Hace largo tiempo que me interesé en los orígenes históricos de algunos acontecimientos, en la diversidad étnica y en la justicia social como temas de estudio. Recientemente me pregunté, ¿Pueden las plantas, los cultivos y el hábitat ser también indicadores de orígenes históricos, diversidad étnica y justicia social? Tal y como lo he mencionado antes en esta columna, comencé a investigar y cultivar “plantas nativas de Florida” porque estas crecen mejor en los ambientes en los que han prosperado antes durante muchos años. Fue entonces cuando me convencí de que las plantas nativas pueden ser también indicadores de la historia de una zona.

PLANTAS NATIVAS DE FLORIDA. La denominación, “planta nativa de Florida” se refiere a cualquier especie de planta que apareció en o llegó al estado de Florida antes de la llegada de los europeos a este territorio. En esta categoría se incluyen también las especies que existieron antes de la ocupación, impacto o alteración significativos del entorno por la actividad humana, en otras palabras, antes de los pueblos prehistóricos.

Desde la costa noroeste de Florida con sus suaves acantilados y cañadas secas, pasando por el centro de Florida con las praderas hasta llegar a los Cayos de Florida, el “Estado del Sol” es un territorio rico en biodiversidad. Sin embargo, la diversidad de flora y fauna del estado enfrenta muchas dificultades, tales como la pérdida de hábitat como producto de la desforestación, la introducción o intromisión de especies de plantas invasivas, la competencia por el uso del espacio, las sequías, y los cambios climáticos.

Más o menos la sexta parte del estado de Florida ha sufrido cambios como consecuencia de la intervención humana, sobre todo a lo largo de las costas. Aproximadamente la mitad del estado está aún cubierto por bosques, pastizales, pantanos y otros tipos de vegetación natural. La mayor parte del resto de estas áreas naturales son reservas protegidas por la legislación de conservación del territorio de Florida; estas áreas representan más o menos la tercera parte del estado. A pesar de todo lo enunciado con anterioridad, a algunas plantas invasivas que no son nativas del estado se les ha permitido ocupar mucho del terreno de las áreas consideradas silvestres.

Muchos de los floridanos son fanáticos acerca del cultivo de plantas nativas en sus jardines y propiedades. El lema que los describe es, “si no es nativo, arráncalo”. Mi interés acerca de las plantas nativas, como consecuencia de mis estudios en antropología y sociología es más práctico y antropológico. Me gustan las plantas nativas, además de otras plantas, porque tal y como lo he expresado antes, estas revelan el pasado prehistórico, así como la historia reciente del área. Me gustan no solo las plantas nativas, sino también algunas que llegaron más tarde, especialmente por medio de la intervención de los grupos humanos procedentes de diferentes partes del mundo.

PLANTAS NATIVAS DEL CARIBE. Las plantas nativas de la cuenca del Caribe, conocido también como West Indies, han sido influenciadas o condicionadas por la geografía de la región, que se evalúa como muy variada y que cuenta con numerosos hábitats y microclimas capaces de sostener una gran variedad de plantas. Estas islas originariamente estaban casi totalmente cubiertas por bosques de varios tipos cuando los europeos llegaron hace más de quinientos años. Estas plantas nativas y su ambiente natural fueron destruidos por el desarrollo de ciudades, pueblos, plantaciones, y cultivos en toda la región.

La cantidad de bosque que subsiste en la actualidad en estas islas varía de un 3.2% (en Haití), a cerca de 84% (en Bahamas), con un promedio de 25% para toda el área del Caribe. La mayoría de las islas tienen, sin embargo, entre 21 a 30 por ciento de su territorio cubierto por árboles que forman bosques naturales, bosques secundarios y, a veces, hasta plantaciones activas o abandonadas que se asemejan a bosques.

EN FLORIDA. Cuando comencé a reflexionar acerca de las plantas nativas, hace años ya, fue cuando mi esposo y yo compramos una propiedad en el condado Glades que está en el centro de Florida, al oeste del lago Okeechobee. En la actualidad las tierras de este condado se destinan en casi su totalidad a la agricultura, el pastoreo, huertos y haciendas; esto además de praderas silvestres. Cuando traté de cultivar plantas traídas de Miami en la nueva propiedad conocí el fracaso como consecuencia del frío invierno. Entonces fue cuando empecé a estudiar acerca de las plantas nativas y las introduje allí porque crecen bien, requieren menos mantenimiento.

Los humanos y las plantas en la historia del condado Glades. En su origen esta área fue ocupada por la “Cultura Belle Glade” desde los años 1000 antes de nuestra era. Más tarde, alrededor de los años 300 de nuestra era los indios calusas se instalaron en el área. El auge de esta ocupación se sitúa entre los años 550 a 800 de nuestra era. Su asentamiento se erigió en el punto de intersección de la rutas de intercambios comerciales de norte a sur y de este a oeste. Los indios calusas construyeron canales que conectaban los ríos principales con otros depósitos de agua. Parece que algunos indios taínos vinieron desde el Caribe en canoas y entraron en Florida alrededor de lo que es hoy el área de Fort Myers. Ellos navegaron en sus canoas río arriba en el río Caloosahatchee hasta el lago Okeechobee e interactuaron con los indios locales; según parece, trajeron con ellos algunas de sus plantas y comestibles.    

La aparición de los indios seminolas en el área. El Ejército y la Marina de los Estados Unidos incursionaron en esta zona durante la Tercera Guerra Seminola de 1853 a 1855. La intención que traían estos cuerpos armados era desalojar a los nativos de algunas partes del estado. Después de la Guerra Civil Americana de 1865 algunos esclavos liberados y escapados emigraron hacia el sur, hacia esa zona del país. Algunos de ellos se asentaron en Florida junto con los indios de la tribus seminolas quienes a su vez había viajado hacia el sur donde eran conocidos como indios de la tribu creek. Todos estos pueblos contribuyeron al entorno vegetal con los recursos de sus propias culturas; por eso introdujeron el cultivo del maíz y el tabaco de las culturas indias, por ejemplo. Algunos pobladores aprendieron a comer frutos de algunas de las plantas nativas y así enseñaron a los demás a adoptar estos patrones alimentarios.

Más tarde llegaron los pobres granjeros blancos con sus familias desde el sur del estado Georgia. Estos eran agricultores que cultivaban vegetales para consumo propio y para la venta en los pueblos cercanos situados más al sur. Ellos fueron quienes comenzaron la siembra y el cultivo de la piña en plantaciones.

Todo el recuento que consta más arriba permite apreciar que además de las plantas nativas que se encontraban en el área antes de los asentamientos humanos, algunas plantas fueron introducidas por varios grupos taínos desde el Caribe, luego por los exesclavos negros y los blancos que ingresaron en la zona desde el norte, en su mayoría del sur de Georgia. En época posterior se fomentó la crianza de ganado vacuno que se exportó a Cuba desde el puerto de Fort Myers. Un poco más tarde se comenzó con las plantaciones de azúcar de caña. Finalmente, los inmigrantes han sido los norteños que viajan al sur en busca de un retiro en un clima más benigno. Todos estos grupos humanos han contribuido a la gran variedad de plantas que existe en la actualidad en el estado de Florida.

[En la próxima entrega se entrará en el detalle de las diferentes plantas nativas].