Gracias a la coordinación entre la política fiscal y la monetaria, la mejoría en el entorno internacional mas una serie de medidas en el ámbito monetario la economía dominicana pudo transitar de un anémico crecimiento de 0.3% en el primer semestre a cerrar 2013 con un crecimiento de 4.1%.

Tan pronto las autoridades del Banco Central advirtieron la ralentización del crecimiento tomaron una serie de medidas como reducir la tasa de interés de política en mayo desde 5% a 4.25%, la Junta Monetaria  modificó el Reglamento de Evaluación de Activos(REA)para elevar  el monto de los créditos cuya calificación de riesgo depende del historial de pago, para facilitar el crédito a los menores deudores, y también se liberaron recursos del encaje legal del sector financiero por un monto de RD$20,189  para ser canalizado a los sectores productivos a una tasa fija máxima de 9% por seis años.

Al 31 de diciembre se habían desembolsado 17,202.8 millones (85.2%), quedando pendientes de prestar RD$2,986.2 millones, que prácticamente ya estaban comprometidos y fueron beneficiados 10,759 usuarios del crédito en los diferentes sectores y en el porcentaje establecido en la resolución. Los sectores fueron la manufactura que ha recibido el 26.2% de los recursos liberados, vivienda (25.9%), agropecuario (19.9%), comercio y mipymes (18.2%) y prestamos de consumo (9.8%).

Cabe destacar que en el sector vivienda fueron financiadas 3,450 unidades y gracias a los recursos del encaje 2,170 familias, de ingresos relativamente bajos, pudieron adquirir una vivienda cuyo precio era inferior a los $3 millones y 394 familias pudieron financiar su vivienda cuyo precio era superior a $3 millones, es decir que 2,564 familias tienen un techo adquirido a una tasa fija  gracias a liberación del encaje.

Estos recursos estimularon un aumento de la demanda por préstamos por encima de lo liberado y el resultado a diciembre de 2013 fue un crecimiento del crédito al sector privado de 16.5% en relación a 2012(en 2012 el crecimiento fue de apenas 5.4%), para un incremento absoluto de RD$84,418.5 millones, 3.2 veces superior al de 2012, e incluso si se compara el periodo de desembolso de los recursos liberados, los prestamos fueron 8.2 veces mayor a los canalizados entre enero hasta que se adoptó la medida.

Ese aumento del crédito, 2.1 veces mayor al crecimiento nominal del producto, se destaca una canalización de RD$63 mil millones a los sectores productivos, entre estos RD$35,694 al comercio y mipymes, agropecuario (RD$6,776 millones), construcción (6,404 millones), hoteles y restaurantes (4,158 millones), y dentro de los préstamos personales, que aumentaron RD$25,583 millones, cabe resaltar que en financiamiento a viviendas se canalizaron RD$10,043 millones.

Gracias a la política fiscal y la monetaria varios sectores lograron en la recta final una solida recuperación y baste citar dos casos: agropecuaria y construcción.

El sector agropecuario,  tras un crecimiento anémico los dos primeros trimestres, creció 7.8% en el cuarto y cerró con un aumento de 4.4% y ese sector se benefició con préstamos del sector financiero por un monto de RD$6,776 millones, mientras el Banco Agrícola aumentó su cartera de préstamos en RD$7,539.7 millones, así como los financiamientos del FEDA. El sector construcción, con tasa de crecimiento negativa los dos primeros trimestres, creció 19.7% en el cuarto trimestre y cerro el 2013 con 7.3%. El sector se benefició con un monto importante de financiamientos, aparte de la aceleración en la construcción de aulas, mejoramiento y/o construcción de 8,197 viviendas por parte del INVI, así como obras viales y asfaltado de calles en todo el país.

La diferencia entre un crecimiento de 0.3% en el primer trimestre y cerrar preliminarmente con un crecimiento del PIB de 4.1%, fue el resultado de las políticas gubernamentales de financiamiento a la agropecuaria, inversión pública distribuida en toda la geografía del país y de manera protagónica las medidas de política monetaria que permitieron elevar de forma sustancial el crédito a todos los sectores productivos y eso fue determinante para que en el cuarto trimestre la demanda aumentara en 5.5%, el consumo en 5.3% y la formación bruta de capital en 6.5%. Y esas son variables claves en el PIB.