Así se refirió a mis denuncias el Presidente de la Federación de Fútbol Dominicano, Osiris Guzmán, cuando me le acerqué en una asamblea luego de haber publicado un artículo cuestionando la forma en que se generan y publican los reportes financieros de la institución.

Y al parecer yo, junto a prácticamente toda la comunidad del fútbol nacional, estamos errados en nuestra forma de reclamar o criticar. Nosotros, los que no estamos contentos con el manejo de la FEDOFUTBOL y los resultados de nuestros equipos, somos los equivocados. Y esta, por supuesto, es una práctica de la vida política nacional. Es una salida rápida a las críticas que se hacen a cualquier político en el país. “Usted está equivocado, pero además, esa no es la forma”.  Sin embargo, yo coincido con todo lo agregado por Massimo Ferretti en su artículo de esta semana sobre la nueva liga profesional y la organización rectora del fútbol y su presidente. Pero seré un poco más atrevido y agregaré un par de cosas más; sólo un par de cuestiones que se le han escapado a nuestro amigo y que considero pertinentes.

La liga profesional -vaticino- tendrá muy poco de “profesional”. Empezando por los campos en los cuales se jugará. No existe uno solo donde se pueda practicar el deporte en el que la pelota ruede como debe. En 15 años, FEDOFUTBOL no se ha preocupado por construir o mantener un campo con la grama oficial para jugar. La institución ha estado recibiendo dinero durante todos estos años y sólo ha “arreglado” el Panamericano de San Cristóbal, y además continúa dando los mismos cursitos de árbitros y entrenadores de todos los años. Esto último para mandar las fotos a la prensa con una breve nota y “hacer el bulto”.  Usted puede hablar con cualquier persona que esté metida en el ámbito futbolístico nacional y que no forme parte de la federación y le dirá lo mismo.

Tampoco es que tengamos la más alta calidad de futbolistas profesionales, sino solo unos pocos que han militado en equipos profesionales fuera del país. Y muchos de ellos, no creo que prefieran abandonar eso para venir a jugar en una liga que recién nace. Si eso llegase a ocurrir, tendrían que ofrecerles a esos jugadores una suma de dinero considerable. Otro detallito tiene que ver también con los incentivos y premios de la liga. ¿Cómo van a ganar dinero los equipos? ¿Con las taquillas? ¿El patrocinio? Ninguna empresa desembolsará una millonada para pagar a jugadores de un equipo que irán a ver, a lo sumo, unas 300 personas. ¿Podría equivocarme?

Todo lo referente a la nueva liga se está manejando con cierto secretismo, evitando las “malas lenguas”, como la mía y la de Ferretti. Y tal vez, porque se acercan las elecciones, y puede ser una carta bajo la manga de Osiris Guzmán, para una vez más, aprovecharse de las cámaras y sumarse puntos. Porque, al parecer, no le basta ya tener asociaciones fantasmas para ganar.

Así que tendremos una liga profesional a como dé lugar. Tengamos o no campos para jugar, patrocinadores comprometidos, partidos televisados, jugadores profesionales y árbitros oficiales. Lo que se anunció va, porque si no, será un fracaso mayúsculo de la FEDOFUTBOL.

El fracaso no es algo que asuste a Osiris o sus acólitos. Al contrario, tienen 15 años fracasando y siguen ahí, y probablemente seguirán ahí. A no ser que los presidentes de las asociaciones obvien el chequecito o los viajes y voten en contra en las próximas elecciones.

Pero alguien mencionaba los logros de esta gerencia. Cuestionaba una persona -que no quiere identificarse-  a Massimo Ferretti en su artículo, con un comentario diciendo que si no sabía él (Ferretti) de los logros de Osiris Guzmán y la selección al nivel Antillano. ¿Qué logros?, se preguntarán muchos, como lo hago yo. Si se refiere al puesto del ranquin de la FIFA, pues muy equivocado está, y prueba de eso es la forma en que nos hemos clasificado para la próxima ronda de la Copa Caribe.  Estamos en el puesto número 12 del ranquin, por encima de El Salvador. No obstante, jugamos contra San Vicente y las Granadinas (no.16 en el ranquin), y perdimos 0-1. Pero peor aún, perdimos el segundo juego 2-1 frente a Antigua y Barbuda (no. 19).  ¿Ese es el logro Antillano?

Nos vanagloriamos de vencer a Anguilla 10-0 y clasificar como mejor tercero, gracias a los resultados peores de otros equipos. Es decir, pasamos por lo pelos.  Inmediatamente celebramos el pase a la próxima fase y el primero en salir en la foto con el equipo en el Aeropuerto de Las Américas adivine usted quién fue.

Otro de los cuestionamientos de quien comentaba –probablemente justificando su salario-, era que él, Ferretti, aspira a la presidencia para concentrar los recursos que recibe la institución en el polígono central. Primero que todo, dudo mucho que a Ferretti le interese la presidencia. No la necesita para trabajar en el fútbol dominicano, de hecho, lo viene haciendo desde hace años sin ayuda de la FEDOFUTBOL, y ha hecho más en ese tiempo que la propia organización en 15 años. Una alianza sería provechosa, como lo hicieron con la Asociación de Fútbol del Distrito Nacional, pero asumir ese papel lo sacaría de lo que probablemente el disfruta más, que es su propio club. Pero además, eso mismo que reclama el comentarista anónimo es lo que ha hecho Guzmán en San Cristóbal. Todos los recursos que recibe los invierte en su ciudad. Incluso hasta los recursos que le dan específicamente para reparar,  por ejemplo, el Parque del Este, un estadio que no está dentro del polígono central.

También hablaba el señor de cómo ha llevado el fútbol a los campos. Eso ni lo voy a responder. Porque no vale la pena. Nada más por el hecho de que en muchos campos donde hay asociaciones, ni siquiera hay equipo de fútbol.

Quisiera terminar haciéndole un llamado a la comunidad de fútbol del país: Háganse sentir, demuestren su descontento, apoyen las buenas causas y no se dejen engañar tan fácilmente por los espejismos y hologramas que fabrica nuestra federación. No son más que eso. El cambio es inminente.