La cancelación de la visita oficial al país del Vicepresidente de los EU Joseph Biden, ha sido un duro golpe a los sectores radicalmente opuestos a la Sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional, pues apostaron a que este señor, cual pro-cónsul en los tiempos del imperialismo, vendría a la RD a dictarle la tarea al Presidente Medina para desconocer los efectos de esa histórica sentencia.
¿Cuál era el objeto de la Visita de Biden al país tras participar en la toma de posesión de Bachelet en Chile?
¿Tratar el caso de las crisis en Venezuela, tema fundamental en la agenda asignada al Vicepresidente? Sería un tema marginal ya que la posición dominicana es de no injerencia en los asuntos internos de Venezuela y esa posición es prácticamente innegociable en vista de los compromisos contraídos con Petrocaribe, que es una pieza esencial en el rompe-cabezas presupuestario de la nación.
¿Dar un respaldo a la gestión del Embajador James Brewster?
El Vicepresidente Biden le tomó juramento al nuevo Embajador, en compañía de su “esposo”, cuando lo habitual es que lo haga el Secretario de Estado, lo cual demuestra sus magnificas relaciones con el activista gay y colaborador financiero de la campaña del Presidente Obama; pero eso no es suficiente para una visita oficial del #2 de la principal potencia mundial.
¿Fue para tratar el tema de la Sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional?
Aparte de los temas comunes, narcotráfico, comercio, cooperación etc., no cabe dudas que la sentencia sería el principal y es posible que la escala oficial de Biden a RD estuviera impulsada por el poderoso Black Caucus, el grupo de representantes afroaméricanos, el mismo grupo que cabildeó y obtuvo del Presidente Obama una cita oficial al mandatario haitiano recientemente.
Para el equipo opositor a la Sentencia 168-13, integrado por las ong´s financiadas desde el exterior, el gobierno haitiano, otros gobiernos de la región, así como el equipo mediático facilitado por una facción del PRD, la visita de Biden era crucial para incrementar las presiones internacionales y seguir chantajeando al gobierno bajo la premisa de supuestas sanciones foráneas y el aislamiento del país. Biden canceló en la víspera, para dolor de esos sectores, y a pesar de las especulaciones, todo parece indicar que fue por la crisis en Ucrania, ya que junto al a Obama recibió al Presidente de esa nación el pasado miércoles..
Ese equipo no para mientes en sus propósitos de lograr sanciones económicas al país o de torcerle el brazo al gobierno, violando la Constitución, para que asumamos la responsabilidad, rehuida por el estado haitiano, de dotar de documentación a sus nacionales y asumir la carga económica, social y política de una inmigración masiva que en pocos años se podría convertir, si lo permitimos, en una minoría decisiva para incidir en los destinos nacionales.
Han llegado tan lejos que se han infiltrado en palacio e incluso redactaron un anteproyecto de naturalización que representa un burdo intento anti-constitucional de vulnerar la sentencia utilizando como instrumento a los propios poderes del estado: el Legislativo y el Ejecutivo.
Pero seguirán fracasando porque no es cierto que el Presidente Medina, que habló tan claro y contundente en La Habana, va a someter un proyecto a todas luces inconstitucional, tampoco los legisladores van a cometer esa inequidad, y si aun todos se equivocan, el propio Tribunal Constitucional asumirá su responsabilidad histórica.
Los dominicanos y las dominicanas estamos conscientes que en esta batalla se libra el futuro de la República, la posibilidad de vencer la pobreza, la posibilidad de seguir como una nación sin diferencias étnicas, la garantia de mantener la paz social y el progreso. Por eso debemos seguir unidos en torno a la Sentencia 168-13 y el cumplimiento por parte del gobierno de los elementos vinculantes.