Aunque el gobierno presidido por Salvador Jorge Blanco fue durante su ejercicio y con posteridad muy vilipendiado e incluso llevado a los tribunales a instancias del Dr. Balaguer, sus opositores debemos reconocer que en su administración habían cuatro funcionarios que brillaban con luz propia y cuya profesionalidad brindó grandes beneficios al desarrollo de sus respectivas áreas.
Eulogio Santaella, Marcelo Jorge, Pedritín Delgado Malagón y Amiro Pérez Mera representaban por su formación técnica, capacidad de gerencia y visión futurista de sus dominios, un verdadero póker de lujo que transcurridas más de tres décadas de su acertada gestión aún es posible escuchar dentro de la población cantos de alabanza y elogios diversos a sus decisiones.
La historia, que es más sabia y justa que los interesados y parciales juicios proferidos por sus detractores políticos, juzgará el mandato gubernamental del Presidente Medina y de sus variopintos funcionarios, y aunque no desempeño cargo de importancia en el mandato de Osmar Benítez, tener más de 30 años en la institución y ser testigo ocular de su desempeño me autorizan expresar las siguientes apreciaciones.
Por su preparación teórica y sólida experiencia adquirida durante su larga práctica en el campo dominicano, este ministro es irrefutable en sus opiniones, debiéndose resaltar que conoce, tanto la problemática agrícola de Guananico o de una olvidada parcela de la Sierra de Neyba como lo que se cocina en Silicon Valley o en los Centros de negocios agropecuarios de Chicago, es decir, está familiarizado con todos los estamentos.
Para los técnicos medios y superiores del Ministerio de Agricultura –MARD –resulta un envidiable agasajo escucharle cuando discurre o diserta sobre temas que requieren sólidos conocimientos y en particular, una intensa práctica para su compresión, siendo frecuente oírle comentar sobre aspectos apenas conocidos o poco manejados por ingenieros agrónomos, médicos veterinarios o zootecnistas dominicanos que presumen de actualizados.
Ha sido un festejo para mis oídos cuando en diferentes oportunidades y distintas audiencias nos habla sobre el protocolo de transferencia de embriones para el mejoramiento bovino; de cómo afectará positivamente la economía de Constanza las prometedoras características de la pera japonesa; la presencia de variedades de cacao menos absorbentes del Cadmio en Cacao en variadas zonas del país y sobre el uso de binomios caninos para reforzar la inspección sanitaria en puertos, aeropuertos y frontera.
Especialistas o expertos nacionales o internacionales jamás lo podrán sorprender o deslumbrar con conceptos o tecnologías de vieja, mediana o reciente generación, estando en condiciones de alternar con propiedad sobre la situación de los diferentes Cluster, la importancia del Ecostress (ECOsystem, Spaceborne Thermal Radiometer on Space Station), un instrumento que capta el “despertar” de las plantas y de la peligrosidad del Foc R4T para el país.
Desde luego su rol ministerial no se limita a la demostración de una formación técnica pocas veces vista en la institución desde su creación en 1908 –hace 112 años –sino más bien, a la adopción de una serie de medidas destinadas al rescate paulatino de nuestra producción agropecuaria, al adecentamiento físico de los inmuebles donde tienen su asiento sus oficinas y sobre todo, a la redención definitiva de una profesión que se vivía como un castigo, un padecimiento.
Por su carácter aleatorio y dependencia de los caprichos del tiempo, vaivenes del mercado, irrupción súbita de plagas y porqué no, del electoralismo prevaleciente, en este artículo no mencionaré la efectividad de las providencias técnicas tomadas por su gestión, queriendo más bien privilegiar aquellas que han promovido la dignidad profesional y el masivo apoyo de todo el colectivo laboral a los ofrecimientos y ejecutorias de Benítez.
El aumento salarial por categoría dispuesto el pasado año –con un piso de $35,000 –para los agrónomos que trabajan en el MARD; el pago de bonos por desempeño correspondientes a los años 2015, 16, 17; el Seguro Médico para los jubilados y pensionados; el pago del saldo restante para que los técnicos adquieran sus solares en el proyecto SUSAN y el mejoramiento estructural de las áreas de trabajo, se inscriben dentro de las conquistas del colectivo agropecuario.
No debemos dejar en el tintero la asignación de vehículos y motores nuevos a técnicos que resultaron sorprendidos –me consta – por esa prerrogativa, sea porque ignoraban la importancia de su misión o por no estar nunca antes motorizados. Al extenderse el horario de trabajo –hasta las 4pm – hay almuerzo gratuito para todo el personal, concesión que en cierta medida representa una economía en el presupuesto cotidiano.
Se están obedeciendo y formalizando indicaciones del Ministerio de la Administración Pública –MAP – para que todo profesional con título universitario que trabaje en el MARD, y aunque su profesionalidad sea ajena a la agropecuaria –médicos, abogados, etc – sea objeto de una equitativa remuneración de acuerdo a la función que desempeñe, así como un reajuste a todos aquellos cuyas actividades sean afines o complementan el trabajo de los agrónomos.
Estas últimas disposiciones han llenado de optimismo a la totalidad de los empleados al considerarlos muy en consonancia con el encarecimiento de la canasta familiar y de la vida en general, siendo justamente la opinión no solicitada de una empleada no calificada perteneciente a Mayordomía o Servicios Generales, la que en buena medida me invitó a que en la segunda parte de este artículo incluyera la redención gremial emprendida por Osmar.
Al recibirla en su Despacho y con sus palabras me comunicó esto: PJ, primera vez que un Ministro me pone asunto, pero no pude decirle lo que pensaba pues se me aflojaron las rodillas y se me paralizó la lengua. Debemos aquí hacer un movimiento para quien sea que coja la silla en las elecciones lo deje a él en el Ministerio para que siga beneficiando a la clase pobre que aquí trabaja y a los campesinos. Es tan inteligente y comprensivo que merece darle un chance.
Estoy persuadido que el aspecto nada aristocrático ni excluyente de Benítez contribuyó a su fácil acceso y abordaje, pero lo primordial de su folclórico comentario, es el generalizado convencimiento reinante en la institución y los gremios de la gran pericia de su titular en los más diversos temas de la agropecuaria nacional y de las contundentes conquistas alcanzadas por todo el personal que desde mayo 2018 está a su disposición en la sede principal y en el interior del país.