Las fechas patrias tienen para todo país, un significado de gran profundidad y trascendencia, por lo que su celebración encierra importancia capital en la vida de los pueblos, pues nos recuerda los hechos heroicos, consolida la conciencia de pertenencia a la Nación, y da sentido de continuidad histórica.

Asimismo, la simbología patria tiene gran importancia para las naciones, puesto que nuestros símbolos representan nuestros valores, esencia, nuestra historia y aspiraciones; nos distinguen de los demás pueblos y nos identifican ante estos, logrando unirnos en torno a ellos, inculcando en nuestra conciencia el sentido de permanencia en el tiempo; llevando a nuestro entendimiento la determinación de preservar nuestras tradiciones y nuestro patrimonio natural y cultural.

Por eso enaltecemos y celebramos los natalicios de nuestros patricios y héroes, que se entregaron en cuerpo y alma para hacernos libres e independientes, ya de españoles, ya de franceses, ya de haitianos.

Es tal la importancia de recordar y honrar nuestras glorias históricas y nuestros héroes patrios, que por eso, en nuestra Constitución, que es Ley de leyes, la Carta Magna de la Nación, la que debe estar por encima de todo y de todos; los firmantes en su preámbulo, al proclamarla, Invocan el nombre de Dios, se guían por el ideario de los Padres de la Patria y de los próceres de la Restauración en su afán de establecer una República libre, independiente, soberana y democrática; declaran que se inspiran en los ejemplos de lucha y sacrificio de nuestros héroes y heroínas inmortales; que los estimula el trabajo abnegado de nuestros hombres y mujeres; y terminan declarando su voluntad de promover la unidad de la Nación dominicana. (Ver Preámbulo de Constitución Dominicana 2015).

También por eso la propia Constitución en la parte in fine de su Artículo 10 al referirse al Régimen fronterizo, declara como supremo y permanente el interés nacional de la difusión de los valores patrios y culturales del pueblo dominicano, veamos: “Se declara de supremo y permanente interés nacional la seguridad, el desarrollo económico, social y turístico de la Zona Fronteriza, su integración vial, comunicacional y productiva, así como la difusión de los valores patrios y culturales del pueblo dominicano…” (nótese que el legislador tuvo muy en cuenta lo concerniente a la Zona Fronteriza, dándole un carácter fundamental para el interés nacional, por lo que en otra entrega nos referiremos a estos mandatos de la Constitución a los que nuestras autoridades han hecho caso omiso).

En la República Dominicana en los tiempos actuales, se hace menester, realzar y darle mayor esplendidez a las celebraciones patrias. Es triste reconocer que estas han ido decayendo. Se percibe que manos maestras laboran en la oscuridad para ir sacando de la conciencia nacional dominicana el respeto y exaltación de nuestra historia patria y de nuestros símbolos. Desde dentro se viene llevando a cabo esta labor, y los más llamados a revertir este estado de cosas, se hacen de la vista gorda.

Desde el pasado día 26 de enero, natalicio del Padre de la Patria Juan Pablo Duarte, se celebra en la República Dominicana el Mes de la Patria, que termina el 27 de febrero, fecha de nuestra Independencia Nacional. Unos cuantos años atrás, se daba a dicha celebración gran brillantez, y muchos y variados actos de exaltación de los valores patrios se llevaban a cabo durante todo este período; pero venimos notando un enfriamiento de estas celebraciones. Se percibe que algunos sectores tratan de ir desentronizando de la conciencia del pueblo, su propia historia.

¡Dominicanos!, Veneremos y encumbremos cada día más la figura excelsa de Juan Pablo Duarte, el espíritu aguerrido de Matías Ramón Mella, y el trabajo abnegado de Francisco del Rosario Sánchez; no olvidemos nunca las conmemoraciones de los natalicios de nuestros héroes independentistas y restauradores; no olvidemos nunca que somos un pueblo valeroso que ha sabido emerger del oprobio, del infortunio de los yugos opresores extranjeros que han querido desconocer nuestro libre albedrío; no olvidemos nunca nuestras tradiciones, nuestros valores culturales y nuestra identidad. Recordemos siempre que el 27 de febrero de 1844, estos prohombres rompieron para siempre las cadenas de la opresión y de la indignidad a la que fuimos sometidos por 22 largos años; no olvidemos nunca que luego de independizarnos, los dominicanos tuvimos que defender durante doce años nuestra independencia de las invasiones haitianas, en las siguientes batallas:

Batalla de la Fuente del Rodeo el 13 de marzo de 1844

Batallas de Cabeza de las Marías y Las Hicoteas el 18 de marzo de 1844

Batalla del 19 de Marzo de 1844

Batalla del 30 de Marzo de 1844

Batallas del Memiso y de Tortuguero, el 13 de abril 1844

Batalla de Cachimán, el 17 de junio de 1845

Batalla de la Estrelleta, el 17 de septiembre de 1845

Batalla de Beller, el 28 de octubre de 1845;

Batalla del Número el 17 de abril de 1849

Batalla de las Carreras el 23 de abril de 1849;

Batalla de Santomé el 22 de diciembre de 1855

Batalla de Cambronal 22 de diciembre de 1855

Batalla de Sabana Larga el 24 de enero de 1856

Estas son las batallas que consolidaron nuestra independencia, que es lo que celebramos este Mes de la Patria. En ellas corrió la sangre de muchos patriotas que entregaron sus vidas por legarnos una patria, por lo que debemos tener presente y resaltar todos estos hechos que nos hicieron un pueblo libre e independiente; al que ahora nos toca enrumbarlo por el camino del progreso, de la paz social, donde haya una justicia sana, sin desigualdades ni privilegios; en donde sobre los corruptos caiga todo el peso de la ley y vayan a parar donde tienen que estar, tras las rejas.