El gobierno de Danilo Medina se ha empecinado en construir dos plantas de energía eléctrica que usan carbón mineral como combustible, la excusa para ello es el bajo costo del carbón con relación a los demás tipos de combustibles que usan las plantas de generación que conforman el parque eléctrico dominicano.

Excusa vana, pues si de verdad se estuviera considerando el precio del tipo de combustible a utilizar para bajar los costos de generación se estuvieran construyendo parques eólicos o plantas solares, ambas de energía renovable, barata e infinita. Pero no, el gobierno se ha ido por una tecnología desechada ya por los países desarrollados por contaminante, y lo que es peor, aquí se habla de una sobrevaluación que supera los mil millones de dólares, ese es, mas que ningún otro motivo, por lo que se están construyendo esas plantas.

El gobierno anuncio con bombos y platillos que la construcción de las plantas a carbón tendrían financiamiento de sus constructores, una firma brasileña altamente cuestionada en su propio país, al nivel de que su presidente esta en la cárcel por escándalos de corrupción en los que se menciona a la Republica Dominicana y a su gobierno, pues bien, el Congreso Nacional aprobó los financiamientos pero hasta la fecha no ha sido desembolsado un solo dólar por parte de la entidad brasileña que supuestamente financiaría las plantas.

Pero el gobierno no ha parado su construcción, pues los fondos para construirlas los ha conseguido con el ahorro en la compra de petróleo y combustibles terminados debido a la caída de los precios de estos, en vez de utilizar esos recursos para mejorar la salud y reducir el alto endeudamiento que tiene el país fruto de una carrera alocada de empréstitos tomados por los gobiernos peledeistas.

Para saber el desprecio del gobierno a las energías renovables, a pesar de que el presidente Medina acaba de llegar de una cumbre sobre el cambio climático celebrada en Francia, en la cual tuvo una intervención en la que sus palabras eran desmentidas por sus acciones, entidades empresariales y ambientalistas reunidas en la comisión que negocia el Pacto Eléctrico denunciaron que desde hace más de dos años el Gobierno mantiene estancadas once concesiones eólicas que aportarían unos 1,300 megavatios sin que el sector público invierta un centavo, y que competirían con el sector tradicional obligándolo a reducir los precios de la electricidad.

En la ultima reunión de este foro los empresarios del sector y defensores del medioambiente afirmaron que las plantas de carbón de Punta Catalina son un obstáculo para incorporar energía a base de fuentes limpias y renovables al sistema eléctrico nacional, por ser estas plantas de lento encendido y apagado, lo que impide la armonización de ambas tecnologías. Además, nadie asegura un precio bajo del carbón a lo largo de los próximos años, ya que el país no lo produce y se compra con divisas, al igual que el petróleo o el gas, lo que no ocurre con el sol, el viento y el agua que existen en abundancia en nuestro territorio. La República Dominicana posee todas las condiciones para que al año 2030 las energías limpias y renovables cubran el 85% de la demanda eléctrica del país y al mismo tiempo reducir los costos de la energía y del gasto de las importaciones de derivados de petróleo, eso si los dominicanos apostamos a tener un gobierno consciente que vuelque sus acciones a favor del medioambiente y el aprovechamiento de los recursos naturales de los que disponemos, para ello faltan solo cinco meses y medio.