecciones serán organizadas, dirigidas y supervisadas por la Junta Central Electoral y las juntas electorales bajo su dependencia, las cuales tienen la responsabilidad de garantizar la libertad, transparencia, equidad y objetividad de las elecciones”.
Tomando en consideración que la integridad de los procesos electorales se inicia al momento de la escogencia de los candidatos a cargos de elección popular, la Junta Central Electoral está obligada a garantizar que se cumplan estos cuatro pilares fundamentales para la integridad de las elecciones.