A pasos acelerados avanzan los trabajos de construcción en el trazado de la nueva circunvalación del Gran Santo Domingo (GSD), la cual conectara el Puerto de Haina con el Puerto Caucedo en un trayecto de unos 62.5 Kms.; el proyecto ha sido diseñado en dos fases, una primera correspondiente al tramo I que abarca desde el puerto de Haina, pasando por la carretera Sánchez y la autopista 6 de Noviembre, hasta empalmar con la Autopista Duarte, en el kilómetro 24 (17.5 Kms.) y luego una segunda correspondiente al tramo II, desde el la Autopista Duarte hasta Boca Chica (45 Kms.). El trazado en construcción define un nuevo anillo periférico que vincula los municipios de la provincia de Santo Domingo con la provincia de San Cristóbal.

El Ministro de Obras Publicas precisó: “El objetivo central que se persigue con esta importante vía es descongestionar el tránsito vehicular en el Gran Santo Domingo, en especial en áreas céntricas de la Capital”. Esta disminución del tránsito vehicular sería el resultado de conducir los movimientos motorizados que se realizan entre las distintas regiones del país (norte-sur-este), hacia la nueva circunvalación impidiendo que estos deslazamientos se produzcan con libertad a lo interno de la zona metropolitana del Gran Santo Domingo.

Ante el anuncio realizado por el Ministerio de Obras Publicas y Comunicaciones sobre la terminación del tramo II de la Circunvalación para fines de año y la entrega en los próximos días del tramo I, el momento es oportuno para precisar algunos elementos que deben ser considerados para el trazado en cuestión, en cuanto al ordenamiento del uso del suelo y de las actividades en el territorio con la finalidad de alcanzar el objetivo definido.

Un elemento estratégico es la localización de los peajes y su vinculación con los distribuidores en las autopistas que serán conectadas; ante la necesidad de propiciar el desongestionamiento de la zona metropolitana e inducir el tránsito a utilizar las vías periféricas para contribuir a este propósito, los peajes de acceso al Gran Santo Domingo tanto en la Autopista Duarte, en la Carretera Sanchez, en la Autopista 6 de Noviembre y en la Autopista Las Américas deben estar ubicados después de la entrada a estos distribuidores. De esta manera las unidades vehiculares que utilizaran la Circunvalación no estarán obligadas al pago del peaje, mientras que el transito que accede a la zona metropolitana si deberá pagar el peaje correspondiente. Este tipo de medidas, de la cual existe una gran variedad de casos exitosos por todo el mundo, permitirá regular la cantidad de vehículos que entra a la ciudad, contribuye en agilizar los desplazamientos a nivel urbano e incide en reducir el número de unidades vehiculares, disminuyendo los costos de transportación y descongestionando tanto la capital de la nación como los municipios que lo bordean.

La ubicación de estos peajes unido a la eliminación de cualquier otro tipo de cobro o tarifa por rodamiento a lo interno de la circunvalación es el único instrumento que garantizaría el uso masivo de la misma, ante la ausencia de cualquier otro tipo de reglamentación que limite la entrada de vehículos a la zona metropolitana de Santo Domingo.