Dado el agua tener un rol fundamental en la preservación de la vida terrenal, su uso y conservación ha sido una preocupación permanente durante el desarrollo de los pueblos, sobretodo, porque todas las civilizaciones se han desarrollado basada en la imprescindible existencia de la misma, siendo aún hoy en día en nuestros tiempos un sueño para casi 1.000 millones de personas en todo el mundo, pese a los avances logrados por la humanidad.

Tomando como soporte lo ya indicado, una de los principales objetivos y estrategias del Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD), es la vital preservación del medio ambiente y de los recursos hídricos, entendiendo, que debe promoverse el desarrollo en nuestro país, pero en forma armónica y planificada, para evitar seguir generando el deterioro del hábitat y especialmente de nuestras fuentes hídricas, causada al asumirse iniciativas en procura de soluciones de asuntos inmediatos sin la debida prudencia e inteligencia ni importarnos el futuro de nuestros ríos y sus fuentes hidrográficas.

En tal sentido, asume que los problemas del agua en nuestra nación y las demás del mundo, no se deben tanto a la escasez sino a una mala gestión del recurso. Es una cuestión de buena dirección, en las condiciones actuales, la búsqueda de un futuro de progreso, exige más que nunca la colaboración entre los sectores públicos y privados, una buena orquestación de iniciativas y esfuerzos, en consecuencia, el CRD entiende que el Estado Dominicano debe poner mayor atención y dedicar más recursos económicos, para lograr que todos los hogares tengan acceso al agua potable y al saneamiento de su hábitat.

Para la entidad, todos sabemos lo que cuesta el agua, pero pocos sabemos lo que vale la misma y no hacemos lo necesario para economizarla incluyendo en nuestras casas, y resalta en dicho sentido, que los más afectados por los problemas de falta de agua son siempre los más pobres

En el rumbo correcto que amerita la problemática señalada, la dirección técnica del organismo de desarrollo, estima que la República Dominicana como consignataria de los objetivos del Desarrollo del Milenio que en su punto No. 7 trata sobre las metas relacionadas con la sostenibilidad del medio ambiente, está en obligación de remover obstáculos y fortalecer programas y políticas de probada eficacia en la reducción de la pérdida de recursos ambientales, la protección de la diversidad biológica, el aumento del acceso al agua potable y servicios de saneamiento, así como en el mejoramiento de las precarias condiciones habitacionales en que vive gran parte de la población del país.

Considera que si bien es cierto que según los datos estadísticos de la Organización de las Naciones Unidas relativos a las metas del Desarrollo del Milenio, seguimos trabajando en procura de eliminar las barreras de pobreza en que se encuentra una significativa proporción de nuestra población, sin embargo, dicho organismo ha llegado a la conclusión que respecto al agua potable y al saneamiento ambiental, continuamos atrasados y que debemos asumir las medidas que les garanticen un futuro cierto a las presentes y futuras generaciones.

Dentro de esta penosa realidad, no importa cuanto se pueda decir o escribir sobre el agua, conforme al parecer del CRD debemos conectar el discurso con la realidad que están viviendo muchos dominicanos que sufren de escasez del preciado líquido.

Para la entidad, todos sabemos lo que cuesta el agua, pero pocos sabemos lo que vale la misma y no hacemos lo necesario para economizarla incluyendo en nuestras casas, y resalta en dicho sentido, que los más afectados por los problemas de falta de agua son siempre los más pobres.

Como nos los traza la sana visión del Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD), corresponde a nuestras instituciones y todos los componentes de la sociedad conjuntamente con los estamentos del Estado, entender que el agua y sus problemáticas requieren un nuevo enfoque y ser el centro de las preocupaciones de la gente, por ser vital para su alimentación y calidad de vida, además, comprender que si bien es cierto que el agua es una realidad global, su problemática concreta siempre será local.