El deporte forma parte integral del ser humano en todas las latitudes.  Los movimientos motores del organismo, se desarrollan y potencializan con la práctica del deporte.  Además, desde el punto de vista de la salud –lograr y sostener niveles adecuados de los indicadores biofísicos- requiere del entrenamiento deportivo o, en su defecto, alguna actividad o ejercicio físico que lo sustituya.

La educación académica unida a la educación física, constituyen un andamio apropiado para el desarrollo integral de la mente y el cuerpo. Y quienes logran poner ambas en marcha, respetando sus normas y principios, asegura gran parte de su éxito futuro.

Conscientes de lo expuesto, las autoridades del país, dieron inicio formal a la celebración de Los Juegos Deportivos nacionales, celebrándose su primera versión en 1937, en cinco disciplinas y con la participación de 300 atletas.  La segunda versión de estos juegos ocurrió en 1968, luego de un receso de 31 años.  En la actualidad, dicho juegos deben ser celebrados cada dos años, contando que se espera la versión XIII, con representantes regionales de todo el territorio.

Los Juegos Deportivos Nacionales, han sido la plataforma de lanzamiento del deporte dominicano y donde han surgido sus luminarias deportivas, que orgullosamente nos representa en eventos nacionales e internacionales.  En nuestra época como atleta selección nacional, los equipos de naciones como Cuba, Estados Unidos, Brasil, Canadá, etc., se mostraban psicológicamente “superiores” debido a su procedencia, trato especial que estos países dan a sus atletas y por sus estadísticas acumuladas.

Hoy, en El Día del Deporte Dominicano, debemos reconocer que esos tiempos ya pasaron y que tenemos muchos atletas como Félix Sánchez, Pedro Martínez, Pedro Julio Nolasco, Wanda Rijo, Juan Marichal, Maricela Peralta,  Mario Álvarez, David Ortiz, Sammy Sosa y otros, en todas las disciplinas, por descubrir y pulir.

El deporte dominicano, seguirá dando brillo al país, si contamos con la inversión sostenida y puesta en manos de dirigentes honestos, visionarios, trabajadores como Wiche García Saleta, Roque Napoleón Muñiz, José Joaquín Puello, Rolando Miranda, Nelly Manuel Done, Bienvenido Solano, Luis Elpidio Cumba, Luisón Mejía, Bolo Vicioso, Luis Scheler Ortiz, Thimo Pimentel, José Antonio Rodríguez Conde, Cuqui Córdova, Jay Payano, Cesar Cedeño, Cristóbal Marte, entre otros al tiempo de contar con una prensa deportiva tan entusiasta como Tomas Troncoso, Leo Corporán, Félix Acosta Núñez, etc.

Hoy que nos encontramos desesperanzados, pesimistas, tímidos, con problemas económicos, sociales y poca o ninguna credibilidad hasta en nosotros mismos, tal vez, es hora de que nos “salve” un deportista, unificando a la sociedad dominicana con propósitos comunes.